(CNN) – En un momento en el que Rusia está en guerra y las autoridades promueven una agenda cada vez más conservadora, una serie de celebridades que acudieron escasamente vestidas a una fiesta temática “casi nudista” en Moscú se enfrentan a duras críticas.
La fiesta, organizada por la bloguera Anastasia Ivleeva el 21 de diciembre en el club “Mutabor” de la capital de Rusia, suscitó las críticas de funcionarios de la Iglesia ortodoxa, activistas proguerra y legisladores favorables al Kremlin.
Uno de los asistentes, el rapero Vacio (Nikolay Vasilyev), que se presentó vistiendo únicamente un calcetín para cubrir sus genitales, fue condenado a 15 días de cárcel y a pagar una multa de 200.000 rublos (más de US$ 2.220), después de que un tribunal moscovita dictaminara que el acto tenía por objeto “propagar relaciones sexuales no tradicionales”.
La comunidad LGBTQ de Rusia se enfrenta a una creciente represión, y la Corte Suprema de Rusia declaró el mes pasado al “movimiento internacional LGBTQ” organización extremista.
Vasilyev fue declarado culpable de delitos como “vandalismo mezquino”. La decisión del tribunal del 22 de diciembre fue confirmada este miércoles.
“Nikolay Vasilyev (más conocido como el rapero Vacio) participó en una fiesta en la discoteca ‘Mutabor’, alteró el orden público, utilizó lenguaje vulgar y difundió publicaciones en canales de Telegram destinadas a promover relaciones sexuales no tradicionales en medios de comunicación de masas en internet”, dice la sentencia judicial.
Vacio se encuentra entre los que acudieron a presentar disculpas públicas.
La organizadora, Ivleeva, dijo en un principio que los asistentes a la fiesta habían elegido su propia vestimenta. Afirmó que el evento era una oportunidad para mostrar fotos hechas durante su mandato como redactora jefe de la edición rusa de Playboy.
Este miércoles, Ivleeva publicó un nuevo video de más de 21 minutos. En él se disculpa entre lágrimas, pidiendo perdón y una segunda oportunidad, o la condena pública.
El martes se presentó una demanda contra Ivleeva por la organización de la fiesta, en la que se solicita una indemnización de 1.000 millones de rublos (US$ 11 millones) por daños morales, informó la agencia estatal de noticias RIA Novosti.
A otra de las asistentes, la estrella del pop Anna Asti, se le canceló un evento de Año Nuevo en otro club de Moscú, según informó el local en su página web.
“Queridos amigos, debido a razones fuera de nuestro control, la actuación de Anna Asti ha sido reprogramada para una nueva fecha, que anunciaremos en breve”, decía el mensaje.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declinó hacer comentarios: “Respecto a esta fiesta, pido clemencia: sigamos siendo los únicos en el país que no discuten este tema”.