(CNN) – Fue casi la despedida perfecta de un cuento de hadas.
Cuando el Liverpool perdía 1-0 contra el Aston Villa y se encontraba ante una derrota que habría puesto fin a toda esperanza matemática de terminar entre los cuatro primeros y clasificarse para la Champions League la próxima temporada, Roberto Firmino salió del banquillo y marcó el gol del empate en el minuto 89 en su último partido en Anfield.
Firmino creó muchos goles para Mo Salah a lo largo de los años, pero esta vez le tocó al egipcio convertirse en el proveedor: su centro encontró a Firmino en el centro del área y el brasileño lo empujó a la red.
Pero ni siquiera el empate pudo empañar la emoción de la ocasión, ya que Firmino lloró ante el homenaje que le rindió el público.
Los aficionados del Liverpool agitaron camisetas y gritos de “Si Señor” resonaron en Anfield mientras los compañeros de Firmino formaban una guardia de honor para él y otros jugadores que se marchan, como James Milner, Alex Oxlade-Chamberlain y Naby Keita.
“Desafortunadamente, no conseguimos la victoria, no fue el resultado que uno quiere”, dijo Firmino después, según el sitio web oficial del Liverpool.
“Pero el último partido en casa con los aficionados, mi familia aquí, todos, amigos, estaba muy emocionado y feliz por esto, por marcar mi último gol en casa. Con esta camiseta, este gran club, estoy muy feliz”.
Desde que fue fichado por el exentrenador Brendan Rodgers en 2015, el popular brasileño se convirtió en uno de los pilares del equipo que construyó Jürgen Klopp, ganando el título y la Champions League durante su etapa en el club… y marcar el sábado supuso su gol número 110 con el Liverpool.
“Al principio, cuando llegué, me costó adaptarme al clima, al fútbol, a todo. Como para todos los jugadores, es lo mismo”, dijo Firmino, según el sitio web del club.
“Pero gracias a Dios, aquí lo conseguimos todo, lo ganamos todo juntos. Sin mis compañeros, mi familia, el entrenador, no se puede hacer esto. Estoy muy orgulloso de la historia, por todo lo que hemos conseguido juntos”.
Y los aficionados del Liverpool se aseguraron de que habrá un recuerdo de Firmino en la ciudad durante un tiempo más, inaugurando un mural pintado en una pared cercana al estadio en honor a sus logros en el club.