(CNN Español) – El secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, y la líder de la plataforma Sumar, Yolanda Díaz, presentaron este martes en el Museo Reina Sofía de Madrid el acuerdo de Gobierno que han alcanzado, con el objetivo de reeditar un Ejecutivo de coalición en el caso de que Sánchez sea investido presidente del Gobierno.
Ese pacto incluye más de 230 medidas de marcado carácter social y se estructura en torno a siete ejes, que abarcan desde la mejora del mercado laboral al impulso de una transición ecológica que adapte España a la realidad de la crisis climática.
En este abanico de medidas se destacan, entre otras, la voluntad de poner en marcha “una segunda ola de derechos laborales”, según señaló Díaz, entre los que se contarían la intención de reducir la jornada laboral semanal “sin reducir el salario”.
Si bien no han detallado cuantas horas acortarían de la jornada laboral, el programa de Sumar para las elecciones generales del 23 de julio contemplaba establecer por ley “una jornada laboral máxima de 37,5 horas” semanales en vez de las 40 horas actuales.
En materia de transición ecológica, la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones destacó la intención de ambos partidos de revisar al alza los objetivos de la Ley de Cambio Climático y poner fin a los vuelos cortos para favorecer el uso del tren. Lo que proponen, concretamente, suspender los vuelos “inferiores a dos horas y media cuando haya alternativa en tren”, indicó Díaz.
Con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda y dado que “el 50% de las personas que viven de alquiler se encuentran en riesgo de pobreza”, apuntó Díaz en relación con los datos facilitados por el Informe Anual de 2022 del Banco de España, ambas formaciones aunaran fuerzas para lograr que el parque público de vivienda alcance el 20% del parque total.
En el capítulo fiscal, tanto Sánchez como Díaz se comprometen a obligar “a las grandes empresas a pagar un impuesto de sociedades del 15% sobre el resultado contable”, apuntó Díaz. “Con esta medida recaudaremos 10.000 millones de euros [US$ 10.500 millones]”, estimó la líder de Sumar.
Una investidura incierta
Una vez cerrado el acuerdo de Gobierno con Sumar, Sánchez tiene ahora la labor de terminar de negociar con el resto de las fuerzas parlamentarias para apuntalar su investidura.
Entre los apoyos necesarios se cuentan el de las fuerzas independentistas catalanas. Esquerra Republicana de Catalunya y Junts per Catalunya ostentan un total de 14 diputados en el Congreso, pero su apoyo se ofrece a cambio de una ley de amnistía para los políticos encausados o juzgados por promover la independencia de Cataluña en años anteriores, así como el reconocimiento del derecho a la autodeterminación de Cataluña.
Estas condiciones se demuestran costosas para Sánchez, aunque no ha tirado la toalla a la espera de poder trasladar contrapropuestas que puedan contentarlos y asegurar su voto a favor.
El reloj corre en contra para la celebración del debate de investidura del líder socialista. Concretamente, solo tiene margen hasta el próximo 27 de noviembre. Esa es la fecha límite antes de disolver las Cortes Generales y llamar a nuevas elecciones generales.