El buque de suministro de la plataforma Kobe Chouest se encuentra anclado junto al Chevron Corp. Jack/St. Plataforma petrolera de aguas profundas Malo en el Golfo de México en la fotografía aérea tomada frente a la costa de Luisiana, el 18 de mayo de 2018.

(CNN) – El gobierno del presidente Joe Biden abrió alrededor de 30 millones de hectáreas en el Golfo de México para su subasta a la industria del petróleo y el gas, la segunda venta de arrendamiento masiva de este año y la última programada hasta 2025.

Estas subastas, un hecho común bajo las administraciones de Trump y Obama, se convirtieron en un tema muy disputado y punto de inflamación altamente litigado bajo el gobierno del presidente Joe Biden.

Biden prometió detener la perforación en tierras y aguas federales como candidato presidencial de 2020, antes de que una serie de demandas revirtieran una pausa en la perforación que su administración había establecido. Y la Ley de Reducción de la Inflación vinculó las ventas de arrendamiento de petróleo y gas a las de energía eólica marina, haciendo que parte de la agenda climática de Biden fuera imposible de lograr sin aferrarse a la extracción de petróleo y gas.

Biden supervisó un auge de la energía limpia, dijeron este martes altos funcionarios económicos y climáticos de la Casa Blanca. Las cifras proporcionadas por la Casa Blanca mostraron que la inversión en la construcción de instalaciones manufactureras hizo la mayor contribución al crecimiento del PIB desde que la Oficina de Análisis Económico comenzó a rastrear datos hace unas seis décadas, con US$ 628.000 millones en inversiones en energía limpia y manufactura anunciadas en los Estados Unidos bajo Biden. .

“La inversión en clima y energía limpia supera la inversión general, que ha sido muy fuerte”, dijo a los periodistas el martes Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional.

Pero Biden también ha presidido nuevos máximos en la producción de petróleo: las exportaciones de petróleo de Estados Unidos alcanzaron un nuevo récord este año, superando incluso las exportaciones durante el gobierno del expresidente Donald Trump. Algunos activistas climáticos advierten que esta dinámica podría poner en peligro al presidente entre los votantes jóvenes antes de las elecciones de 2024.

“Estos proyectos de perforación tienen un impacto masivo en nuestra capacidad para eliminar gradualmente los combustibles fósiles a la escala requerida”, dijo a CNN Michele Weindling, directora política de Sunrise. “Lo que estamos viendo es que la administración sigue perdiendo credibilidad entre los votantes jóvenes cuando Biden intenta caminar en ambos carriles”.

A medida que 2023 llega a su fin, los activistas y grupos ambientalistas se centran cada vez más en el Golfo de México, donde se concentra la mayor parte de las perforaciones costa afuera de Estados Unidos. El área también podría convertirse en el hogar de un enorme proyecto de gas natural licuado conocido como CP2, que enviará gas estadounidense a países extranjeros.

El asesor climático nacional de la Casa Blanca, Ali Zaidi, dijo a los periodistas que Biden ha “asumido la crisis (climática) como insistían los jóvenes” al “ofrecer no sólo empleos, sino también justicia”.

“Si la pregunta es ‘por qué los jóvenes quieren más’, sólo tenemos que mirar la ciencia” del cambio climático, dijo Zaidi. “Hay una implacabilidad incrustada en el reloj de la acción climática”.

Los funcionarios de la Casa Blanca fueron presionados sobre cómo las nuevas inversiones importantes en energía limpia cuadran con el hecho de que la producción de petróleo de Estados Unidos también alcanzó niveles récord este año, un hecho que está en desacuerdo con los objetivos climáticos de Biden.

“Estados Unidos ha seguido expandiendo una variedad de formas de producción de energía”, dijo Zaidi. “Necesitamos, como parte de nuestro enfoque climático general, hacer una transición global para alejarnos de los combustibles fósiles”.

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Advierten que la vaquita marina está en alerta de extinción
00:51 - Fuente: CNN

Una venta polémica

La venta de arrendamiento de petróleo y gas de este miércoles se retrasó durante meses debido al descubrimiento de la ballena de Rice, una nueva especie de ballena en peligro de extinción en el Golfo de México.

Después de que se encontró la ballena en el Golfo hace unos dos años, el Departamento del Interior de Biden inicialmente buscó reducir el tamaño de su venta de arrendamiento de petróleo y gas como un intento de proteger el hábitat de la ballena e implementar velocidades más lentas para los barcos en ciertas áreas del Golfo. Pero después de perder en los tribunales, se restableció la superficie original de 30 millones de hectáreas.

El Golfo de México es el epicentro de la industria de petróleo y gas costa afuera de Estados Unidos. También está contaminando a un ritmo mucho mayor de lo que se pensaba anteriormente, según una investigación científica de la Universidad de Michigan. Los investigadores encontraron que el impacto climático de la extracción de petróleo y gas fue dos veces mayor que las estimaciones oficiales del gobierno, impulsado por los altos niveles de metano, un poderoso gas de efecto invernadero más de 80 veces más potente que el dióxido de carbono en sus primeras dos décadas en la atmósfera. El metano es el ingrediente principal del gas natural.

Los grupos ambientalistas siguen adelante con sus intentos de detener esta y una venta de arrendamiento similar celebrada en marzo. Aunque la Ley de Reducción de la Inflación vincula las subastas de petróleo y gas a las ventas de arrendamiento de energía eólica marina, los abogados ambientales argumentan que la administración Biden podría cambiar la vasta superficie cultivada.

“Ciertamente no hay nada allí que requiera una venta de arrendamiento de esta magnitud en el golfo”, dijo a CNN George Torgun, abogado principal del grupo de derecho ambiental Earthjustice. “Seguiremos bloqueando la producción de combustibles fósiles durante varias décadas, lo que, como sabemos, es exactamente lo contrario de lo que deberíamos estar haciendo”.

Los grupos ambientalistas en el Golfo y a nivel nacional también están presionando para que la administración Biden no apruebe futuras terminales de exportación para exportar el abundante gas natural licuado de Estados Unidos a naciones extranjeras, argumentando que aumenta las emisiones estadounidenses en las próximas décadas.

“Es importante que comencemos a alejarnos de esta economía de energía sucia en general”, dijo a CNN Raleigh Hoke, director de campañas del grupo de defensa Healthy Gulf. “A pesar de lo que dice la industria, el gas metano es una fuente de energía sucia”.

Torgun dijo que las históricas olas de calor que azotan las aguas abrasadoras del Océano Atlántico han sido citadas en los escritos legales del grupo que se opone a más perforaciones de petróleo y gas.

“Ciertamente ha influido en nuestra queja luego de un verano lleno de acontecimientos en todo Estados Unidos”, dijo Torgun. “Fue un verano sin precedentes para el clima en Estados Unidos y el mundo”.