(CNN) – Jimmy “Barbecue” Cherizier, uno de los líderes del colectivo de pandillas haitianas llamado Viv Ansam, dice que el grupo está abierto al diálogo para poner un fin a la violencia mortal que se ha apoderado del país.
“Creemos en el diálogo, estamos a favor del diálogo… Estamos listos para todas las soluciones mientras los haitianos estén sobre la mesa, estamos listos para sentarnos y hablar con todos porque no estamos orgullosos de lo que está sucediendo en este país”, dijo Cherizier en una entrevista con la emisora británica Sky News.
El líder de la pandilla explicó que los grupos armados recurrieron a la violencia para poner fin a un sistema de una “clase política corrupta” que no los representa y dice que las pandillas no bajarán las armas hasta que se establezca un nuevo sistema.
“Mientras Viv Ansam no esté en la mesa de negociaciones… el mismo sistema se regenerará nuevamente. Y podemos decir que está bien, nos sentaremos y seremos parte de la solución, pero mientras no estemos en el mesa, el país nunca estará en paz”, afirmó.
En cuanto a los planes de Kenia de liderar una fuerza multinacional en Haití como parte de una misión respaldada por las Naciones Unidas para restablecer el orden, Cherizier dijo que cualquier presencia extranjera será respondida con la fuerza.
“Si los kenianos vienen, cometerán masacres en las comunidades pobres porque los oligarcas y los políticos corruptos les dirán adónde ir con el pretexto de atrapar bandidos. No vamos a permitir esto. Si los kenianos vienen, cometerán masacres en las comunidades pobres. “Si vienen militares o policías de Kenia, los consideraremos agresores. Los consideraremos invasores y no tenemos que colaborar con los invasores… que han venido a pisotear nuestra independencia”, dijo.
Rodeado por varios hombres fuertemente armados y con el rostro cubierto, el líder de la banda admitió que algunas de las acciones del grupo son “malas”, en particular los secuestros, añadiendo que los líderes del colectivo Viv Ansam hablan varias veces al día y han acordado dejar de hacerlo.
Sin embargo, advirtió que “en los próximos días las cosas empeorarán respecto de cómo están ahora”.
“Las armas se bajarán cuando sea necesario. Por el momento no hemos llegado al punto en el que debamos dejar las armas, porque la gente aquí no quiere atender a razones. Hemos oído hablar de diálogo durante más de dos o tres años, hemos estado pidiendo que todos se sentaran y hablaran con la gente armada y nadie nos escuchó”, dijo.