(CNN) – El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) del Gobierno español asegura que tomará medidas contra el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, si el organismo futbolístico no lo hace.
Este martes, la RFEF convocó una asamblea general extraordinaria, fijada para este viernes, para tratar las consecuencias de que Rubiales le diera un beso en la boca no deseado a la estrella española Jennifer Hermoso, durante la ceremonia de entrega de medallas, tras la victoria de España en la final del Mundial femenino contra Inglaterra.
En declaraciones al programa “El Larguero” de la Cadena SER, el presidente del CSD, Víctor Francos, afirmó que el Consejo está dispuesto a intervenir tras recibir tres quejas formales por la actuación de Rubiales.
“Hemos sido muy claros con la RFEF sobre la necesidad de abrir los procedimientos que establece la Ley del Deporte”, dijo Francos. “No podíamos pasar de largo sin abrir esos expedientes disciplinarios internos.
“A partir de ahí, vamos a esperar a que se resuelva urgentemente el caso, que es muy limitado con dos personas implicadas y no hay mucho que investigar”, dijo Francos.
El CSD es un órgano autónomo de decisión del Ministerio de Cultura y Deporte del Gobierno español y tiene la potestad potencial de exigir la destitución de Rubiales, pero para ello el organismo necesita seguir una serie de pasos requeridos, entre ellos que se presente una denuncia externa contra él y que el caso se vea ante un tribunal.
Miguel Ángel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Directivos de Fútbol, ya presentó una denuncia por el beso indeseado tanto ante el CSD como ante el Comité de Ética e Integridad de la RFEF, que han sido recibidas y aceptadas.
En un comunicado anunciando la asamblea general extraordinaria, la RFEF dijo que ha abierto “los procesos internos de la Federación en relación con la integridad”.
Críticas crecientes
Los comentarios de Francos se producen en medio de una creciente presión sobre Rubiales.
Este martes, un día después de que Rubiales pidiera disculpas y admitiera que “cometió un error” al besar a Hermoso, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijo que las disculpas de Rubiales eran “insuficientes.”
“Es verdad que ha habido algunos comportamientos, en este caso del señor Rubiales, que ponen de manifiesto que en nuestro país queda mucho camino por recorrer en materia de igualdad y respeto, y en esa equiparación de derechos entre mujeres y hombres”, dijo Sánchez.
“Las disculpas del señor Rubiales no son suficientes. Creo incluso que no son adecuadas y que, por tanto, el señor Rubiales tiene que seguir dando pasos para aclarar lo que todos vimos”.
Políticos de todo el espectro español también hicieron eco de las críticas del presidente del Gobierno español.
“Mantenemos nuestra petición de dimisión del señor que menospreció y agredió a una mujer. Sus excusas no sirven absolutamente para nada”, dijo en rueda de prensa Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno español en funciones y líder del partido Sumar.
En la misma línea se pronunció Cuca Gamarra, portavoz parlamentaria y secretaria general del Partido Popular: “Todos los dirigentes institucionales deben tener un comportamiento ejemplar y esa ejemplaridad debe ser el respeto hacia las mujeres y lo que vimos en esa final en este sentido fue vergonzoso. Solo se me ocurre vergüenza, como mínimo”.
En una entrevista concedida el martes al diario español ABC, la central española Irene Paredes dijo que el beso no deseado fue “un gesto desafortunado”, pero que ella y el equipo esperaban que no “empañara todo” lo conseguido por la selección en el Mundial femenino.