(CNN) – Los artículos periodísticos de un sitio de noticias local que aparecen en todo el país parecen cubrir aquello en lo que se centraría cualquier medio comunitario: crimen, política local, clima y acontecimientos. “Reportajes detallados sobre tu vecindario”, declara con orgullo el eslogan del medio.
Pero una mirada más cercana a las firmas que utilizan el sitio local y una red nacional (Sarah Kim, Jake Rodríguez, Mitch M. Rosenthal) revela una marca de inteligencia artificial. Estas no son firmas reales. De hecho, los nombres ni siquiera pertenecen a humanos reales. Los artículos fueron escritos con el uso de IA.
El medio, Hoodline, no es el primer ni el único sitio de noticias que aprovecha la IA. Las organizaciones de noticias de todo el mundo están luchando por encontrar la manera de aprovechar la tecnología en rápido desarrollo sin verse invadidas por ella.
Pero los expertos advierten que depender demasiado de la IA podría arruinar la credibilidad de las organizaciones de noticias y eventualmente potenciar la difusión de información errónea si no se controla de cerca. Las empresas de medios que integran la IA en la publicación de noticias también han visto que les ha resultado contraproducente, terminando en ciertos casos en vergüenza pública. Los artículos generados por IA del medio tecnológico CNET cometieron errores fácticos vergonzosos. Gannett, el propietario de la cadena de periódicos más grande del país, retiró un experimento de inteligencia artificial que informaba sobre juegos deportivos de escuelas secundarias después de burlas públicas. Sports Illustrated eliminó varios artículos de su sitio web después de que se descubrió que habían sido publicados con nombres de autores falsos.
Hoodline, fundada en 2014 como un medio de noticias local con sede en San Francisco con la misión de “cubrir los desiertos de noticias que nadie más cubre”, supo emplear una sala de redacción llena de periodistas humanos. Desde entonces, el medio se ha expandido hasta convertirse en una red nacional de sitios web locales, que cubren noticias y eventos en las principales ciudades de todo el país y atraen a millones de lectores cada mes, dijo la compañía.
Pero el año pasado, Hoodline comenzó a llenar su sitio con artículos generados por IA. Una página de descargo de responsabilidad ubicada en la parte inferior de sus páginas señala a los lectores: “Si bien la IA puede ayudar en segundo plano, la esencia de nuestro periodismo, desde la concepción hasta la publicación, está impulsada por el conocimiento y la discreción humana real”.
Zachary Chen, CEO de la empresa matriz de Hoodline, Impress3, que adquirió el sitio en 2020, defendió el uso de IA en el sitio y su transparencia con los lectores, y le dijo a CNN que el medio ofrece informes valiosos y está generando ingresos para contratar más periodistas humanos en el futuro.
El personal de Hoodline incluye “decenas de editores, así como decenas de periodistas investigadores, a tiempo completo”, dijo Chen. El medio también emplea a un “número creciente de periodistas de campo que investigan y escriben historias originales sobre los vecindarios”, agregó, en referencia a artículos recientes sobre restaurantes, tiendas minoristas y eventos en el área de San Francisco.
Biografías para bots
Pero hasta hace poco, el sitio había desdibujado aún más la línea entre la realidad y la ilusión. Capturas de pantalla sacadas el año pasado por Internet Archive y el medio local Gazetteer mostraron que Hoodline había embellecido aún más las firmas de sus autores de IA con lo que parecían ser retratos generados por IA que se asemejaban a personas reales e información biográfica falsa.
“Nina es una escritora desde hace mucho tiempo y nativa del área de la Bahía que escribe sobre buena comida y bebidas deliciosas, tecnología tentadora y negocios bulliciosos”, afirma una biografía.
Desde entonces, los retratos falsos y las biografías fueron eliminados del sitio y reemplazados por una pequeña insignia de “IA” junto a la firma de cada artículo asistido por máquina, aunque todavía llevan nombres humanos. Las capturas de pantalla archivadas también se borraron de gran parte de Internet. El director de Wayback Machine, Mark Graham, dijo a CNN que las páginas archivadas de los escritores de IA de Hoodline fueron eliminadas el mes pasado “a petición del titular de los derechos del sitio”.
Chen reconoció que la compañía solicitó que las capturas de pantalla del archivo del sitio se eliminaran de Internet, y dijo que “algunos sitios web han tomado capturas de pantalla obsoletas de hace meses o incluso años para caracterizar erróneamente nuestras prácticas actuales”.
“Un gesto vacío hacia la transparencia”
Pero los expertos encendieron las alarmas por las prácticas de Hoodline, y advirtieron que este caso ejemplifica los peligros potenciales del uso de la IA en el periodismo, que amenazan con disminuir la confianza del público en las noticias.
La forma en que el sitio utiliza y divulga la IA engaña deliberadamente a los lectores al “imitar” la apariencia de una “organización de noticias local basada en estándares con periodistas reales”, dijo Peter Adams, vicepresidente sénior del News Literacy Project, cuyo objetivo es educar al público sobre la identificación de información creíble.
“Es una forma flagrantemente opaca de engañar a la gente haciéndoles creer que están leyendo informes reales de un periodista real que se preocupa por ser justo, preciso y transparente”, dijo Adams a CNN.
La pequeña insignia de “IA” que ahora aparece junto a los autores falsos en el sitio es “un gesto vacío hacia la transparencia en lugar de ejercer realmente la transparencia”, añadió Adams.
