(CNN) – Rusia superó a Arabia Saudita para convertirse en el mayor proveedor de petróleo de China en 2023, según los últimos datos de las aduanas chinas.
El mayor comprador de crudo del mundo importó una cantidad récord de petróleo ruso a precio de ganga el año pasado, aprovechando la desesperada búsqueda de Moscú de nuevos compradores en medio de las sanciones occidentales tras la invasión de Ucrania en 2022.
El volumen de crudo ruso enviado a China saltó un 24% en 2023 en comparación con 2022, a un total de 107,02 millones de toneladas métricas, según datos publicados por la Administración General de Aduanas de China el sábado.
Eso ayudó a Rusia a superar a Arabia Saudita como mayor proveedor de crudo de China para el año. El país de Medio Oriente envió 85,96 millones de toneladas métricas de crudo a China en 2023, un 2% menos que en 2022.
El 19% de las importaciones de crudo de China provienen ahora de Rusia, mientras que en el caso de Arabia Saudita la cifra asciende al 15%.
Rusia se convirtió en el mayor proveedor de petróleo de China hace ocho años, pero cayó por detrás de Arabia Saudita entre 2019 y 2021, cuando la nación del Golfo impulsó su comercio energético con Beijing.
Sin embargo, desde 2022 China ha amplificado su compra de petróleo ruso más barato después de que Occidente golpeara a Moscú con sanciones sin precedentes. Las importaciones chinas de crudo ruso aumentaron un 8% en 2022, hasta 86,24 millones de toneladas métricas, en comparación con 2021. Su vecina India también incrementó fuertemente sus compras.
“China necesariamente iba a maximizar el ingreso de crudo con descuento”, dijo Vandana Hari, fundadora de Vanda Insights con sede en Singapur.
El gasto total de China en crudo ruso alcanzó los US$ 60.640 millones el año pasado. Eso se traduce en un precio medio de importación de US$ 566,64 por tonelada métrica, según el cálculo de CNN. Esta cifra es aproximadamente un 10% más barata que el precio medio que pagó por el crudo saudí, que fue de US$ 626,86 por tonelada métrica.
Los descuentos de Rusia han ayudado a China a reducir su factura energética. A pesar de un aumento del 11% en su volumen global de importaciones de crudo, incluidas las procedentes de Arabia Saudita e Iraq, su gasto total en compras de petróleo se redujo en realidad un 7,7% en 2023, hasta US$ 337.500 millones, en comparación con 2022, según mostraron los datos de aduanas.
Según Hari, el recorte de la producción saudí también ayudó a Rusia a dar el salto. El país del Golfo redujo voluntariamente su producción en un millón de barriles diarios entre julio y diciembre del año pasado. Aunque Rusia también ofreció voluntariamente recortes adicionales de la producción y las exportaciones, fueron aproximadamente la mitad de la reducción saudí, añadió.
Lazos China-Rusia
A pesar de la guerra, Beijing y Moscú han estrechado sus lazos en ámbitos distintos del energético en los dos últimos años.
El comercio global entre China y Rusia alcanzó un nuevo récord de US$ 240.000 millones en 2023, un 26% más que el año anterior. Esto significa que los dos países han alcanzado un objetivo fijado en 2019 aproximadamente un año antes de lo previsto.
En los dos años transcurridos desde la invasión, cientos de marcas mundiales han salido de Rusia. Esto ha obligado a los rusos a buscar alternativas para todo tipo de productos, desde teléfonos inteligentes a automóviles, de las que a menudo se benefician las empresas chinas.
El mes pasado, el líder chino Xi Jinping elogió la asociación de Beijing con Moscú en una reunión con el primer ministro ruso, Mikhail Mishustin.
Las cifras comerciales mostraban una “fuerte resistencia y amplias perspectivas”, declaró Xi durante la reunión en Beijing, según la agencia estatal china de noticias Xinhua.
Las dos partes deben “aprovechar plenamente las ventajas de la confianza política mutua” y “profundizar la cooperación en economía, comercio, energía y conectividad”, añadió Xi.
Juliana Liu y Simone McCarthy de CNN contribuyeron con este artículo.