(CNN Español) – Eagle Pass se ha convertido en un punto álgido de la crisis migratoria en la frontera entre México y Estados Unidos, donde miles de inmigrantes cruzan todos los días con la esperanza de recibir asilo y no ser deportados.
Tan solo en diciembre se registró un promedio de siete días con más de 9.600 encuentros con inmigrantes a lo largo de la frontera sur de EE.UU., según un funcionario de Seguridad Nacional. Esta cifra es una de las más altas que se han registrado.
Además de los números, las imágenes de miles de inmigrantes —durmiendo en el frío debajo de uno de los puentes internacionales que conecta con México y cerca de las instalaciones de procesamiento de inmigración en Eagle Pass— dimensionan la cantidad de personas originarias principalmente de Centroamérica y Sudamérica que están huyendo de la pobreza, la desigualdad y la violencia.
Para aliviar la presión que enfrenta esta ciudad fronteriza de Texas, las autoridades transportan diariamente a cientos de inmigrantes a otras ciudades a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos para que sean procesados.
El repunte se debe, según las autoridades estadounidenses, a agencias de viajes pseudolegítimas y redes de transporte organizadas que anuncian viajes a la frontera sur de Estados Unidos, pero que en última instancia ponen en contacto a los inmigrantes con traficantes. Estos traficantes facilitan el cruce ilegal de hasta 1.000 personas a la vez, dijo a CNN un agente fronterizo a principios de este mes.
Así es Eagle Pass, la ciudad fronteriza donde se agolpan miles de migrantes que realizan la travesía hasta Estados Unidos en busca de una vida mejor.
Una pequeña ciudad fronteriza, la puerta de entrada para miles de inmigrantes a EE.UU.
Eagle Pass es una ciudad del condado Maverick, Texas, en la frontera con México. Se encuentra al lado oriente del río Grande (o Bravo) y conecta a través de un puente internacional con la ciudad mexicana de Piedras Negras, Coahuila.
Eagle Pass es una ciudad pequeña que en 2022 tenía más de 28.ooo habitantes, según la Oficina del Censo de EE.UU. La mayoría de su población, el 96,4%, es de ascendencia latina o hispana.
Debido a su proximidad con México, y al ser un puerto de entrada, su economía depende del comercio fronterizo, el tráfico turístico, los negocios agrícolas y ganaderos y las industrias (sobre todo la producción de petróleo y gas), de acuerdo con la enciclopedia Britannica.
Como es común en las ciudades fronterizas, en Eagle Pass se pueden encontrar auténticos productos de México y restaurantes tex-mex, una fusión de la comida mexicana con las recetas de los residentes de Texas.
Cada marzo, la ciudad texana celebra el Festival Internacional de la Amistad. El punto culminante es el abrazo, explica el sitio oficial de la ciudad, en el que personas del lado de México y del lado de Estados Unidos se abrazan en medio de uno de los dos puentes internacionales que conectan a Eagle Pass con Piedras Negras.
Con información de Rosa Flores, Priscilla Alvarez, Rafael Romo, Maxime Tamsett y Raja Razek