(CNN) – La proporción de adultos estadounidenses a los que se les diagnosticó depresión varía enormemente en función de su lugar de residencia.
Un nuevo informe publicado este jueves por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) revela que, en 2020, el 18,4% de los adultos estadounidenses dijeron que fueron diagnosticados con depresión alguna vez en su vida, pero, estado por estado, ese porcentaje de adultos oscilaba entre el 12,7% estimado en Hawái y el 27,5% en Virginia Occidental.
“Hubo una variación geográfica considerable en la prevalencia de la depresión, con las estimaciones más altas de depresión a nivel estatal y de condado observadas a lo largo de las regiones de los Apalaches y el sur del valle del Mississippi”, escribieron en el nuevo informe investigadores de los CDC y del Instituto Oak Ridge para la Ciencia y la Educación de Tennessee.
“Este informe proporciona estimaciones actuales de la prevalencia a nivel nacional, estatal y de condado de adultos con diagnóstico de depresión a lo largo de su vida”, escribieron los investigadores. “Estas estimaciones pueden ayudar a los responsables de la toma de decisiones a orientar la asignación de recursos a las áreas donde la necesidad es mayor”.
Los investigadores analizaron los datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo Conductuales de los CDC y observaron de cerca cómo los adultos respondieron a las preguntas de la encuesta en 2020 sobre si alguna vez un médico, enfermera u otro profesional de la salud les había dicho que tenían un trastorno depresivo. Casi 400.000 adultos de los 50 estados y de la ciudad de Washington respondieron a la pregunta sobre la depresión.
Los datos de la encuesta mostraron que los 10 estados con mayor prevalencia de adultos que afirmaron haber sido diagnosticados de depresión con anterioridad eran, en orden descendente: Virginia Occidental, Kentucky, Tennessee, Arkansas, Vermont, Alabama, Louisiana, Washington, Misuri y Montana. Cuando los investigadores analizaron los datos por condados, descubrieron que la prevalencia de la depresión oscilaba entre el 10,7% del condado de Aleutians East Borough, en Alaska, y el 31,9% del condado de Logan, en Virginia Occidental.
Los investigadores también descubrieron que la prevalencia de la depresión en general era del 24% entre las mujeres, frente al 13,3% entre los hombres, y del 21,5% entre los adultos más jóvenes de 18 a 24 años, frente al 14,2% entre los adultos mayores de 65 años. La prevalencia también era mayor entre los adultos de raza blanca y los que tenían menos de estudios secundarios.
Previamente, un informe diferente publicado por Gallup en mayo encontró una prevalencia nacional similar de depresión en Estados Unidos, también encontró que alrededor del 18% de los adultos dicen estar deprimidos o recibir tratamiento para la depresión, un incremento de más de 7 puntos porcentuales desde 2015.
La pandemia de covid-19 pasó una factura innegable en la salud mental. Las tasas de depresión clínica aumentaron de forma constante en Estados Unidos, pero “se dispararon notablemente” en los últimos años, según los datos de Gallup.
“El hecho de que los estadounidenses estén más deprimidos y tengan más dificultades después de esta época de increíble estrés y aislamiento quizá no sea sorprendente”, dijo en mayo la doctora Rebecca Brendel, presidenta de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, que no participó en la nueva investigación. “Hay efectos persistentes en nuestra salud, especialmente en nuestra salud mental, de los últimos tres años que trastocaron todo lo que conocíamos”.
Ahora bien, los expertos subrayan que la concienciación en torno a la salud mental aumentó, lo que podría dar lugar a mayores tasas de diagnósticos, y eso no es malo.
“Cada vez es más fácil hablar de salud mental y considerarla parte de nuestro bienestar general, igual que la salud física”, afirma Brendel. “La gente es consciente de la depresión y busca ayuda para tratarla”.
Deidre McPhillips, de CNN, contribuyó con este reporte