(CNN) – Un equipo de investigadores de Estados Unidos y Reino Unido afirma haber creado las primeras estructuras sintéticas del mundo similares a embriones humanos a partir de células madre, evitando la necesidad de óvulos y espermatozoides.
Estas estructuras embrionarias se encuentran en las fases más tempranas del desarrollo humano: por ejemplo, no tienen corazón ni cerebro. Pero los científicos dicen que algún día podrían ayudar a comprender mejor las enfermedades genéticas o las causas de los abortos espontáneos.
La investigación plantea cuestiones legales y éticas de vital importancia, y muchos países, entre ellos Estados Unidos, carecen de leyes que regulen la creación o el tratamiento de embriones sintéticos.
El ritmo de los descubrimientos en este campo y la creciente sofisticación de estos modelos han alarmado a los expertos en bioética, ya que se acercan cada vez más al límite de la vida.
“A diferencia de los embriones humanos procedentes de la fecundación in vitro (FIV), donde existe un marco jurídico establecido, en la actualidad no existe una normativa clara que regule los modelos de embriones humanos derivados de células madre. Urge una normativa que establezca un marco para la creación y el uso de modelos de embriones humanos derivados de células madre”, declaró James Briscoe, director asociado de investigación del Instituto Francis Crick.
La Dra. Magdalena Zernicka-Goetz describió el trabajo en una presentación este miércoles en la reunión anual de la Sociedad Internacional de Investigación con Células Madre en Boston. Zernicka-Goetz, catedrática de Biología e Ingeniería Biológica en CalTech y la Universidad de Cambridge, explicó que la investigación ha sido aceptada en una prestigiosa revista científica, pero aún no se ha publicado. La investigación fue publicada por primera vez por The Guardian.
Zernicka-Goetz y su equipo, junto con otro de Israel, describieron anteriormente la creación de estructuras similares a embriones a partir de células madre de ratón. Esos “embriones” mostraban el inicio de un cerebro, un corazón y un tracto intestinal tras unos ocho días de desarrollo.
Las estructuras embrionarias que, según Zernicka-Goetz, ha creado su laboratorio se cultivaron a partir de células madre embrionarias humanas individuales a las que se obligó a desarrollarse en tres capas de tejido distintas. Incluyen células que normalmente desarrollarían un saco vitelino, una placenta y el propio embrión.
Zernicka-Goetz explicó a CNN que las estructuras embrionarias creadas por su laboratorio son las primeras en tener células germinales que se convertirán en óvulos y espermatozoides.
“Solo quiero subrayar que no son embriones humanos”, dijo Zernicka-Goetz. “Son modelos de embriones, pero son muy emocionantes porque se parecen mucho a los embriones humanos y son un camino muy importante hacia el descubrimiento de por qué fracasan tantos embarazos, ya que la mayoría de los embarazos fracasan alrededor del momento del desarrollo en el que construimos estas estructuras parecidas a embriones”.
Dijo que, hasta donde ella sabía, era la primera vez que se creaba un embrión modelo humano con tres capas de tejido. Pero recalcó que, aunque imita algunas de las características de un embrión natural, no las tiene todas.
Los investigadores esperan que estos modelos de embriones arrojen luz sobre la “caja negra” del desarrollo humano, el periodo posterior a los 14 días después de la fecundación, que es el límite acordado para que los científicos cultiven y estudien embriones en un laboratorio.
Ahora mismo, los modelos de embriones humanos sintéticos están confinados en tubos de ensayo. Sería ilegal implantar uno en un útero, y la investigación animal con células madre de ratones y monos ha demostrado que, incluso cuando los científicos han intentado implantarlos, no sobreviven, probablemente porque los investigadores no han descubierto cómo replicar completamente las condiciones del embarazo.
Zernicka-Goetz explicó que el objetivo de su investigación no era crear vida, sino evitar su pérdida, entendiendo por qué a veces los embriones no se desarrollan tras la fecundación y la implantación.
“Sabemos muy poco sobre esta etapa del desarrollo humano, pero es un momento en el que se pierden muchos embarazos, sobre todo por fecundación in vitro”, afirma Roger Sturmey, investigador principal de Salud Materna y Fetal de la Universidad de Manchester (Reino Unido).
“Actualmente, podemos decir que estos ‘embriones sintéticos’ comparten una serie de características con los blastocistos, pero es importante reconocer que la forma en que se forman los embriones sintéticos es diferente a lo que ocurre cuando un embrión normal forma un blastocisto”, dijo. “Queda mucho trabajo por hacer para determinar las similitudes y diferencias entre los embriones sintéticos y los embriones que se forman a partir de la unión de un óvulo y un espermatozoide”.