Imagen de archivo.

(CNN Español) – La Fiscalía de Bolivia anunció este lunes la reapertura de la investigación en contra de los presuntos encubridores del sacerdote jesuita español Luis María Roma, fallecido en 2019.

Al momento de su muerte, Roma había sido señalado de abusar sexualmente de menores. Las autoridades bolivianas iniciaron una investigación sobre los abusos en 2019 tras recibir denuncias por parte de las víctimas, pero no abrió un caso porque entonces “no contaba con los suficientes elementos” para una imputación, según un comunicado de la Fiscalía.

El fiscal general de Bolivia, Juan Lanchipa Ponce, dijo este lunes que esa situación había cambiado.

“Lastimosamente este caso se ha cerrado porque no contábamos con todos los elementos, pero ahora ya tenemos la posibilidad de contar con testigos que puedan coadyuvar en la reapertura de esta investigación”, indicó Lanchipa.

La reapertura del caso ocurrió un día después de que el periódico español El País publicara un diario, supuestamente escrito por Roma, donde el sacerdote fallecido describe abusos en contra de menores de entre ocho y 11 años, la mayoría indígenas. CNN no ha podido verificar de forma independiente la autenticidad del texto.

De acuerdo con el medio español, cuando la Compañía de Jesús recibió las acusaciones hace cinco años, compiló fotografías que Roma habría tomado de decenas de niñas semidesnudas. El sacerdote, antes de su muerte, escribió en su diario personal que había tenido “pensamientos libidinosos” sobre las menores. Los documentos fueron recopilados por los investigadores de la orden, quienes no entregaron las pruebas a las autoridades en su momento.

La Compañía de Jesús en Bolivia difundió un comunicado el domingo en el que reconoce que las “actuaciones” de quienes atendieron las denuncias de abusos de niñas, niños y adolescentes fueron “negligentes, indolentes y nefastas”, y donde urgieron a la Fiscalía de Bolivia a reabrir el caso sobre los actos de Luis María Roma, así como “los que considere oportunos”.

“Dado que la voluntad y mandato de la Compañía de Jesús es atender al daño y dolor ocasionado a las víctimas de abusos sexuales perpetrados por jesuitas, [la Compañía] ha instruido que una comisión, liderada por la actual Delegada de Ambientes Sanos y Seguros, profesional laica y psicóloga, inicie de inmediato la labor de contactar a las víctimas del caso [Luis María] Roma, y otros más denunciados, para establecer con ellas la mejor forma de atención a su situación particular”, indica el comunicado.

Wilder Flores, presidente de la Comunidad Boliviana de Sobrevivientes de Abuso Sexual Eclesial (CBS), dijo en entrevista con la televisora estatal Bolivia TV que lo ocurrido fue producto de “una estructura institucional que permitió un abuso sistemático por décadas”.

“[El abuso] fue sistemático, durante muchos años, con conocimiento pleno de sus superiores y contra una población plenamente vulnerable”, añadió.

“La Compañía de Jesús nunca atendió a las víctimas, las víctimas nunca fuimos parte de su preocupación, ellos atendieron a los pederastas, les dieron apoyo psicológico, apoyo psiquiátrico”, señaló.

Flores aseguró que la investigación interna de la Compañía de Jesús “suplanta las funciones del Ministerio Público” y revictimiza a quienes sufrieron estos crímenes.

CNN ha intentado contactar telefónicamente a la Compañía de Jesús en Bolivia para conocer su reacción, así como a la Fiscalía para averiguar más detalles sobre la investigación, y está a la espera de respuesta.