(CNN) – Altos funcionarios estadounidenses aseguraron a una delegación de altos funcionarios israelíes de visita en Washington esta semana que si estallara una guerra total en la frontera norte de Israel entre Israel y Hezbollah, la administración Biden está totalmente preparada para respaldar a su aliado, según un alto funcionario de la administración.
Las garantías en persona se produjeron en un momento en que el aumento de los ataques transfronterizos en las últimas semanas entre Israel y el grupo Hezbollah, respaldado por Irán, ha intensificado la preocupación por el posible estallido de otro conflicto en toda regla en Oriente Próximo.
También en un momento en que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha acusado públicamente a Estados Unidos de retener armas y municiones de su país, lo que provocó un tenso tira y afloja entre funcionarios israelíes y estadounidenses.
Altos cargos israelíes como el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, y el asesor de seguridad nacional, Tzachi Hanegbi, participaron esta semana en Washington en una serie de reuniones con funcionarios de la administración Biden como el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, el secretario de Estado, Antony Blinken, y el coordinador de asuntos de Oriente Próximo de la Casa Blanca, Brett McGurk. Discutieron una amplia gama de temas, incluida la situación en la frontera norte de Israel, Irán y el alto el fuego y las negociaciones sobre los rehenes, dijeron las fuentes.
Al tratar la cuestión de las provocaciones de Hezbollah, los funcionarios estadounidenses dejaron claro esta semana que el gobierno de Biden ofrecería a Israel la ayuda en materia de seguridad que necesite, dijo el alto funcionario de la administración, aunque Estados Unidos no desplegaría tropas estadounidenses sobre el terreno en tal escenario.
Desde el ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre, las provocaciones de Hezbollah contra Israel han continuado, y se han intensificado en las últimas semanas. El gobierno de Biden declaró en repetidas ocasiones que no desea que estalle otra guerra en el frente norte de Israel, e insta a una desescalada diplomática. Esta semana, el enviado estadounidense Amos Hochstein fue enviado a la región para tratar de ayudar a desescalar el conflicto.
Sin embargo, los ataques de Hezbollah a través de la frontera con Israel continúan a falta de un alto el fuego en la guerra entre Israel y Hamas, por lo que las autoridades estadounidenses están en alerta máxima ante la posibilidad de que estalle un conflicto en toda regla en la región. Si Hezbollah ampliara significativamente la escala de sus ataques contra Israel, provocando la muerte de israelíes, los funcionarios estadounidenses esperan que Israel responda con toda su fuerza.
Como informó CNN, los funcionarios estadounidenses temen que en caso de una guerra total entre Israel y Hezbollah, el grupo combativo respaldado por Irán podría superar las defensas aéreas de Israel en el norte, incluido el tan afamado sistema de defensa antiaérea, la Cúpula de Hierro. Esa realidad haría aún más crítico el pleno apoyo de Estados Unidos a Israel.
En las reuniones de esta semana, funcionarios estadounidenses e israelíes debatieron posibles “vías de salida” para tratar de rebajar la temperatura a lo largo de la llamada Línea Azul que separa Líbano de Israel, dijo un alto funcionario de la administración. En esas conversaciones se habló de las formas de devolver a sus hogares a los israelíes y libaneses desplazados de la frontera, dijeron.