(CNN Español) – Rivalizan todo el tiempo. Compiten en la cancha, en las charlas de café y se desafían a cada paso. Boca y River están pendientes de lo que hace siempre su eterno rival. Buscar la fecha de cada duelo del torneo doméstico argentino es casi un ritual, como lo es estar muy atentos a los posibles choques de magnitud como lo son los desafíos en el mayor evento futbolístico de Sudamérica, la Copa Libertadores.
“En este momento hay un 50% de posibilidades de que Boca y River se encuentren en octavos de final”, dijo Juan José Buscaglia, maestro de ceremonias del torneo máximo de la Conmebol junto a Helena Calil. Fue un instante sin tiempo. Eterno. Se paralizaron los corazones de los fanáticos River y Boca al advertir que una cristalización del duelo en los playoffs de octavos de final era altamente probable. No se dio. River se medirá ante Internacional de Porto Alegre, y Boca lo hará ante Nacional de Uruguay. En el cuadro principal, xeneizes y millonarios quedaron cada uno en el lado opuesto, por lo que sólo chocarán en una hipotética final.
¿Cuál es el camino que deberán recorrer para arribar a la presunta final?
Probable recorrido de River Plate
En el caso de River, deberá sortear el durísimo obstáculo que supone tener enfrente en octavos a Internacional de Porto Alegre. En caso de salir airoso de esta llave, en cuartos podría tener otro bravo escollo, Athletico Paranaense (último finalista del certamen). El equipo de Curitiba es favorito ante el Bolívar (Bolivia).
Si también elude este duro desafío, en la parte baja del cuadro hay equipos temibles y otros que son a respetar.
Argentinos y Fluminense se miden en octavos. Argentinos es un buen equipo y que se hace fuerte de local. El Flu es favorito. El ganador de este duelo chocaría con el ganador del duelo entre Flamengo (último campeón) ante Olimpia (Paraguay). El Fla es claro favorito.
No sería descabellado hacer una proyección en la que deberíamos situar en cuartos de final el choque entre el Flamengo y el Fluminense. Es uno de los clásicos más fascinantes e importantes de Sudamérica y tal vez el mayor de todo Brasil. En caso de concretarse esta final anticipada, sería un duelo de extrema paridad, aunque el Flamengo, por sus tres finales disputadas en las últimas cuatro ediciones, con dos coronaciones, llegaría con más mística copera y aires de favoritismo en esta crucial instancia. El ganador podría medirse con River Plate en la posible semifinal.
El Flu aplastó a River 5-1 como local en una noche soñada para los brasileños en la fase de grupos. En la revancha ganó River 2-0. Si se diera el choque con Flamengo, sería el duelo que ya se dio en la final de Copa Libertadores en 2019, en el cual el Fla le ganó sobre el cierre del gran partido 2-1 a River, logrando dar vuelta el partido.
Luego de escalar esta empinada montaña llena de quebradas y de ripios, River recién llegaría a la final. Es un panorama muy complejo, pero no imposible para un equipo de tremenda jerarquía como los dirigidos por Martín Demichelis.
El potencial camino de Boca Juniors
El sendero de Boca no es menos favorable. En octavos debe medirse con Nacional de Uruguay. Examen tan difícil como resbaladizo.
De pasar esta llave, en cuartos de final lo espera el Racing Club o el Atlético Nacional (Colombia). El equipo argentino es levemente favorito. Se daría un gran choque entre el Xeneize y la Academia.
En tanto, en la parte alta del cuadro hay cuatro equipos de alto calibre, dos especialmente de sumo cuidado.
Por un lado, en cuartos de final llegará Deportivo Pereira (Colombia) o Independiente del Valle (Ecuador).
Uno de esos dos equipos se medirá con el ganador del gran reto que sostendrán Atlético Mineiro ante Palmeiras. Los brasileños son de estos cuatro equipos, claramente superiores. El Mineiro juega muy bien y está en ascenso en su nivel futbolístico. Palmeiras fue el mejor equipo de la primera fase. Ganó, además, dos de las últimas cuatro Copas Libertadores. Si Boca llegase a semifinales, no sería extraño que allí esté esperándolo el Verdao (Palmeiras). Sería reeditar duelos memorables de la primera década de 2000.
Es un camino provisto de muchas dificultades, pero el plantel de Jorge Almirón (DT de Boca) está compuesto por jugadores con jerarquía, con una camiseta de mucha mística y tiene además mucha hambre de gloria.
Si Boca y River llegan a la segunda final entre sí en Copa Libertadores, tal como está programado por Conmebol, será el día 4 de noviembre en el escenario del Maracaná. Rio de Janeiro se convertirá por unos días en una sucursal futbolista de Argentina. Sería un momento sísmico para el prestigioso certamen.
Carlos Bianchi y Marcelo Gallardo, responsables de aumentar la competitividad y efervescencia del clásico mayor de Argentina
Ambos son próceres en sus instituciones. Son dioses intocables. Ambos llenaron de logros a Boca y River. Boca, con el “Virrey” como DT, ganó tres ediciones de la Copa Libertadores (2000, 2001, 2003). El “Muñeco” conquistó en dos ocasiones el máximo certamen sudamericano (2015 y 2018).
Han sido dos décadas en las que Sudamérica se vio invadida por la rivalidad que se acrecentó de manera exponencial. Echemos un vistazo de lo que han sido todos los duelos entre los dos titanes de Argentina en este prestigioso certamen. Es que además de ganar, está en juego el orgullo deportivo, la rivalidad folclórica de sus fanáticos y el regodeo de pretender sentirse uno más grande que el otro.
Los enfrentamientos en Copa Libertadores
River Plate y Boca Juniors se enfrentaron en 28 partidos. La estadística sitúa en la cima al Xeneize con 11 victorias, mientras que nueve fueron los triunfos para el Millonario, y ocho encuentros terminados igualados. Aunque el equipo del barrio de Núñez (River) tiene algo sustancial a su favor: ha sido más ganador en los cruces directos. Fue vencedor en tres de los cinco cara a cara que disputaron, en tanto que Boca se impuso en los dos restantes.