(CNN) — Un volcán en Islandia entró en erupción este jueves por segunda vez en este año, expulsando lava hasta 80 metros de altura en lo que es el sexto brote en el suroeste de la península de Reykjanes desde 2021.
Un video en vivo desde el área mostró columnas de roca fundida de color naranja brillante que brotaban de fisuras en el suelo, en marcado contraste con el cielo nocturno aún oscuro.
“Advertencia: comenzó una erupción volcánica al norte de Sylingarfell”, informó la Oficina Meteorológica de Islandia en su sitio web. La intensa actividad sísmica comenzó alrededor de las 5:30 a.m. (hora local) y el brote en sí comenzó unos 30 minutos después, añadió.
La fisura eruptiva tenía aproximadamente 3 kilómetros de largo, detalló la oficina, y agregó que se creía que el brote estaba en el mismo lugar que una erupción del 18 de diciembre.
El cercano spa geotérmico Blue Lagoon cerró este jueves, señaló.
La anterior erupción en la zona comenzó el 14 de enero y duró aproximadamente dos días, con flujos de lava que alcanzaron las afueras del pueblo pesquero de Grindavik, cuyos casi 4.000 habitantes habían sido evacuados, incendiando algunas casas.
La erupción de este jueves tuvo lugar a cierta distancia de Grindavik y era poco probable que representara una amenaza directa para la ciudad, dijo a Reuters el geofísico islandés Ari Trausti Gudmundsson.
“Pero podría representar alguna amenaza para la carretera a Grindavik y para la central eléctrica e incluso para la Laguna Azul”, detalló, añadiendo que el riesgo dependía de cuánta lava fluyera finalmente desde el suelo.
Los brotes de Reykjanes son las llamadas erupciones de fisuras, que a menudo se denominan de tipo islandés. No suelen provocar grandes explosiones ni una producción significativa de cenizas dispersas en la estratosfera.
El aeropuerto internacional de Keflavik, en Reykjavik, estaba abierto y operando “de la manera habitual”, declaró el operador aeroportuario Isavia en su sitio web.
En noviembre, las autoridades islandesas comenzaron a construir diques que pueden ayudar a desviar los flujos de lava ardiente lejos de los hogares y la infraestructura crítica.
A pesar de rebajar el nivel de amenaza del sistema volcánico, las autoridades locales han advertido de nuevas erupciones ya que la tierra sigue elevándose en la zona debido al magma que se acumula bajo tierra.
Islandia, que tiene aproximadamente el tamaño del estado de Kentucky, en EE.UU., cuenta con más de 30 volcanes activos, lo que convierte a la isla del norte de Europa en un destino privilegiado para el turismo de volcanes, un segmento de nicho que atrae a miles de personas que buscan emociones fuertes.
El flujo de lava es “mucho mayor” de lo previsto
Por otro lado, el jefe de Protección Civil y Gestión de Emergencias, Víðir Reynisson, afirmó que el nivel de lava que fluye desde el volcán que entró en erupción este jueves es “mucho mayor” de lo previsto inicialmente y ahora está a menos de “tres horas” de la tubería de agua caliente, que abastece a toda la península de Reykjanes, según la cadena pública islandesa RÚV.
Reynisson dijo a RÚV, poco después de las 6:00 a.m. (hora local), que se había declarado un “nivel de peligro” en la península debido al temor de que los flujos de lava provoquen escasez de suministro de agua caliente.
“Nuestros modelos de simulación de lava dicen que, si no conseguimos hacer nada, pasarán menos de tres horas antes de que el flujo de lava llegue a la tubería de agua caliente que alimenta toda la península de Reykjanes”, advirtió Reynisson.
Las autoridades se apresuran a erigir muros de protección de emergencia que, con suerte, frenarán el flujo de lava, detalló Reynisson a RÚV. También se está instalando una nueva tubería de agua, aunque su funcionamiento podría tardar algunos días, informó la emisora islandesa.