(CNN) – El expresidente Donald Trump expresó este viernes su apoyo a la exhibición de los Diez Mandamientos en las escuelas, después de que el gobernador republicano de Louisiana firmara una nueva legislación que exige que las escuelas públicas del estado los exhiban en todas las aulas.
“ME ENCANTAN LOS DIEZ MANDAMIENTOS EN LAS ESCUELAS PÚBLICAS, ESCUELAS PRIVADAS Y MUCHOS OTROS LUGARES. LÉANLO: ¿CÓMO PODEMOS, COMO NACIÓN, ESTAR EQUIVOCADOS???”, escribió Trump en su sitio de redes sociales Truth Social.
El expresidente añadió: “ESTE PUEDE SER, DE HECHO, EL PRIMER PASO IMPORTANTE EN EL REVIVIR DE LA RELIGIÓN, COSA QUE SE NECESITA DESESPERADAMENTE EN NUESTRO PAÍS. ¡¡¡TRAIGAN DE VUELTA TTC!!! MAGA2024”.
Trump ha cortejado a los votantes religiosos de cara a las elecciones de noviembre, y las publicaciones de este viernes llegan un día antes de su discurso ante una reunión de votantes cristianos conservadores en la ciudad de Washington.
En qué consiste la controvertida ley
El Proyecto de Ley 71 de la Cámara de Representantes, aprobado por los legisladores estatales el mes pasado y firmada por el gobernador Jeff Landry el miércoles, exige que en todas las aulas de las escuelas que reciben financiación estatal, desde el jardín de infantes hasta el nivel universitario, se coloque un cartel de los Diez Mandamientos con “fuentes grandes y fácilmente legibles”. Esto convierte a Luisiana en el primer estado en tomar una medida de este tipo.
La legislación especifica el lenguaje exacto que debe imprimirse en los carteles para las aulas y establece que el texto de los Diez Mandamientos debe ser el foco central del cartel o documento enmarcado.
Antes de firmar el proyecto de ley, Landry lo definió como “uno de (mis) favoritos”.
“Si respetas el estado de derecho, debes comenzar con la ley original, que fue Moisés… Él recibió sus mandamientos de Dios”, dijo el gobernador.
Los grupos que abogan por las libertades civiles han prometido impugnar la ley, argumentando que es inconstitucional y que viola un precedente de larga data de la Corte Suprema. Quienes se oponen al mandato señalan una cláusula constitutiva de la Constitución de Estados Unidos que dice que el Congreso no puede “promulgar ninguna ley respecto del establecimiento de una religión”.
La Unión Estadounidense de Libertades Civiles, la Unión Estadounidense de Libertades Civiles de Luisiana, Estadounidenses Unidos por la Separación de la Iglesia y el Estado y la Fundación Libertad de Religión han dicho que planean presentar una demanda para impugnar la nueva ley, ya que la misma supone una “coerción religiosa inconstitucional de los estudiantes”.
“La Primera Enmienda promete que todos podremos decidir por nosotros mismos qué creencias religiosas, si hay alguna, mantenemos y practicamos, sin presión del gobierno. Los políticos no tienen por qué imponer su doctrina religiosa a los estudiantes y familias en las escuelas públicas”, dijeron los grupos en una declaración conjunta.
Los partidarios del mandato, por su parte, citan la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de 2022 que le devolvió el trabajo a un entrenador de fútbol de una escuela secundaria después de que recibiera una sanción disciplinaria por una controversia relacionada con orar en el campo. El fallo en Kennedy v. Distrito Escolar de Bremerton stableció que las oraciones del entrenador equivalían a un discurso privado, el cual está protegido por la Primera Enmienda, y no pueden ser restringidas por el distrito escolar, y que esencialmente rebajaba el listón entre Iglesia y Estado. Los expertos legales en ese momento predijeron que la decisión conduciría a mayores expresiones religiosas en los espacios públicos.
La representante del estado de Luisiana, Dodie Horton, autora republicana del proyecto de ley, dijo en el momento de la firma que “es como si la esperanza estuviera en el aire en todas partes”. Horton desestimó las preocupaciones de los opositores demócratas a la medida, diciendo que los Diez Mandamientos tienen sus raíces en la historia legal y que su proyecto de ley busca colocar un “código moral” en las aulas.
Stephanie Gallman y Dianne Gallagher de CNN contribuyeron a este informe.