(CNN) – Una mujer estadounidense fue detenida en Sydney tras llegar en un vuelo procedente de Los Ángeles con un arma de fuego bañada en oro de 24 quilates en su equipaje.
La mujer, de 28 años, que llegó a Sydney este domingo, no tenía permiso para importar o poseer un arma de fuego en Australia, según informó la Fuerza Fronteriza Australiana (ABF por sus siglas en inglés) en un comunicado.
Australia tiene algunas de las normas más estrictas del mundo sobre tenencia de armas, y es ilegal que una persona importe “intencionadamente” armas de fuego sin autorización previa. La pena máxima por este delito en Australia es de 10 años de prisión.
La mujer, que no fue identificada en el comunicado, compareció este lunes ante un tribunal local y quedó en libertad bajo fianza. La situación de su visado y la continuación de su estancia en Australia dependen de los tribunales. Según el resultado, podría ser expulsada del país, de acuerdo con la ABF.
El comandante de la ABF, Justin Bathurst, declaró que la detención ponía de manifiesto la diligencia de los agentes del cuerpo y la sofisticación de la tecnología de detección del país.
“Los funcionarios de la ABF se comprometen a proteger a nuestra comunidad colaborando con las fuerzas del orden para evitar que artículos como las armas de fuego no registradas pasen por la frontera”, añadió Bathurst en el comunicado.
A menudo se pone a Australia como ejemplo de cómo una acción decidida de control de armas puede conseguir reducir las muertes por armas de fuego.
El país aplicó medidas radicales de control de armas después de que un atacante solitario asesinara a 35 personas en Port Arthur (Tasmania) en abril de 1996.
Se prohibieron los rifles y escopetas de tiro rápido, se reforzaron las licencias para los propietarios de armas y las armas de fuego restantes se registraron con arreglo a normas nacionales uniformes, junto con un plan de recompra y amnistía de gran éxito en todo el país.
La violencia armada alcanzó niveles récord en Estados Unidos, que es el único país del mundo donde el número de armas de fuego de uso civil supera al de personas. En Australia, solo hay aproximadamente 14 armas por cada 100 personas, frente a las 120 por cada 100 de Estados Unidos, según el Small Arms Survey (SAS), con sede en Suiza.
Estados Unidos también tiene más muertes por violencia armada que cualquier otro país desarrollado per cápita. La tasa en Estados Unidos es ocho veces mayor que en Canadá, 22 veces mayor que en la Unión Europea y 23 veces mayor que en Australia, según datos del Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) de 2019.