(CNN Español) - - Francisco Jiménez, ministro de Gobernación para Guatemala, confirmó que el director general del Sistema Penitenciario, Sergio Vela, presentó una denuncia ante la fiscalía de Guatemala para iniciar una investigación a un total de 108 guardas tras el operativo realizado en el Centro Canadiense de Alta Seguridad conocido como “El Infiernito” en la ciudad de Escuintla, a unos 60 kilómetros al sureste de la capital.
En un comunicado en video, Sergio Vela, añadió que los guardas de seguridad habrían sido captados en video violando los protocolos y que estas denuncias se dan en el marco de los operativos realizados en este centro en los que la policía encontró teléfonos celulares, refrigeradores y animales en una instalación de alta seguridad.
“Con estas denuncias reafirmamos que en la actual Dirección General del Sistema Penitenciario no vamos a tolerar más los ilícitos ni el incumplimiento de deberes por parte de nuestro personal”, dijo Vela.
A principios de este mes, el gobierno anunció que la policía guatemalteca había trasladado a unos 225 presuntos pandilleros de la prisión, donde la policía dijo que encontraron lso mencionados artículos, incluida “una piscina con cocodrilos”.
Más de 400 agentes de policías y fuerzas armadas participaron en el operativo del 2 de junio para trasladar a los reclusos, quienes son presuntos miembros de la banda criminal Barrio 18, según el ministro Jiménez.
“Son cárceles, NO vacaciones”, escribió Jiménez en una publicación en X, agregando que la prisión se convertiría en una “verdadera prisión de máxima seguridad”.
Las fotografías publicadas por la policía mostraban aires acondicionados y otros electrodomésticos, así como mapaches, un halcón, un águila y zorros grises entre los objetos recuperados de la prisión.
Vela dijo el martes que la denuncia ante la Fiscalía reafirma que su oficina “ya no tolerará actos ilícitos o incumplimiento de deberes por parte de nuestro personal”.
Guatemala ha luchado para lidiar con el creciente exceso de capacidad y la violencia de las pandillas en sus prisiones.
En una conferencia reciente sobre la reforma penitenciaria, el ministro del Interior dijo que el sistema está sobresaturado y alcanza hasta el 400% de su capacidad, una situación que describió como “fuera de control”, según Canal Antigua, afiliado de CNN.