(CNN Español) – Si Javier Milei, el candidato presidencial con más votos en las recientes elecciones primarias de Argentina, confirmara esa tendencia con un triunfo en las generales del 22 de octubre, como eventual mandatario tendría que lidiar con una Cámara de Diputados en la que contaría apenas con el 31% de lo que necesita para obtener quórum y en el Senado con el 22%, según coinciden proyecciones de CNN y especialistas en datos de medios argentinos.
Actualmente ninguno de los tres partidos o coaliciones más votadas en las primarias goza del “número mágico”, o sea, del quorum para iniciar una sesión. En Diputados esa cifra es de 129 y en el Senado de 37, la mitad más uno.
En la Cámara de Diputados, el bloque oficialista Unión por la Patria posee 118 bancas; la coalición opositora Juntos por el Cambio 117; y La Libertad Avanza, de Javier Milei, 2.
Si se repitieran los resultados de las primarias, la configuración de la Cámara Baja cambiaría, pero no lo suficiente como para darle a Milei la mayoría que necesitaría para llevar adelante la agenda que promete. El bloque oficialista perdería 38 bancas y se quedaría con 94; Juntos por el Cambio descendería a 107; y La Libertad Avanza aumentaría su caudal a 40 diputados.
Este reparto, una vez más, supone que ningún bloque tiene el denominado “número mágico”. Pese a eso, lo curioso es que el partido del candidato presidencial más votado en las primarias no tendría una cantidad grande de diputados. Por un lado, registraría un crecimiento notable dado que de 2 legisladores pasaría a 40. Por otro lado, esa última cifra sólo alcanza para cubrir el 31% de lo necesario para obtener quórum.
En la Cámara de Senadores, hoy Juntos por el Cambio acumula 33 bancas mientras que los dos bloques del oficialismo suman 31 y los libertarios no tienen representación.
Si se reiteraran los resultados de las PASO, esto quedaría en: Juntos por el Cambio 27 senadores, Unión por la Patria 33 y La Libertad Avanza 8.
Este último número también muestra un crecimiento libertario en la Cámara Alta dado que pasaría de cero a 8. Sin embargo, esa cantidad de senadores es pequeña al considerar lo lejos que está del quórum (37 senadores). Es decir, cubriría el 22% de lo necesario para activar una sesión.
CNN consultó al equipo de campaña de Javier Milei sobre cómo gobernaría con un Congreso cuyos números no le ofrecen ninguna facilidad. Uno de sus voceros contestó que Milei “rompería la lógica bicoalicionista” y obtendría más legisladores de bloques menores y del sector más conservador de Juntos por el Cambio.
Un punto importante es que las propuestas libertarias como dolarización de la economía argentina o reformas en el sistema de salud y educación públicos deben ser aprobadas por el Poder Legislativo. Por lo tanto, la negociación política, el diálogo y búsqueda de consensos con otras fuerzas políticas, catalogadas peyorativamente como “casta” por Milei, parecen ser herramientas vitales para poner en funcionamiento la maquinaria parlamentaria.
Milei ha puesto sobre la mesa la posibilidad de llamar a plebiscitos para, si fuera presidente, sortear su posible condición minoritaria en el Congreso, particularmente en temas controversiales como la financiación de la educación y la reversión de la legalización del aborto. Sin embargo, algunos expertos en derecho ya han advertido que el uso de la consulta popular tiene límites legales y constitucionales, por lo cual no está claro que esa pudiera ser su varita mágica.