(CNN) – El presidente de Ética de la Cámara de Representantes, Michael Guest, republicano de Mississippi, presentó este viernes una resolución para expulsar del Congreso al representante republicano George Santos de Nueva York, un día después de que el Comité de Ética publicara un informe condenatorio tras su investigación.
Se espera que los legisladores aborden la resolución a finales de mes, una vez que regresen del feriado de Acción de Gracias.
Santos ha sobrevivido a intentos anteriores de expulsarlo de la Cámara, pero este último intento está ganando impulso. Tras la investigación ética, varios republicanos que anteriormente no habían apoyado la expulsión indicaron que ahora votarían a favor.
La expulsión es un mecanismo extremadamente raro y requiere una mayoría de dos tercios de los votos en la Cámara para prosperar. Hasta ahora, 13 legisladores republicanos dijeron que apoyan la expulsión de Santos desde que se publicó el informe, y se espera que ese número aumente en los próximos días.
En su informe, el Comité de Ética afirma que ha descubierto “conductas ilícitas y no imputadas” de Santos que van más allá de las acusaciones penales ya pendientes en su contra, y que remitirá inmediatamente las acusaciones al Departamento de Justicia para que continúe la investigación. La comisión concluyó que Santos “trató de explotar fraudulentamente todos los aspectos de su candidatura a la Cámara de Representantes para su propio beneficio económico personal”.
Santos, quien está en el Congreso desde enero, anunció que no buscará la reelección tras la publicación del informe del comité, aunque se mantuvo desafiante y denunció la investigación, calificándola de “informe sesgado”.
Santos también se declaró inocente de 23 cargos federales, incluidas acusaciones de fraude relacionado con los beneficios de desempleo por covid-19, malversación de fondos de campaña y mentira sobre sus finanzas personales en informes de divulgación de la Cámara.
A principios de noviembre, un intento hecho los republicanos para expulsar a Santos fracasó. Varios legisladores habían expresado su preocupación por la posibilidad de expulsar a un miembro que se enfrenta a una batalla legal aún inconclusa y sin una condena penal. Antes de la votación, Santos defendió su derecho a “la presunción de inocencia”.
En mayo, la Cámara votó a favor de remitir una resolución liderada por los demócratas para expulsar a Santos al Comité de Ética.
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