Chen no reveló qué sistema de inteligencia artificial está empleando Hoodline, sólo lo llamó “nuestro propio software patentado y personalizado, combinado con los socios de inteligencia artificial más avanzados para crear artículos basados en hechos y listos para publicar”. Cada artículo, dijo Chen, es supervisado por los editores antes de su publicación.
Gazetteer informó anteriormente que al menos dos empleados de Hoodline dijeron en LinkedIn que tenían su sede en Filipinas, lejos de las ciudades de EE.UU. que el medio pretende cubrir. Chen no respondió a la pregunta de CNN sobre su personal o dónde se encuentra.
La News/Media Alliance, que representa a más de 2.200 editores estadounidenses, apoyó a las organizaciones de noticias que emprenden acciones legales contra los desarrolladores de inteligencia artificial que recopilan contenido de noticias sin permiso. Danielle Coffey, directora ejecutiva del grupo, le dijo a CNN que el contenido de Hoodline “es probablemente una violación de la ley de derechos de autor”.
“Es otro ejemplo de robo de nuestro contenido sin permiso y sin compensación para luego dar la vuelta y competir con el trabajo original”, dijo Coffey. “Sin noticias de calidad, este tipo de contenido, entre otras prácticas, se volverá insostenible con el tiempo, ya que las noticias de calidad simplemente desaparecerán”.
Chen le dijo a CNN que se toma muy en serio la ley de derechos de autor y que el medio tiene “procesos muy refinados con fuertes barreras de seguridad”. Los lectores del sitio, afirmó, “aprecian la naturaleza imparcial de nuestras noticias asistidas por IA”, y agregó que el tráfico de visitantes de Hoodline se ha multiplicado por veinte desde que se adquirió la publicación. (Chen no especificó sus cifras de tráfico).
Eso no quiere decir que no haya lugar para la IA en una sala de redacción. Puede ayudar a los periodistas en la investigación y el procesamiento de datos, y reducir los costos en una industria que lucha con presupuestos más ajustados. Algunas organizaciones de noticias, como News Corp., firman cada vez más asociaciones lucrativas con desarrolladores de inteligencia artificial como OpenAI para ayudar a reforzar la base de conocimiento de sus grandes modelos de lenguaje.
Pero el uso que hace Hoodline de artículos escritos por una máquina con nombres aparentemente humanos no es la forma de hacerlo, dijo Felix Simon, investigador en inteligencia artificial y noticias digitales en el Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo de la Universidad de Oxford.
“Emplear IA para ayudar a los periodistas locales a ahorrar tiempo para que puedan concentrarse en realizar investigaciones más profundas es cualitativamente diferente de producir una gran cantidad de historias de baja calidad que no hacen nada para brindar a las personas información oportuna y relevante sobre lo que está sucediendo en su comunidad, o que les proporcione una mejor comprensión de cómo las cosas que suceden a su alrededor terminarán afectándolos”, dijo Simon a CNN.
Una investigación realizada por Simon y Benjamin Toff, profesor de periodismo en la Universidad de Minnesota, también descubrió que el público no ha aceptado el uso de la IA en la información periodística.
“Descubrimos que la gente confía un poco menos en las noticias etiquetadas como IA, y hay razones para creer que la gente no estará tan dispuesta a pagar por noticias generadas exclusivamente con IA”, dijo.
Mantener las noticias locales con vida
En la red de sitios de noticias locales de Hoodline es difícil encontrar un artículo que no esté escrito por el software. Gran parte del contenido del sitio parece haber sido reescrito directamente de comunicados de prensa, publicaciones en redes sociales o agregado de otras organizaciones de noticias. Chen dijo que el medio tiene como objetivo “proporcionar siempre una atribución adecuada” y seguir prácticas de “uso justo”.
“Las noticias locales tuvieron una terrible tendencia a la baja durante dos décadas y, a medida que nos expandimos, Hoodline puede traer historias locales que brindan información sobre lo que está sucediendo a un nivel hiperlocal, incluso en los llamados ‘desiertos de noticias’”, dijo Chen.
El medio, que es rentable, comentó Chen, planea contratar más periodistas humanos a medida que la compañía busca convertir sus actuales personajes de IA en “presentadores de noticias de IA que ofrecen historias en videos cortos”. El plan hará uso de firmas falsas publicadas en el sitio, y los convertirá eventualmente en lectores de noticias de IA, dijo.
“No tendría sentido que un presentador de noticias sobre IA se llamara ‘Hoodline San Francisco’ o ‘Investigado por la Persona A y Editado por la Persona B’. Esto es hacia lo que estamos avanzando”, afirmó Chen.
Nuala Bishari, exreportera de Hoodline, escribió en una columna reciente para el San Francisco Chronicle que ver su antiguo trabajo reemplazado por IA es “surrealista”.
“Los viejos reportajes hechos en el terreno fueron reemplazados por personas falsas que nunca pusieron un pie en ninguno de los barrios sobre los que escriben porque no tienen pies”, escribió Bishari.
Pero la transformación en Hoodline muestra que se necesitan soluciones más grandes para mantener vivas las noticias locales.
“Sin un gran cambio, el periodismo tal como lo conocemos seguirá fracasando”, expresó Bishari. “Y no son sólo los pequeños medios como Hoodline los que están en peligro de extinción o de ser zombificados por la IA”.