(CNN) – Pueden haber pasado tres meses desde que Argentina levantó el trofeo de la Copa del Mundo en Qatar, pero las celebraciones en la nación sudamericana no muestran signos de disminuir.
La selección argentina se prepara para jugar dos amistosos en casa contra Panamá y Curazao en los próximos seis días, aunque el fútbol en sí es probable que sea poco más que una nota al pie.
Es la primera vez desde aquellas escenas caóticas en Buenos Aires en los días posteriores al Mundial que los héroes de Argentina regresan a casa, y se planearon muchas cosas para lo que es esencialmente un desfile prolongado del trofeo entre los dos amistosos.
Según ESPN, habrá un DJ y bandas de música antes, después y durante el descanso del partido de este jueves contra Panamá, así como una película sobre el entrenador Lionel Scaloni y una canción en el estadio al ritmo de “Muchachos”, el éxito de 2003 que se convirtió en el himno no oficial de Argentina durante el Mundial de Qatar.
Para terminar la noche, el equipo hará desfilar el trofeo del Mundial por el estadio Monumental, en Buenos Aires. Según ESPN, se solicitaron más de 1,5 millones de entradas para el partido.
Argentina, como es lógico, está en plena efervescencia.
Los videos que circularon por las redes sociales a principios de esta semana mostraban a una multitud de hinchas —cientos sería una estimación conservadora— frente a un restaurante donde estaba comiendo Lionel Messi, capitán y talismán de la selección nacional.
Toda la calle estaba abarrotada, salvo un pequeño paso habilitado para Messi y su coche. Muchos aficionados se acercaron a la salida del establecimiento, intentando tocar a su ídolo, mientras un radiante Messi se abría paso a través de un pequeño sendero excavado por la policía.
A continuación, la selección llevará el trofeo de la Copa Mundial a Santiago del Estero, en el norte de Argentina, donde el martes de la próxima semana se enfrentará a Curaçao en el Estadio Único Madre de Ciudades.