(CNN Español) – La discusión económica gana más espacio en la campaña presidencial de Argentina. El candidato libertario, Javier Milei, impulsa una dolarización, mientras que la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, propone un esquema de economía bimonetaria. Te presentamos puntos en común y diferencias entre ambas ideas.
En las declaraciones de Milei y su equipo de campaña, y las de los economistas de Juntos por el Cambio ―liderados por Carlos Melconian― destacan cinco puntos en común, aunque con contrastes, entre dolarización y economía bimonetaria: la utilización del dólar, la eliminación de restricciones cambiarias, la reducción del gasto público, el rol del Banco Central y la aplicabilidad de estas medidas.
Utilización del dólar
Dolarizar la economía implica adoptar como única moneda al dólar estadounidense y eliminar el peso argentino ―al que Milei se refiere como “moneda de la casta”, término que a su vez emplea para señalar a quienes están en la política y él considera que “son inmorales”—.
Si bien el candidato libertario aseguró que posee cinco propuestas de dolarización, su equipo de campaña aseguró a CNN que su eventual gobierno adoptaría el proyecto diseñado por el economista Emilio Ocampo. En su blog personal, Ocampo explica que dolarizar es convertir los pesos, base monetaria, pasivos y activos del Banco Central por los dólares que el país obtenga. Según escribió Ocampo en abril de 2023, ese tipo de conversión sería de 376 pesos por dólar. No obstante, economistas de diversas visiones ubican ese tipo de conversión por encima de los 2.000 pesos.
Por otra parte, el esquema de economía bimonetaria impulsado por Juntos por el Cambio propone legalizar la circulación del dólar a la par de la del peso. Esto significa que los argentinos podrían realizar en el país contratos con cualquiera de esas dos monedas. Consultado sobre si una moneda fuerte se comería a la débil, Melconian respondió que no se trata de “competencia de monedas, sino de convivencia”.
Eliminación de las restricciones cambiarias
Ambas propuestas incluyen la supresión de las restricciones cambiarias ―también conocidas como “el cepo” ―, aunque en tiempos distintos. Según detalló a CNN uno de los economistas que apoya a Milei, Miguel Ángel Boggiano, “el cepo tiene que terminar el día dos de gobierno”.
En cambio, un economista del equipo de Bullrich, Martín Siracusa, explicó a CNN que la eliminación del cepo será “rápida, en menos de un año”, y luego de dos pasos fundamentales en su programa económico: la implementación de un presupuesto sin déficit fiscal y la modificación de la carta orgánica del Banco Central, mediante la cual se garantice la emisión monetaria cero.
Aquí se encuentra un punto relevante para los argentinos: la cotización del dólar. En el caso de la dolarización, resulta importante el tipo de conversión de todos los pesos por los dólares que el país consiga reunir. Su proporción determinará por cuántos pesos se cambiará cada dólar. En el caso de la economía bimonetaria, Siracusa dijo que eliminar el cepo llevaría el tipo de cambio oficial a una cotización de mercado libre, hoy también ilegal conocida como “blue”.
Reducción del gasto público
Las dos propuestas económicas incluyen bajar el nivel de gasto público, aunque ninguna especifica cuánto. Juntos por el Cambio indica la necesidad de un presupuesto sin déficit, y La Libertad Avanza reitera la idea de terminar con los gastos políticos, o de “la casta”. En términos concretos, Milei dijo que eliminaría 11 ministerios, quedándose con una estructura de ocho. Bullrich también declaró que un eventual gobierno suyo estaría conformado por ocho ministerios, aunque no especificó cuáles.
Rol del Banco Central
Milei repitió en reiteradas ocasiones que lo eliminaría y regresaría al modelo de país previo a la creación del Banco Central (1935), cuando existía una caja de conversión y ―según el candidato― Argentina era un país potencia.
La propuesta de Juntos por el Cambio pretende renovar al Banco Central a través de una modificación de carta orgánica, con dos objetivos: garantizar la autarquía o independencia del poder político de la entidad monetaria y reducir a cero la emisión de billetes con el fin de atacar la inflación. Siracusa explicó que, en términos cambiarios y sin cepo, el Banco Central no tendría el rol de único vendedor de divisas, ya que en un esquema bimonetario otros actores del mercado podrían vender dólares. “Mas que vender, el Central tiene que preocuparse por adquirir dólares”, dijo el economista en el equipo de Bullrich.
Aplicabilidad de las medidas
Ambas reformas a la economía argentina necesitan pasar por el Congreso. Tanto el cambio de moneda en la dolarización como la legalización de la circulación del dólar para el esquema bimonetario precisan cambios en las leyes vigentes. Por lo tanto, más allá de los argumentos económicos o financieros, cualquiera de las dos opciones deberá reunir apoyo político para que las cámaras del Parlamento las aprueben.