(CNN Español) – Uruguay tiene una población envejecida, cada vez más urbana, concentrada en el sur del país y estancada en los 3,4 millones de habitantes.
El más reciente censo realizado en el país, que presentó el Instituto Nacional de Estadística (INE), confirmó todas las sospechas y expectativas de los demógrafos locales, salvo por una novedad: por primera vez desde las olas migratorias que conformaron al país a principios del siglo XX, el número de extranjeros inmigrantes ha aumentado, sobre todo gracias a la llegada de venezolanos, argentinos y cubanos. Y fue precisamente gracias a esa llegada de nuevos residentes que la población uruguaya no tuvo un retroceso en la cifra de su población.
Según el presidente del INE, Diego Aboal, “la primera gran conclusión del censo es que la población creció solo 1% entre 2011 y 2023. La segunda es que estamos con una población cada vez más envejecida. Luego, tenemos una población cada vez más urbana. Las zonas rurales han perdido población. Y, finalmente, tenemos una población que se sigue concentrando en el sur del país”.Los datos provisionales del censo estimaron que en Uruguay viven actualmente 3 millones 444.263 personas, de las cuales 52% son mujeres y 48% son hombres. Esto supone un aumento de 1% con respecto a la población del censo anterior, de 2011. Ese leve aumento de la población se explica, según el INE, por la contabilización de unos 62.000 inmigrantes. De lo contrario, la población hubiera disminuido.
“La población creció en algo más de 30.000 habitantes entre el 2023 y el 2011. Quiere decir que sin esos 62.000 hubiéramos anunciado una caída de la población en Uruguay”, explicó Aboal, quien detalló: “Los principales tres orígenes fueron Venezuela, con un 27%; Argentina, con un 22%; y Cuba, con un 20%”.
Por su parte, Wanda Cabella, profesora titular del Programa de Población de la Universidad de la República de Uruguay, analizó esos datos de esta manera: “Se recogieron datos que indican que hay personas inmigrantes que están instaladas en el país y eso es una novedad porque hace muchas décadas que el país no recibía inmigración”.
Después de las grandes olas migratorias que fueron moldeando al Uruguay moderno a comienzos y hasta mediados del siglo XX, esa tendencia se revirtió y, a partir de los años 60 y, sobre todo, después de la dictadura militar que se instaló en el país en los años 70, Uruguay se convirtió en un país de emigrantes.
Fue recién a partir de la segunda década del siglo XXI que el país volvió a convertirse en un lugar más apetecible para llegar que para irse. Según los expertos, durante los últimos 15 años el flujo migratorio se revirtió y Uruguay volvió a atraer migrantes, sobre todo de países latinoamericanos, como lo demuestra ahora el último censo.
La reducción de la población nacida en Uruguay
¿Y cómo explican los demógrafos esta reducción de la población nacida en Uruguay? Para Cabella, hubo “dos procesos que confluyeron para que la población, justo en los últimos años, desde 2016 en adelante, tuviera un crecimiento natural negativo: uno es que el bajaron mucho los nacimientos, la fecundidad cayó a niveles muy bajos”.
Esa baja de la tasa de fecundidad se debió “en parte a buenas razones, como la reducción del embarazo adolescente, pero también tiene que ver con tendencias de los países cuando comienzan a desarrollarse. Postergación de las decisiones de ser padres, bueno, priorización de desarrollo profesional en la juventud”, agregó Aboal.
La segunda explicación por la cual se redujo la población autóctona fue que “hubo un exceso de mortalidad” debido al covid-19, explicó Cabella. “La mortalidad está un poco influida por la pandemia”, agregó Aboal. Uruguay fue, durante el año 2021, uno de los países con mayor índice de muertes por la pandemia, según la OMS.
Y hay una tercera explicación: la noticia de la inmigración se contrapone con otra exactamente opuesta, la emigración de miles de uruguayos. Además de la inmigración, “también hubo emigración y se estima que, digamos, las cifras de la emigración casi que compensan el de la inmigración”, explica Wanda Cabella. “El crecimiento migratorio podría llegar a ser nulo o levemente positivo. Pero tenemos la ventaja de que estamos recibiendo inmigración y eso le hace bien al país”, agregó la demógrafa.
¿Se van a “extinguir” los uruguayos?
De todos modos, con o sin inmigrantes, los expertos aseguran que son exagerados los titulares que indican que los uruguayos se van a extinguir.
Según Cabella “esa es una imagen que se maneja mucho en la prensa, pero solamente por un poco la impresión de que las poblaciones tienen que crecer siempre. Y en realidad estamos en una fase de la historia de la humanidad en que las poblaciones no están creciendo o incluso están decreciendo”.
Porque, como explica Aboal, Uruguay “está más avanzado en la transición demográfica que otros países en América Latina”. Pero, asegura que lo que hoy pasa en Uruguay tarde o temprano también ocurrirá en el resto de la región. “Lo que pasa en Uruguay seguramente va a ocurrir en otros países de América Latina, más hacia el 2050, 2060”.
Lo cierto es que si a cualquier uruguayo se le preguntara cuál es la población de su país, durante las últimas cuatro décadas hubiera dado la misma respuesta sin dudarlo: tres millones. Y eso no va a cambiar. La proyección actual de los demógrafos es que es muy improbable que la población del país alguna vez llegue a los 4 millones, incluso si sigue recibiendo inmigrantes masivamente.