(CNN Español) – Javier Milei partió a Estados Unidos este domingo por la noche, en su primer viaje oficial como presidente electo de Argentina.
En Washington se reunirá con funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento del Tesoro, entre ellos el asesor de seguridad nacional de la presidencia, Jake Sullivan, dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
El futuro mandatario viajó acompañado por su hermana Karina Milei, Nicolás Posse —quien será su jefe de Gabinete—, el empresario Gerardo Werthein, Santiago Caputo y el embajador de Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley.
También se sumó a la comitiva Luis “Toto” Caputo, un hombre del círculo íntimo del expresidente Mauricio Macri, que fue ministro de Finanzas y presidió el Banco Central en distintos momentos de su gobierno. Caputo es la persona que más suena en los últimos días como posible ministro de Economía de Milei. Consultado por esto en una entrevista con la cadena LN+, el presidente electo dijo que “no hay mayor experto financiero en la Argentina que Luis Caputo”, y lo señaló como un perfil clave para “evitar una hiperinflación” y desarmar “el problema de las leliqs”, en referencia a las letras de liquidez que emite el Banco Central para sacar pesos circulantes del mercado sin que vayan a la compra de dólares.
Según información oficial, las reuniones serán de carácter protocolar para explicar el plan económico que contempla un ajuste fiscal, una reforma monetaria y del Estado y una desregulación. “No es en búsqueda de financiamiento”, explicaron.
Milei inicia su viaje en Nueva York en la tumba de un rabino
Este lunes, Milei visitó el Ohel, donde está la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson, para rezar.
“El rebe de Lubavitch, que falleció en 1994 exactamente, ha sido un hombre de gran influencia a nivel mundial, una persona muy muy muy espiritual y él rezaba en la tumba de su suegro”, explicó en una entrevista en las horas previas a su salida del país y dijo que antes de ser elegido presidente ya había ido a rezar a pedir sabiduría, coraje y templanza para aceptar “la voluntad del creador”, que finalmente lo puso en “un lugar de máxima autoridad”. “Voy a dar las gracias”, anticipó.
En el último tiempo, Milei habló en varias oportunidades de su afición y admiración por la religión judía, de su lectura del Torá e, incluso, dijo que estudiaba la posibilidad de cambiar de fe.