Elon Musk, multimillonario y CEO de Tesla, en la feria Viva Tech en París, Francia, el viernes 16 de junio de 2023.

(CNN) – Un juez federal desestimó este lunes una demanda que interpuso X, empresa de Elon Musk, contra un grupo de vigilancia por sus reportes de discursos de odio en la red social.

En una contundente resolución de 52 páginas, el juez calificó la demanda de X de claramente punitiva y observó que no se enfoca en proteger la seguridad y los derechos legales de la plataforma.

“A veces no está claro qué es lo que impulsa un litigio”, escribió el juez de distrito Charles Breyer, del Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito Norte de California, en las primeras líneas de la decisión. “Otras veces, una demanda es tan descarada y estridente sobre un tema que no puede haber confusión sobre ese propósito”.

“Este caso representa esta última circunstancia”, continuó Breyer. “Este caso trata de castigar a los demandados por su discurso”.

La demanda de X acusaba al Centro para Contrarrestar el Odio Digital (CCDH por sus siglas en inglés) de violar los términos de servicio de la compañía cuando estudió y luego escribió sobre el discurso de odio en la plataforma tras la adquisición de Twitter por parte de Musk en octubre de 2022. X culpó a los informes de CCDH, que mostraban la prevalencia de la incitación al odio en la plataforma, de amplificar la preocupación de las marcas por la seguridad y de alejar a los anunciantes del sitio.

En la demanda, X afirmaba haber sufrido decenas de millones de dólares en daños y perjuicios por las publicaciones de CCDH, que es una organización internacional sin ánimo de lucro, con oficinas en el Reino Unido y Estados Unidos.

Debido a su potencial para destruir al grupo de vigilancia, el caso ha sido ampliamente visto como un barómetro para la investigación y la rendición de cuentas en X, ya que Musk dio la bienvenida de nuevo a la plataforma a prominentes supremacistas blancos y a otros que habían sido suspendidos previamente cuando la plataforma era todavía una empresa que cotizaba en bolsa con el nombre de Twitter.

En diciembre, por ejemplo, Musk restauró la cuenta X del teórico de la conspiración Alex Jones, que perdió una sentencia de US$ 1.500 millones por difundir teorías falsas sobre un tiroteo en una escuela de Newtown (Connecticut) en el que murieron 20 niños y seis educadores.

El fallo del juez de este lunes también ilustró los límites de la pretensión de Musk de ser un “absolutista de la libertad de expresión”.

Este lunes, Breyer señaló que los escritos de CCDH sobre X “constituyen incuestionablemente” un ejercicio de los derechos de libertad de expresión del grupo y que el grupo “presenta un caso convincente” de que su recopilación de datos de X “fue una recopilación de noticias para promover los derechos protegidos de CCDH”.

También dijo que le preocupaba que X litigara de mala fe y negó a la empresa la oportunidad de enmendar y volver a presentar su demanda por incumplimiento de contrato.

“Al Tribunal le preocupa que el deseo de X Corp. de enmendar su demanda por incumplimiento de contrato tenga un motivo dilatorio: forzar a CCDH a gastar más tiempo y dinero defendiéndose antes de que pueda esperar salir de este litigio potencialmente ruinoso”, escribió. Añadió que sería “erróneo” permitir que X modificara su demanda “cuando los daños que alega ahora, y los daños que le gustaría alegar, son tan problemáticos, y cuando la motivación de X Corp. es tan clara”.

Para combatir las alegaciones, CCDH se basó en parte en una ley californiana cuya finalidad es proteger a los demandados de procesos que pretenden amedrentar su expresión. La ley de California contra las llamadas “demandas estratégicas contra la participación pública” (SLAPP por sus siglas en inglés) es una de las más duras del país. Este lunes, Breyer escribió que la ley anti-SLAPP de California prohíbe a demandantes como X eludir la ley mediante “artificios de alegación”, como las demandas por incumplimiento de contrato.

En una audiencia celebrada en febrero para examinar la petición de CCDH de desestimar el caso, Breyer se burló de los argumentos de X calificándolos de “insustanciales” y dijo que X, en particular, no había presentado una demanda por difamación contra la organización sin ánimo de lucro.

Este lunes repitió esa crítica.

“Si las publicaciones de CCDH fueran difamatorias, eso sería una cosa, pero X Corp. ha evitado cuidadosamente decir que lo son”, escribió Breyer.

Añadió que X “desea tener las dos cosas”, tratando de imponer “daños punitivos” a CCDH pero sin tener que superar el alto listón de una demanda por difamación.

La desestimación de la demanda por parte del juez “envía un mensaje contundente”, dijo Imran Ahmed, director general de CCDH, en un mensaje en X.

“@CCDHate ha conseguido la desestimación de todos los cargos contra la indignante e hipócrita demanda SLAPP de @X Corp. de @ElonMusk para silenciar nuestra investigación”, escribió Ahmed. “Esta sentencia envía un fuerte mensaje a quienes pretenden intimidar y silenciar la investigación independiente”.

En otra declaración, Ahmed añadió: “Esperamos que esta sentencia histórica anime a los investigadores de interés público de todo el mundo a continuar, e incluso intensificar, su vital labor de responsabilizar a las empresas de redes sociales del odio y la desinformación que albergan y del daño que causan”.

X, por su parte, dijo en un comunicado publicado en la plataforma que no está de acuerdo con la decisión del tribunal y que planea apelar.

“Hoy, un tribunal federal de San Francisco emitió una decisión en el caso que X presentó contra el Centro para Contrarrestar el Odio Digital por obtener ilegalmente datos de la plataforma para crear una investigación engañosa”, dijo la compañía en una publicación. “X no está de acuerdo con la decisión del tribunal y planea apelar”.