(CNN) – Cuando Rafael Nadal anunció su ausencia del Abierto de Francia a principios de mes, parecía el principio del fin de una era.
Tras sufrir una lesión de cadera desde el Abierto de Australia, Nadal, 14 veces campeón en Roland-Garros, se pierde el segundo Grand Slam del año por primera vez desde su debut en 2005.
También anunció que el año que viene será su último en el tenis profesional, lo que, cuando llegue, será un momento decisivo en la historia de los grandes de tierra batida, una competición que Nadal ha dominado durante tanto tiempo.
De momento, lo más importante es saber quién ganará el Abierto de Francia de este año en París, que comienza este domingo y concluirá el 11 de junio.
Cómo verlo
En Estados Unidos, el Abierto de Francia se puede ver en la cadena NBC, el servicio de streaming Peacock, Tennis Channel y Bally Sports. En Europa, excepto en Francia, el torneo se emite en Eurosport.
La lista de emisoras internacionales y el cuadro completo están disponibles en la página web del Abierto de Francia.
Cuadro masculino muy abierto
Carlos Alcaraz, primer cabeza de serie, es un especialista en tierra batida y llevaba 12 partidos invicto antes de sufrir una sorprendente derrota contra Fábián Marozsán, número 115 del mundo, en el Abierto de Italia.
Si quiere conquistar su segundo gran título, el tenista de 20 años tendrá que superar en semifinales a Novak Djokovic, dos veces campeón del Abierto de Francia.
Una victoria en París permitiría a Djokovic ganar su 23º título de Grand Slam y superar a Nadal en el primer puesto de la lista de tenistas masculinos de todos los tiempos, afianzándose aún más como el mejor tenista masculino de la historia.
Pero el serbio, vencedor en el Abierto de Australia a principios de año, ha pasado apuros esta temporada en tierra batida, sin pasar de cuartos de final en tres torneos y perdiéndose otro por una lesión en el codo.
“Ya está aquí una nueva generación”, dijo Djokovic tras su derrota en cuartos de final del Abierto de Italia.
“Quiero decir, Alcaraz es el número 1 del mundo desde [el 22 de mayo]. Obviamente, está jugando un tenis increíble. Creo que también es bueno para nuestro deporte que haya caras nuevas, chicos nuevos. Es normal.
“Llevamos años diciéndolo, que podemos esperar que llegue, que llegue ese momento en el que se produzca una especie de relevo generacional”.
El hecho de que Djokovic no haya ganado ningún título desde el Abierto de Australia y la sorprendente derrota de Alcaraz en Roma quizás den esperanzas a algunos de los otros aspirantes en París este año.
Daniil Medvedev, campeón del Abierto de Italia la semana pasada, atraviesa un excelente momento de forma y tiene la ventaja de encontrarse en el lado opuesto del cuadro al de Alcaraz y Djokovic.
Casper Ruud y Stefanos Tsitsipas, ambos ex finalistas del Abierto de Francia, confían en tener una buena actuación, mientras que Holger Rune, sexto cabeza de serie, parece ser una estrella para el futuro tras eliminar a Djokovic en el Abierto de Italia.
Surgen las ‘tres grandes’
En el cuadro femenino, la bicampeona del Abierto de Francia, Iga Swiatek, es la favorita, aunque no ha mostrado el mismo dominio en tierra batida que el año pasado, cuando se alzó con el título como parte de una racha récord de 37 victorias consecutivas.
Aryna Sabalenka y Elena Rybakina, segunda y cuarta del mundo respectivamente, se han erigido en feroces rivales de Swiatek en la cima del tenis femenino y ambas han derrotado a la polaca en el último mes.
Ese trío, al que algunos llaman ahora el “Big Three”, ha triunfado en los cuatro últimos Grand Slam: Swiatek en los Abiertos de Francia y Estados Unidos, Rybakina en Wimbledon y Sabalenka en Australia.
“Las condiciones de París deberían favorecer a Swiatek, se siente cómoda allí y está demostrando que definitivamente está jugando a un alto nivel de tenis”, dijo la experta de Eurosport y ex número 7 del mundo Barbara Schett antes del torneo.
“Creo que es bueno para Iga tener a estas dos jugadoras [Sabalenka y Rybakina] que pueden desafiarla y hacer que se mantenga en el número 1”, añadió Schett.
Swiatek, que lleva más de un año como número 1 del mundo, podría ser destronada por Sabalenka al frente de la clasificación tras el Abierto de Francia. Comienza su campaña contra la española Cristina Bucșa.
El calendario en el punto de mira
El tenis femenino se ha visto salpicado de polémicas en las últimas semanas, lo que ha puesto de nuevo en el punto de mira la programación del cuadro femenino de Roland-Garros.
En el Abierto de Madrid, se ordenó a las recogepelotas de la pista principal que llevaran camisetas cortas y faldas cortas, y a las jugadoras de la final de dobles no se les permitió hablar después del partido.
Más tarde se cambiaron las faldas de las recogepelotas por pantalones cortos; aunque se mantuvieron los crop tops- y el organizador del torneo, Gerard Tsobanian, declaró que era “inaceptable” no dar a las finalistas la oportunidad de hablar con los aficionados al final de su partido.
Después, en el Abierto de Italia, la final entre Rybakina y Anhelina Kalinina se reprogramó debido a la lluvia y no empezó hasta las 11 de la noche, hora local, del sábado, una situación que la ex jugadora Rennae Stubbs describió como una “abominación”.
La WTA, sin embargo, dijo que retrasar el partido era “lo correcto” en una declaración a Reuters.
Las preguntas sobre la programación pueden persistir en las próximas semanas, dada la forma en que las sesiones nocturnas fueron escrutadas en el Abierto de Francia del año pasado.
Sólo uno de los 10 partidos programados como sesión nocturna en 2022 incluía un encuentro femenino: el de segunda ronda entre Alizé Cornet y Jelena Ostapenko. La directora del torneo, Amelie Mauresmo, explicó cómo el tenis masculino tiene más “atractivo” que el femenino, a lo que Swiatek respondió tachando los comentarios de Mauresmo de “decepcionantes.”
En el Abierto de Francia de este año no falta el atractivo de las estrellas.
Junto al talentoso trío formado por Swiatek, Sabalenka y Rybakina, competirán por el título en Roland-Garros jugadoras de la talla de Jessica Pegula, Caroline Garcia, Coco Gauff y Ons Jabeur, ninguna de las cuales ha ganado un grand slam.