(CNN Español) – El Ministerio de Pueblos Indígenas de Brasil informó que este lunes iniciaron el desalojo por orden judicial de alrededor de 1.600 familias a las que señaló como ocupantes ilegales de territorios indígenas en los municipios de São Félix do Xingu, Altamira, Anapú y Senador José Porfírio, en el estado de Pará.
El Ministerio señaló en un comunicado que algunas de las personas están involucradas en actividades ilícitas dentro de estos territorios, como ganadería y minería ilegal, además de destruir la vegetación nativa.
Las autoridades incluidas en los operativos tienen la instrucción de que estos se desarrollen de forma pacífica y voluntaria, indicó el comunicado.
En las tierras en cuestión viven alrededor de 2.500 indígenas de las etnias parakanã, mebengôkre kayapó y xikrim, distribuidos en 51 aldeas, dijeron las autoridades.
“La presencia de extraños en territorio indígena amenaza la integridad de los pueblos indígenas y provoca otros daños como la destrucción de bosques. No es casualidad que la tierra indígena de Apyterewa encabece la lista de deforestación”, añadió el boletín.