(CNN) – Florida ejecutó al recluso Duane Owen, condenado a muerte, mediante inyección letal en la noche de este jueves, casi cuatro décadas después de que asesinara a una niñera de 14 años y a una madre soltera de dos hijos en ataques separados.
A Owen lo condenaron por la violación y el apuñalamiento mortal de la adolescente Karen Slattery en 1984 y por la violación y el asesinato de Georgianna Worden, de 38 años, en el condado de Palm Beach.
Owen se negó a hacer una declaración final, según WPBF, afiliada de CNN.
Los familiares de las víctimas estuvieron presentes en la ejecución. Después de que terminó, la hermana menor de Slattery, Debbi Johnson, dijo que la familia ahora puede cerrar el libro de Karen, dejarlo en un estante y seguir adelante.
“Él no abrió los ojos. Lo sé porque lo miré”, dijo Johnson en una conferencia de prensa. “No hizo ninguna declaración, ninguna declaración verbal de todos modos. Murió con dignidad, y lamentablemente sus víctimas no”, añadió.
Johnson, quien ahora es asistente del sheriff en el condado de Monroe en Florida, tenía 10 años cuando mataron a su hermana mayor.
“Con la lluvia de hoy, realmente esperaba ver un arcoíris. Porque eso es lo que mi madre siempre decía: ‘Cada vez que ves un arcoíris, es Karen que nos sonríe’”, dijo Johnson.
Slattery fue apuñalada y violada repetidamente en una casa en Delray Beach, mientras los dos niños que cuidaba dormían.
Dos meses después, Owen mató a Worden, originaria de Boca Ratón, con un martillo, mientras sus dos hijos pequeños dormían cerca, según WPBF.
Owen había estado en el corredor de la muerte desde su condena y, a pesar de décadas de apelaciones por demencia, el gobernador Ron DeSantis firmó su sentencia de muerte este año, según WPBF, afiliada de CNN.
Como su última comida, Owen pidió una hamburguesa con queso y tocino, sin pan, además de aros de cebolla, fresas, helado de cereza, un batido de vainilla y un café, según el Departamento Correccional del estado.
Johnson dijo que la respuesta de las autoridades al caso de su hermana y el trabajo que hicieron los agentes la inspiraron a entrar en la policía.
“El cierre puede ser un mito, pero la justicia no lo es”, dijo Johnson.
“Treinta y nueve años y este proceso finalmente terminó”, agregó. “Cumplió su condena. Es el fin”.
Owen es el cuarto recluso ejecutado en el estado este año. Florida es uno de los 27 estados donde se mantiene la pena de muerte, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte. Tres de esos estados tienen moratorias impuestas por los gobernadores.