(CNN) – El Ozempic, originalmente un medicamento para tratar la diabetes, tiene una gran demanda en todo el mundo, con celebridades y usuarios de las redes sociales que lo promocionan como un medicamento milagroso para perder peso. Ahora el frenesí se extiende por China, donde la delgadez es un estándar de belleza imperante, lo que ha provocado escasez de ese medicamento en el país.
Las redes sociales chinas, como Douyin y Xiaohongshu, se han inundado de mensajes de usuarios que presumen de haber perdido fácilmente cinco o más kilos en un mes con unas pocas inyecciones de Ozempic, que es el nombre comercial de la semaglutida.
“Se trata de un medicamento milagroso”, según una popular serie de publicaciones en Xiaohongshu, una aplicación social china similar a Instagram. “Sin dieta ni ejercicio, puede reducir peso incluso estando tumbado”.
Ozempic fue aprobado oficialmente en China en abril de 2021 para el tratamiento de la diabetes tipo 2. Pero los usuarios pueden obtenerlo de los médicos para otros usos, o comprarlo en plataformas de comercio electrónico como Taobao y JD.com con recetas de otras personas.
Los expertos médicos afirman que el fármaco puede tener graves efectos secundarios. Estudios e informes de pacientes muestran que muchos de ellos recuperan peso poco después de dejar de ponerse la inyección.
Pero su creciente popularidad en China ha hecho que muchos hospitales y farmacias se hayan quedado sin Ozempic desde finales del año pasado, según el diario estatal People’s Daily Health.
Esto ha causado problemas a los pacientes diabéticos que dependen de este medicamento.
Un médico del Primer Hospital Afiliado de la Universidad Sun Yat-sen, en la megaciudad de Guangzhou, declaró a medios oficiales el mes pasado que el hospital se había quedado sin Ozempic debido a la creciente demanda de pacientes que querían perder peso. Desde entonces, el hospital ha dejado de recetarlo a personas que no padecen diabetes.
Los precios del Ozempic están al alza
El revuelo en las redes sociales fue tan grande que Xiaohongshu puso en marcha una campaña de represión en febrero y eliminó más de 5.000 mensajes en los que se compartían experiencias de pérdida de peso con Ozempic.
La plataforma acusó a muchos de los mensajes de “exagerar” la eficacia del medicamento como adelgazante y advirtió a sus usuarios de que no creyeran “ciegamente” en tales contenidos.
La plataforma también puso en marcha una alerta emergente que recordaba a los usuarios que buscaran el fármaco en Internet que “acudieran a centros médicos oficiales para recibir tratamiento”.
Pero no fue suficiente para calmar el frenesí. Los chinos, sobre todo las mujeres, se enfrentan desde hace tiempo a la presión de ajustarse a unos cánones de belleza que hacen hincapié en una figura extremadamente delgada.
Con el aumento de la demanda, los precios se han disparado en Internet. El coste oficial de una dosis de 1,5 mg de Ozempic es de 478 yuanes (US$ 67) en los hospitales públicos, según la Lista Nacional de Medicamentos Reembolsables de China.
Pero los precios del mismo medicamento oscilan actualmente entre un 36% y un 151% más caros en el sitio de compras en línea Taobao.
Según su fabricante, la empresa farmacéutica danesa Novo Nordisk, Ozempic registró unas ventas de 303 millones de coronas danesas (US$ 44 millones) en China en los nueve meses posteriores a su lanzamiento en abril de 2021.
Al año siguiente, las ventas en el país se multiplicaron por más de siete, alcanzando los 2.200 millones de coronas danesas (US$ 316 millones).
Cubrir la escasez de Ozempic
Se espera que el mercado de medicamentos para adelgazar en China experimente un auge en los próximos años.
Según un informe gubernamental de finales de 2020, más del 50% de los adultos chinos padecen sobrepeso, definido como un índice de masa corporal (IMC) superior a 24,0.
Las ventas totales de fármacos GLP-1, una clase de medicación para la diabetes que incluye la semaglutida, podrían alcanzar un máximo de 40.000 millones de yuanes (US$ 5.600 millones) en China, según una estimación realizada por Tebon Securities, con sede en Shanghái, el pasado mes de octubre. La compañía no facilitó un calendario.
Esto supondría un aumento de más del 600% respecto al tamaño actual del mercado.
Tanto las farmacéuticas occidentales como las chinas quieren hacerse un hueco en este mercado en expansión.
Novo Nordisk ha solicitado al regulador farmacéutico chino la ampliación del ámbito de uso de la semaglutida, según la Administración Nacional de Productos Médicos. En su página web se indica que el regulador recibió la solicitud el sábado.
Los medios de comunicación estatales especularon con que la solicitud se referiría a la pérdida de peso. La farmacéutica no ha respondido a la petición de comentarios de CNN.
Varias empresas chinas han acelerado el desarrollo de versiones genéricas de semaglutida.
Se espera que las patentes de Novo Nordisk para la semaglutida en China expiren en 2026, que es la fecha más temprana en la que los genéricos podrían estar a la venta.
Pero esto está siendo cuestionado.
En junio de 2021, Huadong Medicine, una empresa farmacéutica con sede en Hangzhou, solicitó a la Oficina Estatal de Propiedad Intelectual de China la invalidación de la patente. En septiembre de 2022, la oficina dictaminó que todas las denominadas patentes principales de Ozempic eran inválidas en China.
Novo Nordisk ha recurrido la decisión. Actualmente se está librando una batalla legal en el Tribunal de Propiedad Intelectual de Beijing. Si el tribunal confirma la decisión, podrían salir al mercado numerosas versiones genéricas de semaglutida de fabricantes nacionales.