El presidente de Argentina, Javier Milei

(CNN Español) – No hay alternativa. El camino es uno solo… al menos para Javier Milei.

Parece que nada ni nadie hará mover al presidente de su rumbo. “El déficit cero no se negocia”, ha repetido en todos lados y a toda hora en referencia a su política fiscal.

Pero ese objetivo presenta un reto que el gobierno deberá gestionar en el corto plazo. Es que la necesidad de ajustar las cuentas públicas empieza a chocar con un efecto que complica los planes de Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo: la contracción de la actividad ya se siente en la recaudación impositiva.

“La recaudación se está empezando a caer, y a partir de ahora se va a derrumbar, porque comienza la recesión por falta de consumo”, advierte Fabián Medina, economista independiente y docente de la carrera de Ciencias Económicas en la Universidad de Buenos Aires.

Es decir, a medida que la economía pierde ritmo, los ingresos que recibe el fisco también se resienten, por lo que se corre el riesgo de ingresar en un período circular de difícil escapatoria, algo así como un perro que se muerde la cola: el gobierno busca ajustar las cuentas, pero cada vez necesitará redoblar sus esfuerzos, porque a menores ingresos, más fuerte será el recorte para alcanzar la meca del superávit fiscal.

Ahora bien, ¿tiene el gobierno un plan para transformar el ajuste en crecimiento económico? ¿Existe un despegue de la actividad a la vista en este contexto? Después del déficit cero, ¿qué sigue?

Cae la recaudación

El gobierno celebró los resultados fiscales de enero y febrero. Fueron dos meses de superávit fiscal, cuando los ingresos superaron a los gastos, algo que no sucedía desde 2012. Pero ese logro se sustentó en un recorte de las erogaciones y no en un aumento de la recaudación en términos reales, lo que apunta a una fuerte caída del nivel de actividad.

En enero, la recaudación creció nominalmente 239,8% interanual, contra una inflación de 254,2% en el mismo período. Mientras que en febrero de este año, el índice de Precios al Consumidor anotó un alza de 276,2% en comparación con el mismo mes del año pasado, mientras que el fisco recaudó 240,9% más que en febrero de 2023.

Marzo siguió con la misma dinámica. El costo de vida aumentó 287,9%, interanual, mientras que los ingresos públicos lo hicieron 230,6% en el mismo lapso.

Si se observa la tendencia intermensual, la recaudación viene perdiendo también contra la inflación. En febrero, ascendió 5,9% contra enero de este año, con una inflación de 13,2% en el mismo período. Mientras que en marzo, el último dato disponible, los ingresos subieron 6,6% frente a un costo de vida 11% más caro que el mes anterior.

La incógnita del futuro

Como la política fiscal no va a modificarse, según lo reiterado por Milei, durante los próximos meses se verá si el gobierno tiene efectivamente un plan para combinar ajuste fiscal con crecimiento o si la economía va a un callejón sin salida.

Pero el dato de la caída de la recaudación hace que surjan interrogantes sobre el camino adoptado por el gobierno sobre la composición del plan económico. Para Nicolás Litvinoff, economista, experto en finanzas y escritor, “el gobierno quiere realizar su programa en base a etapas”.

“La primera es la del ajuste, que es en la que estamos ahora, por eso es lógico que caiga la actividad y también la recaudación. Pero existe una segunda etapa, la de la reactivación económica que llegará cuando se levante el cepo cambiario, que traería un aumento en la actividad. Es algo planificado lo que está pasando”, consideró.

Los próximos meses serán clave, coinciden los especialistas. Se verá si el gobierno logra reactivar y generar más ingresos, o si pasa de agudo a crónico el riesgo de seguir circulando entre más ajuste y menos recaudación.