CNNE 1680649 - las inundaciones en dubai, vistas desde el cielo
Satélite capta imágenes de las inundaciones en Dubai desde el espacio
01:26 - Fuente: CNN

(CNN) – La lluvia récord que cayó sobre Emiratos Árabes Unidos y Omán este mes, dejó inundaciones mortales y caos, fue impulsada en parte por la crisis climática, según un análisis científico publicado este jueves, que apuntaba directamente a que los humanos queman combustibles fósiles.

Un equipo de 21 científicos e investigadores, en el marco de la iniciativa World Weather Attribution, descubrió que el cambio climático estaba haciendo que los eventos de lluvias extremas en los dos países, que normalmente ocurren durante los años de El Niño, fueran entre un 10 y un 40% más intensos de lo que hubieran sido sin el calentamiento global.

Durante un periodo de menos de 24 horas, entre el 14 y el 15 de abril, Emiratos Árabes Unidos experimentó las precipitaciones más intensas desde que comenzaron los registros hace 75 años. Dubai, una deslumbrante ciudad desértica acostumbrada a pasar meses sin precipitaciones, experimentó el equivalente a más de un año y medio de lluvia en ese tiempo, según el análisis.

Utilizando modelos científicos, el equipo no pudo determinar con precisión en qué medida el cambio climático había hecho que las inundaciones fueran más probables.

Sin embargo, concluyeron que el calentamiento global era el factor “más probable” de las precipitaciones récord, porque la atmósfera en un mundo 1,2 grados más cálido ahora puede contener un 8,4% más de humedad, lo que genera que los eventos de lluvias extremas sean más intensos. El análisis señala que los cambios en los patrones de circulación impulsados ​​por el calentamiento global también aumentan la intensidad de las precipitaciones.

El calentamiento global fue la única razón restante que pudieron identificar para explicar el aguacero más fuerte.

La gente camina entre las inundaciones causadas por las fuertes lluvias, en Dubai el 17 de abril de 2024. Créditos: Amr Alfiky/Reuters.

Las inundaciones dejaron como consecuencia la muerte de cuatro personas en Emiratos Árabes Unidos y de al menos a otras 19 en Omán, incluidos 10 niños cuyo autobús escolar fue arrastrado por el diluvio. El clima extremo derivó en focos de inundaciones en varias partes de Emiratos Árabes Unidos, como se pudo ver en imágenes de satélite desde el espacio.

Las inundaciones también dejaron consecuencias de todo Dubai. Más de 1.000 vuelos que entraban y salían del aeropuerto de Dubái (el segundo más transitado del mundo) fueron cancelados, y siguieron días de retrasos. La gente se vio obligada a abandonar sus vehículos en las carreteras inundadas. Tres mujeres filipinas que trabajaban en Dubái murieron en su coche, atrapadas por el agua que corría por la calle.

Los lujosos centros comerciales de la ciudad sufrieron filtraciones cuando el agua de lluvia se traspasó los techos y los ascensores dejaron de funcionar en los rascacielos, lo que obligó a los residentes a subir escaleras hasta decenas de pisos. Al no poder regresar a casa por las carreteras bloqueadas, algunos conductores durmieron en sus automóviles.

“Las inundaciones de Emiratos Árabes Unidos y Omán demostraron que incluso las regiones secas pueden verse fuertemente afectadas por las precipitaciones, una amenaza que aumenta con el incremento del calentamiento global debido a la quema de combustibles fósiles”, dijo Sonia Seneviratne, profesora del Instituto de Ciencias Atmosféricas y Climáticas en Zúrich.

Las fuertes lluvias que cayeron sobre los dos países provinieron de dos poderosos sistemas de tormentas separados, dijo Mansour Almazroui del Centro de Excelencia para la Investigación del Cambio Climático de la Universidad Rey Abdulaziz en Jeddah, Arabia Saudita.

Almazroui añadió que las temperaturas récord del océano estaban desempeñando un papel en la sobrecarga de las tormentas.

“El Océano Índico se está calentando. Y la alta presión en el Océano Índico seguramente contribuye a las precipitaciones”, dijo a los periodistas.

La Península Arábiga, en la que se asientan Emiratos Árabes Unidos y Omán, experimenta ocasionalmente intensos episodios de lluvia en abril y mayo provenientes de lo que se conoce como sistemas convectivos de mesoescala: varias tormentas eléctricas que juntas actúan como un solo sistema climático.

Friederike Otto, profesora titular de ciencia del clima en el Instituto Grantham de Londres, dijo que los estudios señalan que estas tormentas están aumentando en frecuencia.

El Niño, una oscilación natural en las temperaturas del océano que impacta el clima global, también fue un factor determinante en la lluvia de abril, dijo Otto. Sin embargo, la atención debe centrarse en frenar el cambio climático, añadió.

“Si bien no podemos detener a El Niño, sí podemos detener el cambio climático”, afirmó Otto. “La solución es dejar de quemar combustibles fósiles y detener la deforestación”, afirmó. La deforestación es responsable de al menos el 12% de la contaminación mundial por carbono.

Una vista general de vehículos abandonados en una carretera inundada el 18 de abril de 2024 en Dubai. Crédito: Francois Nel/Getty Images.

La empresa energética estatal de Emiratos Árabes Unidos, ADNOC, tiene planes para una importante expansión de la producción de petróleo y gas, como informó anteriormente CNN. El país fue ampliamente criticado por elegir al director ejecutivo de ADNOC, Sultan Al-Jaber, para presidir las conversaciones internacionales sobre el clima respaldadas por la ONU en Dubai el año pasado.

Las conversaciones tuvieron cierto éxito y casi todas las naciones estuvieron de acuerdo en que el mundo debería abandonar los combustibles fósiles.

Pero muchos países ricos en combustibles fósiles todavía están extrayendo enormes volúmenes de carbón, petróleo y gas, y algunos incluso planean explorar en busca de más petróleo y construir nuevas infraestructuras. La Agencia Internacional de Energía dijo que el mundo debe poner fin a los nuevos proyectos de combustibles fósiles si quiere limitar el calentamiento global a 1,5 ºC, un objetivo global con base científica que es central en el Acuerdo de París de 2015.

Casi medio año después de las conversaciones sobre el clima, “los países todavía están abriendo nuevos yacimientos de petróleo y gas”, dijo Otto. “Si el mundo sigue quemando combustibles fósiles, las precipitaciones en muchas regiones del mundo serán cada vez más intensas, lo que tendrá como consecuencia inundaciones más mortíferas y destructivas”.

– Abbas Al Lawati de CNN contribuyó a este informe desde Dubai.