(CNN) – La portavoz de Alexey Navalny dijo que a la madre y a los abogados del fallecido político ruso les negaron el acceso este lunes al depósito de cadáveres donde supuestamente se encuentra su cuerpo.
La portavoz Kira Yarmysh dijo que a la madre y los abogados de Navalny “no se les permitió” entrar en la morgue después de llegar “temprano” este lunes por la mañana, según un comunicado en X.
Aunque Yarmysh no especificó el lugar en su mensaje, se cree que se refiere al mismo depósito de cadáveres de la ciudad de Salekhard donde también se negó el acceso a su madre y a su abogado el sábado.
“A uno de los abogados lo echaron literalmente a empujones. Cuando se preguntó al personal si el cuerpo de Alexey estaba allí, no respondieron”, dijo Yarmysh, relatando la visita de este lunes.
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En otro post, Yarmysh dijo que el Comité de Investigación de Rusia había comunicado a la madre y a los abogados de Navalny que la investigación sobre su muerte se había prolongado por un tiempo no revelado.
“Se desconoce cuánto tiempo más durará. La causa de la muerte sigue siendo ‘indeterminada’. Mienten, ganan tiempo y ni siquiera lo ocultan”, dijo Yarmysh, criticando la investigación.
El Kremlin ha dicho que “no está involucrado” en la cuestión de devolver el cuerpo de Alexey Navalny a su familia, tras su muerte el viernes pasado.
Dmitry Peskov, portavoz del presidente Putin, dijo en su llamada diaria a los periodistas: “No estamos involucrados en este asunto. Esto no es responsabilidad de la administración presidencial”.
Cuando CNN le preguntó por qué el presidente Putin aún no ha hecho ningún comentario público sobre la muerte de Navalny, Peskov dijo: “No tengo nada que añadir a lo que se ha dicho sobre este tema”.
El Kremlin dijo que “no está involucrado” en la cuestión de devolver el cuerpo de Alexey Navalny
El Kremlin dijo que “no está involucrado” en la cuestión de devolver el cuerpo de Alexey Navalny a su familia, tras su muerte el viernes pasado.
Dmitry Peskov, portavoz del presidente Putin, dijo en su comunicación diaria a los periodistas: “No estamos involucrados en este asunto. Esto no es responsabilidad de la administración presidencial”.
Cuando CNN le preguntó por qué el presidente Putin aún no ha hecho ningún comentario público sobre la muerte de Navalny, Peskov dijo: “No tengo nada que añadir a lo que se ha dicho sobre este tema”.
Navalny murió en prisión el viernes 16 de febrero tras sentirse mal en un paseo por su prisión y caer inconsciente, según el servicio penitenciario ruso. La causa de su muerte no está clara y su equipo acusó a las autoridades de mentir para retrasar el proceso de devolución de su cuerpo a la familia.
En un comunicado, el Servicio Penitenciario Federal de Rusia (FSIN) dijo que se tomaron “todas las medidas necesarias” para intentar salvar al opositor encarcelado.
El texto aclara afirma que Navalny se sintió mal después de una caminata este viernes y que “casi de inmediato” perdió el conocimiento.
El incidente desató protestas en todo el mundo, y muchas personas se concentraron ante las embajadas rusas en capitales europeas como Berlín y París, con pancartas en las que se leía “Putin es un asesino” y “Putin a La Haya”.
En Rusia, las protestas necesitan autorización de los funcionarios del Gobierno. La Fiscalía de Moscú advirtió que estaba prohibida cualquier manifestación en la capital por la muerte de Navalny.
En agosto Navalny había sido condenado a 19 años de prisión tras ser declarado culpable de crear una comunidad extremista, financiar actividades extremistas y otros numerosos delitos. En ese momento ya cumplía condenas de 11 años y medio en un centro de máxima seguridad por fraude y otros cargos que él negaba.
Su muerte fue recibida con gran pesar en todo el mundo, e incluso en Rusia -donde el más mínimo acto de disidencia política conlleva un gran riesgo- se ha honrado su memoria.
Navalny cayó gravemente enfermo en agosto de 2020 mientras viajaba de regreso a Moscú desde la ciudad siberiana de Tomsk. Entonces, el piloto realizó un aterrizaje de emergencia en Omsk, donde Navalny fue trasladado al hospital para recibir tratamiento urgente antes de ser trasladado a Alemania, aún en estado crítico.
El Gobierno alemán dijo que Navalny fue envenenado con un agente químico del grupo Novichok, una conclusión respaldada por otros dos laboratorios en Francia y Suecia. Los agentes Novichok son muy inusuales, hasta el punto de que muy pocos científicos fuera de Rusia tienen experiencia real en cómo tratarlo.
Una investigación posterior de Bellingcat-CNN encontró que un equipo de élite del servicio de seguridad FSB de Rusia, compuesto por entre seis y diez agentes, había seguido a Navalny durante más de tres años. Uno de esos agentes reveló en una operación que el letal agente nervioso Novichok había sido colocado en los calzoncillos del activista.
A pesar de estas revelaciones, Navalny dijo que no creía que hubiera una investigación en curso en Rusia.
Esta historia se ha actualizado. Anna Chernova contribuyó a este informe.