(CNN) – Dos astronautas veteranos extenderán su estadía en la Estación Espacial Internacional mientras los equipos en tierra trabajan para comprender mejor los problemas con la nave espacial construida por Boeing que los llevó a la órbita.
Funcionarios de Boeing y la NASA dijeron este martes que Suni Williams y Butch Wilmore, quienes llegaron a la estación espacial el 6 de junio para lo que se estimaba sería una visita de aproximadamente una semana, no regresarán a casa antes del 26 de junio.
Esa fecha prevista marca un retraso con respecto a proyecciones anteriores del 18 y 22 de junio.
Desde su lanzamiento a órbita el 5 de junio en el primer vuelo de prueba tripulado de la nave espacial Starliner de Boeing, los astronautas sortearon una serie de problemas con el vehículo, como propulsores que funcionan mal y una serie de fugas de helio que surgieron en el camino a la estación espacial.
Mantener el vehículo en órbita es esencial para estudiar los problemas que ocurrieron en el módulo de servicio de la nave espacial Starliner, un accesorio cilíndrico que se encuentra en la parte inferior de la nave espacial. El módulo de servicio será desechado y descartado cuando la cápsula regrese a casa desde el espacio.
Debido a que el módulo de servicio no regresará con la misión, los ingenieros no tendrán la oportunidad de recopilar más datos sobre los problemas técnicos después de que los astronautas aterricen, señaló Steve Stich, gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, en una conferencia de prensa este martes.
Por eso, esperan aprender todo lo posible mientras el vehículo todavía esté atracado en la estación espacial, aunque ninguno de los problemas amenazó todavía el éxito general de la misión, dijo Stich.
“Hasta ahora, no vemos ningún escenario en el que Starliner no pueda traer a Butch y Suni a casa”, dijo Stich.
“Realmente queremos trabajar con el resto de los datos”, añadió.
Una misión de prueba llena de obstáculos
El lanzamiento del vuelo inaugural de astronautas de Starliner se produjo después de años de retrasos y bloqueos en el desarrollo, incluida una lista de problemas con el software y el sistema de propulsión de la nave espacial revelados por dos misiones de prueba no tripuladas en 2019 y 2022.
Los problemas actuales del Starliner sugieren que el equipo de desarrollo no resolvió todos esos inconvenientes antes del vuelo tripulado.
Problemas similares con el propulsor, por ejemplo, se revelaron durante el vuelo de prueba sin tripulación de la nave espacial en 2022.
Stich reconoció durante una conferencia de prensa el 6 de junio que los funcionarios “pensaron que habían solucionado ese problema”.
Pero añadió: “Creo que nos estamos perdiendo de algo importante que está sucediendo dentro del propulsor”.
Desde el acoplamiento del 6 de junio, los funcionarios de la NASA y Boeing trabajaron para revisar los datos de vuelo y analizar los problemas, un proceso que está en curso, dijo Stich. Es posible que los problemas con los propulsores sean causados por el sobrecalentamiento que afectó la forma en que se quemó el combustible de los propulsores cuando se dispararon rápidamente durante el encuentro de Starliner con la estación espacial, agregó.
Aún no está claro qué pudo haber causado las fugas de helio, aunque ese problema también podría estar relacionado con problemas con los propulsores, dijeron los funcionarios.
En total, hay 28 propulsores de control de reacción en el módulo de servicio de Starliner y 12 en el propio vehículo Starliner, según un documento informativo de Boeing. Cuando se le preguntó durante la conferencia de prensa, Stich no dijo cuántos de esos propulsores podrían fallar antes de que el Starliner se considere inseguro.
De los cinco propulsores del módulo de servicio que fallaron durante el vuelo, todos menos uno fueron recuperados, dijeron las autoridades.
Si el cronograma actual se mantiene, Williams y Wilmore podrían subir a bordo de la cápsula Starliner y desacoplarse de la estación espacial justo después de las 10 p.m. ET del 25 de junio, antes de lanzarse en paracaídas para aterrizar poco antes de las 5 a.m. ET del 26 de junio.
La próxima oportunidad para abandonar la estación espacial después de eso sería el 2 de julio, señaló Stich, y hay posibilidades adicionales de salida cada cuatro días.
“Creo que nos estamos tomando nuestro tiempo extra, dado que este es un vehículo con tripulación, y queremos asegurarnos de que no dejamos nada sin revisar”, dijo Stich.