(CNN) – En 2017, cuando Francia implementó la primera ley del mundo sobre el “derecho a la desconexión” (que prohibía que el jefe enviara correos electrónicos a los trabajadores fuera del horario laboral), los estadounidenses respondimos como siempre lo hacemos cuando los franceses hacen algo interesante: negar con la cabeza mientras deseamos en secreto que pudiéramos hacer lo mismo. (Ver también: beber vino en el almuerzo, jubilarse a los 62 años, atención sanitaria nacional).
Los estadounidenses somos duros, en muchos sentidos. Pero cuando se trata de trabajo, podemos ser francamente tiránicos con nosotros mismos y con los demás. El trabajo es parte de nuestra identidad de una manera que la gente de otros países encuentra a veces fascinante y otras veces patológica.
Puede que estemos un poco rotos. Pero estamos mejorando. ¡O quizás no!
- Esta semana, un legislador del estado de California presentó uno de esos proyectos de ley izquierdistas sobre el “derecho a la desconexión”, que es similar al que creó Francia (y que Australia, Italia, Portugal, Bélgica y otros han copiado en diversos grados).
- Los legisladores a nivel federal están hablando de semanas laborales de 32 horas y nadie se ríe de ellos.
- Millones de nosotros trabajamos desde casa al menos parte de la semana, lo que es un reconocimiento bastante sorprendente del costo que significaban los desplazamientos antes de que la pandemia alterara la vida en la oficina.
Hubo un tiempo, no hace mucho, en que la legislación de California, introducida el lunes 1 de abril, podría haberse confundido fácilmente con una broma del Día de los Inocentes. No es ninguna broma (aunque también es muy poco probable que se convierta en ley).
El proyecto de ley tendría como objetivo garantizar que las personas no reciban correos electrónicos, mensajes de texto o llamadas del trabajo fuera de sus horas de trabajo establecidas, con notables excepciones en caso de emergencias o problemas de programación.
“El trabajo ha cambiado drásticamente en comparación con lo que era hace apenas 10 años”, dijo Matt Haney, el miembro de la Asamblea Estatal que presentó el proyecto de ley, en un comunicado. “Los trabajadores no deberían ser castigados por no estar disponibles las 24 horas del día, los siete días de la semana, si no se les paga por las 24 horas de trabajo”.
Según el proyecto de ley de Haney, tu y tu jefe tendrían que llegar a un acuerdo escrito que defina las horas de trabajo. Si tu jefe se entromete en el período no laboral tres veces, puedes denunciarlo y el estado podría imponer multas a partir de US$ 100.
Naturalmente, los tipos de startups de Silicon Valley ya se están quejando de la extralimitación que representa este proyecto de ley.
En respuesta a un tweet sobre el proyecto de ley de Haney, Mike Solana, vicepresidente de la firma de capital riesgo Founders Fund, escribió en X: “California, en su esfuerzo continuo por destruirse a sí misma, está tratando una vez más de prohibir a las nuevas empresas”.
Está bien, todos podemos estar de acuerdo en que es bastante tonto que necesitemos promulgar una ley para que las personas se respeten unas a otras. Pero la realidad es que los teléfonos inteligentes han convertido cada asunto laboral en una emergencia laboral, y la pandemia desdibujó aún más la línea entre el trabajo y el hogar. A nadie le gusta pausar Succession para responder a una solicitud de las 9 p.m., pero la culpa de ignorarla y preguntarte si tu jefe se enojará tampoco es divertida.
Más de la mitad (55%) de los trabajadores encuestados por Pew en 2023 dijeron que responden a mensajes relacionados con el trabajo fuera de su horario normal al menos algunas veces, y el 28% dijo que lo hacen “con mucha frecuencia o con frecuencia”.
Estar atado al trabajo a toda hora no sólo es malo para la salud de los trabajadores, sino también para los negocios, dice Ashley Herd, fundadora de Manager Method.
“Muchos ejecutivos y gerentes no se dan cuenta de lo importante que es para las personas recargarse de verdad”, dice Herd. “Hacer esto no es sólo algo agradable: tendrás un mejor negocio y obtendrás mejores resultados si le das a la gente ese nivel de separación”.
Por supuesto, cambiar una cultura laboral que se nutre de estar ocupado a toda hora no es fácil de cambiar. Por eso es importante el proyecto de ley Haney, se apruebe o no.
A mediados del siglo XIX, la gente normalmente trabajaba 12 horas al día, seis días a la semana. Fueron necesarias décadas de esfuerzos liderados por sindicatos y desafíos legales para llegar a 1938, cuando se promulgó la Ley de Normas Laborales Justas, que establecía que los empleadores debían pagar horas extras a los empleados que trabajaban más de 40 horas a la semana.
“Creo que, lamentablemente, se necesitaría una ley para lograr un cambio importante” en la cuestión del derecho a desconectarse, dice Herd.
Pero mientras tanto, los trabajadores tienen algunas fuerzas poderosas trabajando a su favor. Un mercado laboral históricamente ajustado ha dado a los trabajadores más influencia para negociar sus salarios, horarios y condiciones laborales. Y, por supuesto, ahora existe la amenaza siempre presente de que el mal comportamiento de los jefes termine en una publicación viral en las redes sociales, como deja claro la tendencia de TikTok “Get Laid Off With Me”.
Herd dijo que ya ha visto videos en los últimos días en las redes sociales, con comentarios sobre jefes que llaman o envían mensajes de texto el Domingo de Pascua por cuestiones que no son de emergencia.
“Mi regla general es: ‘Si algo parece extraño en las redes sociales, entonces tal vez piénsalo dos veces, como empleador o gerente, si quiere hacerlo’”, dijo Herd.
Jeanne Sahadi de CNN contribuyó con el reportaje.