(CNN) – El gigante inmobiliario chino Country Garden evitó por poco el impago de su deuda en cuestión de días. Pero no está fuera de peligro.
El desarrollador, el más grande de China en términos de ventas de viviendas, continúa manteniendo nerviosos a los inversores de todo el mundo mientras enfrenta más fechas límite de pago de miles de millones de dólares que ha pedido prestado.
La compañía tiene alrededor de 27.000 millones de yuanes (US$ 3.700 millones) en bonos, ya sea adeudados a tenedores de bonos o sujetos a demandas de pago anticipado solo hasta finales de 2024, según una estimación de este miércoles de Moody’s.
Si bien se acaba de extender el plazo para pagar un bono, este continúa frente a un abismo de casi US$ 200.000 millones en pasivos y enfrenta una presión cada vez mayor para pagar.
Eso será difícil, ya que la desaceleración de la demanda interna en China ha afectado su flujo de caja y ha acabado con sus ganancias.
Esto es lo que debes saber sobre Country Garden y el futuro que enfrenta.
¿Qué es Country Garden?
Country Garden ha sido durante mucho tiempo uno de los mayores promotores inmobiliarios de China, especializado en propiedades residenciales.
Cotizada en Hong Kong y con sede en Foshan, Guangdong, la empresa ha desarrollado 3.000 proyectos en todo el país, ha proporcionado viviendas a más de 5 millones de personas y ha convertido más de 1.400 pueblos rurales en ciudades.
El grupo también desarrolla espacios comerciales, como hoteles, estacionamientos y tiendas minoristas, aunque se ha expandido dramáticamente en otras áreas, como la robótica y los servicios agrícolas.
También es responsable de una gran cantidad de empleos en China y emplea a unas 300.000 personas, según su informe anual más reciente.
El desarrollador también forma parte del Global 500, es decir, es una de las empresas más grandes del mundo por ingresos. El año pasado registró casi 430.400 millones de yuanes (alrededor de US$ 59.000 millones) en ventas, aunque solo una pequeña fracción de eso (2.600 millones de yuanes (US$ 357 millones) se llevó a casa en ganancias netas.
Eso fue significativamente inferior a los ingresos de alrededor de 523.000 millones de yuanes (US$ 71.600 millones) y la ganancia neta de aproximadamente 41.000 millones de yuanes (US$ 5.600 millones) en 2021.
En las últimas semanas, Country Garden se ha convertido en un emblema de la creciente crisis inmobiliaria de China, que está obstaculizando los esfuerzos del Gobierno por reactivar el crecimiento económico.
Sus problemas recuerdan a los de Evergrande, un otrora poderoso desarrollador chino que incumplió sus pagos en 2021. Evergrande se declaró en quiebra en Estados Unidos el mes pasado, después de registrar pérdidas de US$ 81.000 millones en los últimos dos años.
¿Cómo llegamos aquí?
Si bien la confianza en el sector inmobiliario de China ha sido inestable desde el colapso de Evergrande, Country Garden reavivó los temores el mes pasado, cuando su crisis de liquidez salió a la luz pública.
Fue entonces cuando surgieron informes de que la empresa había incumplido los pagos de intereses de dos bonos en dólares estadounidenses, lo que llamó la atención sobre sus problemas generales de deuda.
Desde entonces, los inversores se han estado preparando para un posible incumplimiento por parte de Country Garden, que ha admitido abiertamente que esto podría suceder pronto.
Un evento de este tipo podría causar conmoción en la segunda economía más grande del mundo, ya que los bienes raíces representan aproximadamente entre el 25 % y el 30 % del PIB de China.
La cuestión se considera una de las mayores pruebas para el liderazgo de Beijing este año, mientras los funcionarios trabajan para frenar una desaceleración económica más amplia que también ha afectado la confianza de los consumidores, las exportaciones y el gasto minorista.
La semana pasada, Country Garden registró una pérdida récord de 51.500 millones de yuanes (US$ 7.000 millones) durante la primera mitad del año y reconoció que había incumplido algunos pagos de intereses en agosto.
Este martes, los medios estatales informaron que había realizado pagos atrasados de los dos bonos en dólares estadounidenses, poco antes del final de un período de gracia de 30 días, evitando un inminente incumplimiento de la deuda.
Las acciones de Country Garden en Hong Kong se han desplomado un 55 % en lo que va del año debido a que los inversores se deshicieron de las acciones. Fue eliminado como componente del índice Hang Seng insignia de la ciudad, el mes pasado.
Para intentar contener la crisis, el promotor ha creado recientemente un grupo de trabajo especial y se ha apoyado en sus ricos propietarios.
Desde que la empresa salió a bolsa, en 2007, la presidenta Yang Huiyan y su familia han inyectado aproximadamente 38.600 millones de dólares de Hong Kong (US$ 4.900 millones), en forma de nuevos préstamos y compras de acciones y bonos, dijo la empresa en un documento presentado en agosto. Yang es una de las mujeres más ricas de China, aunque su propia fortuna se ha desplomado recientemente.
Pero Yang dijo en una declaración separada que el sector inmobiliario de China se había visto afectado por “un entorno empresarial difícil sin precedentes” el año pasado, con “frecuentes brotes de crisis crediticias de los promotores inmobiliarios, ventas estancadas y falta de confianza entre las empresas”.
Este año no ha sido mucho mejor, con una caída tanto en las ventas de propiedades como en la inversión en los primeros seis meses de 2023, según el grupo.
¿Qué sigue para Country Garden?
Por ahora, Country Garden ha evitado lo peor.
Ha pagado US$ 22,5 millones en intereses vencidos sobre los dos bonos en dólares estadounidenses, según los medios estatales, y también habría obtenido esta semana la aprobación de los acreedores locales para retrasar los pagos de un bono denominado en yuanes que vence, lo que le permitirá ganar más tiempo para pagar el principal pendiente de US$ 540 millones hasta 2026.
Sin embargo, debe seguir pagando intereses sobre el bono, según lo previsto inicialmente.
Country Garden no respondió a las solicitudes de comentarios de CNN.
Pero la compañía todavía tiene una serie de nuevos plazos por delante, con alrededor de 13.000 millones de yuanes (US$ 1.800 millones) en bonos nacionales y aproximadamente 14.000 millones de yuanes (US$ 1.900 millones) en bonos extraterritoriales, ya sea adeudados a los tenedores de bonos o sujetos a demandas de pago anticipado hasta finales del próximo año, según una estimación de Moody’s compartida con CNN.
La agencia de calificación crediticia ha rebajado la calificación de Country Garden a una calificación de “Ca”, lo que significa que las obligaciones de la empresa “es probable que estén en incumplimiento o muy cerca de hacerlo”.
Lo que es peor, las perspectivas para su negocio principal se están oscureciendo. El pasado viernes, Fitch Ratings recortó su pronóstico para las ventas de viviendas nuevas en China, diciendo que espera una caída del 10 % al 15 % este año, “más pronunciada que nuestra estimación anterior de una caída del 0 % al 5 %”.
La agencia citó como factor la “presión remergente sobre los precios de las viviendas”.
Y aunque las autoridades chinas han trabajado para apoyar a la industria, la crisis de Country Garden puede crear un círculo vicioso, ya que podría “exacerbar la debilidad en el sentimiento de los compradores de viviendas”, según Fitch.