(CNN) – Si la idea de pasar tres años en un crucero te provoca claustrofobia, es hora de mirar hacia otro lado.
Life at Sea Cruises, que partirá en noviembre para un crucero de tres años alrededor del mundo, considera que la gente está tan entusiasmada con la idea de navegar alrededor del mundo sin escalas que continuarán el viaje indefinidamente, convirtiéndolo en “el crucero que nunca termina”.
La idea surgió después de que la empresa respondiera consultas de clientes potenciales que estaban entusiasmados con la idea del crucero, pero que no podían llegar a la fecha de inicio, dijo a CNN Kendra Holmes, directora ejecutiva de Miray Cruises, propietaria y operadora de Life at Sea.
Las personas aún tendrán que inscribirse por tres años, pero ahora pueden comenzar en cualquier punto del itinerario, lo que lo convierte en un crucero continuo de tres años, en lugar de uno fijo.
No es que los que lleguen tarde obtengan una repetición de lo que se perdieron. Para atraer a los clientes que quieran permanecer, el itinerario continuará hacia nuevos destinos, en lugar de regresar a los anteriores. El crucero continuará indefinidamente, dice Holmes, quien añade: “Se ha convertido en el crucero que nunca termina”.
Holmes dice que los principales destinos como la Isla de Pascua, Dubai y toda la India no están en el primer itinerario por razones logísticas y se espera que aparezcan en el cuarto año.
Ahora habrá siete posibles lugares de inicio en el primer año del crucero, que zarpará de Estambul el 1 de noviembre.
“El crucero que nunca termina”
Holmes le dijo a CNN que el equipo de Miray Cruises, propietario de Life at Sea, elaboró una “lluvia de ideas” desde que habló con posibles clientes que no pudieron llegar a la fecha de inicio.
“Una vez que se anunció el barco en mayo, había mucha gente que quería venir, pero noviembre era demasiado pronto para vender sus casas, hacer planes y hacer las maletas”, comentó.
“Hicimos una lista, comenzamos a hacer una lluvia de ideas y dijimos: ‘Íbamos a reiniciarlo, ¿por qué no simplemente lo ampliamos?’”.
Algunos clientes completamente registrados también sufrieron problemas de salud.
“Habíamos dicho desde el principio que reembolsaríamos el importe total a cualquier persona con problemas médicos, pero había gente que decía: ‘No quiero un reembolso, sólo quiero que me traten esto y sumarme’, así que pensamos que también les daríamos una oportunidad.
“También tuvimos residentes que nos preguntaron qué pasaría si quisieran continuar [al final de los tres años], así que comenzamos a buscar opciones de itinerario y ver qué lugares podíamos agregar”.
Aquellos que no puedan viajar a Estambul tienen la oportunidad de unirse a Barcelona el 6 de noviembre, a las Bahamas una semana después o a Río de Janeiro el 20 de diciembre, justo a tiempo para Navidad a bordo.
También habrá tres paradas más en Centroamérica y Norteamérica en la primera mitad de 2024.
Un estilo de vida “asequible”
Holmes asegura que el nuevo sistema no debería afectar la política de la empresa de vender sólo el 85% de su capacidad.
El barco, el MV Lara, puede transportar 1.400 pasajeros, pero Holmes promete que “nunca venderemos toda su capacidad; no queremos que los residentes vivan esa experiencia”. Tratamos de mantenerlo en el 85%”. La ocupación actualmente supera el 50% para los embarques de noviembre.
El crucero también lanzará un programa de “Buceo alrededor del mundo” después de que Holmes, ella misma instructora de buceo, notara que muchos de los invitados eran buceadores entusiastas.
Ahora habrá una tienda de buceo a bordo, administrada en conjunto con Scuba Diving International (SDI), y un instructor de tiempo completo se unirá a la tripulación del barco. Los pasajeros podrán obtener una certificación de buceo mientras viajan, y habrá oportunidades de bucear en todo el mundo, vinculándose con escuelas de buceo aprobadas por SDI.
Los huéspedes también podrán participar en jornadas de limpiezas de océanos y esfuerzos de propagación de corales mientras viajan.
La nueva política es el cambio más reciente en lo que ha sido un bautismo de fuego para Life at Sea.
Miray se separó de algunos miembros del equipo fundador del proyecto en mayo, un cisma que ahora está en el centro de una disputa legal iniciada por Miray.
Muchos aspirantes a cruceristas cancelaron sus reservas debido a la confusión, aunque las nuevas reservas han superado las cifras originales.
Si bien no son los primeros en ofrecer cruceros permanentes (o semipermanentes), Life at Sea sigue siendo la única opción (relativamente) asequible para cruceros a largo plazo, según Holmes.
“Cuesta entre US$ 3.500 y 4.000 al mes y puedes ir a ver el mundo. Podemos ofrecer esto al trabajador promedio o a una persona que acaba de jubilarse de un trabajo promedio”.
El precio actual comienza en US$ 38.513 por año por persona. Todo está incluido, hasta la asistencia sanitaria a bordo. Los viajeros solos pagan un 85% adicional por ocupación individual.