(CNN Español) – La policía de Brasil anunció este lunes el lanzamiento de una nueva etapa de la investigación para identificar y atrapar a quienes apoyaron y financiaron a miles de simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro, que el 8 de enero de 2023 intentaron irrumpir en las sedes de los tres poderes federales del país, en rechazo a los resultados de las elecciones presidenciales de 2022.
La Policía ha conseguido 46 órdenes judiciales de registro e incautación y una de prisión preventiva en 11 de los 26 estados brasileños, así como en el Distrito Federal, de acuerdo con un comunicado de la fuerza. Los daños causados por la turba ascienden a US$ 8,1 millones, indica la nota de prensa.
La Policía investiga si se cometieron los delitos de abolición violenta del Estado democrático de derecho, golpe de Estado, daño calificado, asociación para delinquir, instigación al delito y destrucción y deterioro de bienes especialmente protegidos.
CNN contactó al Gobierno de Brasil para obtener su reacción ante la decisión policial.
CNN también ha intentado contactar a un representante del expresidente Jair Bolsonaro, sin respuesta hasta el momento.
Los simpatizantes de Bolsonaro lograron vencer barreras de seguridad de los edificios del Palacio Presidencial, el Congreso y la Corte Suprema durante una movilización en protesta de los resultados de las presidenciales, que dieron el triunfo a Lula da Silva. La policía logró recuperar el control del sitio horas después. Al menos 1.500 personas resultaron detenidas, según dijeron las autoridades brasileñas el 10 de enero de 2023.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio “Lula” da Silva, encabeza este lunes en Brasilia una ceremonia que conmemora el primer aniversario de los hechos.
Lula da Silva derrotó el 31 de octubre de 2022 a Bolsonaro por un estrecho margen. El actual mandatario ganó en la segunda vuelta con el 50,85% de los votos y aseguró así su tercer periodo (no consecutivo) en la presidencia de Brasil, mientras que su contrincante obtuvo 49,15%.