(CNN) – Hunter Biden, el hijo del presidente de EE.UU. Joe Biden, fue condenado en un juicio en un caso histórico que podría afectar a la campaña de reelección del actual mandatario estadounidense. Fue declarado culpable de tres cargos federales por violar las leyes destinadas a impedir que los drogadictos posean armas de fuego.
Es la primera vez que un miembro de la familia inmediata de un presidente ha sido declarado culpable de un delito durante el mandato de su padre, aunque sus crímenes son anteriores al período de Joe Biden como presidente.
Hunter Biden, de 54 años, fue hallado culpable de comprar y poseer ilegalmente un arma mientras abusaba o era adicto a las drogas, una violación de la ley federal. Se había declarado inocente de los tres cargos, aunque ha hablado abiertamente de sus problemas con el alcohol y su adicción al crack.
¿Cuáles eran los cargos?
De los tres cargos de la acusación, los dos primeros estaban relacionados con la compra del arma en sí.
Cuando una persona compra un arma, debe rellenar un formulario en la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) y afirmar que está legalmente autorizada a comprar el arma. Hunter Biden fue acusado de mentir en esos formularios.
Estas preguntas incluyen: ¿Ha sido condenado por un delito grave? ¿Es usted un fugitivo? ¿Está en el país en situación ilegal? Y, lo que es más importante en este caso, ¿es usted “consumidor ilegal o adicto” a drogas ilícitas? Hunter Biden supuestamente marcó la casilla que decía “No”.
El tercer cargo se refiere a la posesión del arma. También va contra la ley federal poseer un arma si uno abusa de las drogas. Hunter Biden tuvo el arma durante 11 días en octubre de 2018, antes de que su novia la arrojara a un contenedor porque estaba preocupada por su salud mental, según la acusación y los textos hechos públicos en recientes presentaciones judiciales.
“Las armas presentan un peligro si caen en las manos equivocadas, y ese es el ímpetu detrás de estas leyes”, dijo a CNN Nabeel Kibria, un abogado defensor residente en Washington que ha manejado cientos de casos de armas. “Las pruebas parecen estar bastante en contra de Hunter… pero ¿quién determina quién es un adicto? ¿Cuáles son las reglas claras que deben seguirse?
¿Podría Hunter Biden ir a la cárcel?
Ahora que fue declarado culpable de los tres cargos, el hijo del presidente podría enfrentarse a una pena de hasta 25 años de prisión.
Sin embargo, no tiene antecedentes penales, y las personas que delinquen por primera vez suelen recibir penas mucho más bajas que las máximas. Su castigo dependerá exclusivamente de la jueza Noreika.
Se trata de cargos federales, por lo que Joe Biden puede indultar a su hijo en cualquier momento. Si su hijo es condenado, el presidente también podría conmutar la pena, librándolo del castigo impuesto. La Casa Blanca, sin embargo, ha descartado explícitamente la posibilidad de un indulto, pero ese cálculo político podría cambiar tras las elecciones de noviembre.
¿Había ocurrido esto antes?
Este es un momento histórico para Estados Unidos y para la historia de la presidencia. Ningún presidente ha intentado nunca dirigir el país mientras asiste al juicio de su propio hijo y menos si es condenado, como acaba de ocurrir. A lo largo de las décadas, abundan los ejemplos de familiares de presidentes metidos en problemas. El hijo de George H. W. Bush se enfrentó a sanciones civiles por violar las leyes bancarias mientras su padre ocupaba la Casa Blanca. El hermano de Jimmy Carter fue investigado por sus actividades de cabildeo en el extranjero. Pero nada ha llegado al nivel de un juicio penal.
Douglas Brinkley, historiador presidencial de CNN, dijo que “siempre hay alguien considerado una oveja negra en la familia presidencial”, pero que los extensos asuntos legales de Hunter Biden “llegan inusualmente lejos porque se trata del hijo del presidente”.
“Este juicio es una cruz que carga el presidente Biden y pesa mucho en su psique”, dijo Brinkley. “Para cualquier padre ver a su hijo pasar por una adicción, y ahora enfrentarse a una posible pena de cárcel, es desgarrador. Uno esperaría que la familia fuera su zona de confort. Pero en este caso, la familia es probablemente su mayor preocupación del momento”.
Los lazos familiares también han causado algunas divergencias intrigantes entre padre e hijo.
Existe otra batalla judicial sobre la constitucionalidad de la ley que declara ilegal que los consumidores de drogas posean un arma. El Gobierno de Joe Biden defiende la ley y quiere que la Corte Suprema se ocupe del asunto. Pero el equipo de Hunter Biden argumentó en su causa, sin éxito, que la ley viola la Segunda Enmienda.
Biden ha sido claro al decir que “no hago ni haré comentarios sobre casos federales pendientes”.
Como presidente, si Biden hubiese querido cerrar el caso, podría hacerlo en cualquier momento, concediendo un indulto total a Hunter. Pero la Casa Blanca lo descartó repetida y explícitamente.
Con información de Marshall Cohen y Holmes Lybrand