(CNN) – Es el heredero al trono británico, está casado con Catalina, princesa de Gales, y es padre de un trío que complace a las multitudes. Pero, ¿cuánto sabes realmente sobre el hombre que ahora ostenta el título de príncipe de Gales?
Nueve meses después de su nombramiento, el príncipe de Gales, que el miércoles celebró su 41 cumpleaños, concedió una entrevista al Sunday Times británico en la que habló de sus motivaciones y de la evolución de sus funciones reales. Era la primera vez desde que se convirtió en heredero al trono que William hablaba con la prensa, su primera entrevista con un periódico, y no rehuyó algunas de las preguntas más difíciles que se le plantearon.
El quid de la entrevista fueron sus esfuerzos por combatir el problema de las personas sin hogar en el Reino Unido, un tema al que se dedica desde hace mucho tiempo, y que tal vez arraigó en su infancia de la mano de su difunta madre.
William opina que hay muchos malentendidos y muchos juicios con respecto a cómo una persona puede acabar durmiendo en la calle. En comentarios bastante sencillos, deja claro que no cree que el enfoque actual de la gestión del problema funcione y que hay que centrarse en la prevención.
“Este reto no es insuperable. Si alguien se queda sin hogar, podemos decirle: ‘Bien, este es el camino de vuelta’. Podemos visualizarlo y mostrar a la gente que hay una forma de hacerlo”, afirma.
Algunos dirán que es fácil para una persona privilegiada soltar ideas y críticas. Pero a lo largo de los años, William se ha comprometido a ayudar a atajar la crisis de las personas sin techo en lo que puede.
Hemos visto de primera mano las numerosas veces que ha utilizado su plataforma de forma genuina y significativa para concienciar sobre los retos a los que se enfrentan las personas sin hogar. En 2009, incluso pasó una noche durmiendo al raso en las calles de Londres para experimentar la realidad por sí mismo. Ha apoyado a varias organizaciones benéficas y a menudo intenta ser voluntario (aunque no siempre es posible pasar desapercibido).
En el reportaje del Sunday Times, William habló varias veces de un próximo gran proyecto. Sin entrar en detalles, dijo que “se trata de reunir a toda la gente maravillosa y las piezas del puzzle” y “a partir de ahí, podemos conseguir que otros ayuntamientos de otras partes del país lo copien. Se trata de impulsar”.
Afirmó que no intentaba interferir en la política del gobierno, argumentando que su plan “es un aditivo a lo que ya se está haciendo”. Incluso se sugirió que los terrenos reales podrían utilizarse en el futuro para viviendas asequibles, lo que aborda una crítica a la que la familia se ha enfrentado a menudo dada la gran cantidad de terrenos que posee, incluidas numerosas propiedades. Cuando se le preguntó si había algún plan para construir viviendas en los terrenos del Ducado de Cornualles, el heredero se mostró abierto a la idea, pero no quiso precisar plazos.
“Por supuesto. Viviendas sociales. Lo verás cuando esté listo. No soy un experto en política, pero la impulso siempre que puedo”, dijo William.
Los proyectos de futuro de William, el príncipe de Gales
Cuando se habla con la gente que rodea a la pareja en estos días, a menudo señalan que sus campañas más recientes están muy centradas en tener un impacto duradero, y es probable que el próximo proyecto de William también tenga eso en mente. Lo que estamos viendo es que los futuros reyes están haciendo evolucionar las obligaciones reales más allá de simplemente asegurarse de que son visibles para que las causas tengan eco entre el público.
Una de las conclusiones que se desprenden de la rara entrevista de William es la confianza que tiene en la dirección de su trabajo. Está claro que ha trazado una visión para hacer suyo el papel de príncipe de Gales después de heredarlo de su padre, y está ansioso por ponerse en marcha ahora que los actos ceremoniales —como el Trooping the Color del pasado fin de semana y la ceremonia anual de la Orden de la Jarretera de esta semana— han quedado atrás.
Tampoco eludió otros temas potencialmente incómodos, como su familia. En cambio, demostró que era consciente de que la percepción de los Windsor se había resentido en los últimos años.
“Todos estamos muy ocupados y creo que a veces es difícil ver lo que la familia aporta y lo que hacemos”, dijo en la entrevista. “Pero la cantidad de causas, los intereses, las cenas, las reuniones, las visitas, lo que sea, que hacemos día tras día, a lo largo del año, siempre hemos estado involucrados en eso. Es parte de lo que hacemos. Es tratar de poner de relieve otras causas, otras personas, otros intereses, y ayudar a la gente en lo que podamos. Seguiremos haciéndolo”.
Sus comentarios abiertos gustarán a los observadores de la realeza, pero muchos británicos, que siguen luchando contra la crisis del coste de la vida, querrán ver más hechos que palabras. No obstante, fue un buen comienzo para que el futuro rey recordara a la gente que la monarquía es algo más que pompa.