(CNN Español) – Este miércoles comenzó en Argentina el juicio oral por el intento de homicidio contra la expresidenta Cristian Fernández de Kirchner. Hace casi dos años, el jueves 1 de septiembre de 2022, un hombre se acercó a la entonces vicepresidenta mientras saludaba a sus simpatizantes en la puerta su domicilio, en el barrio de Recoleta de la Ciudad de Buenos Aires, le apuntó con un arma a 15 centímetros de su cara y apretó el gatillo. La bala no salió.
El hombre fue detenido esa noche y luego identificado por la Policía Federal como Fernando Sabag Montiel. Nació el 13 de enero de 1987 en el estado de Sao Paulo, Brasil, y reside en Argentina desde 1993, según informaron fuentes de la Dirección de Migraciones del país. Sabag Montiel tenía permiso para portar armas, según informó la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac). Había sido detenido previamente en 2021 por “uso de arma impropia”, por portar un cuchicho de gran tamaño, informaron en aquel momento a CNN fuentes policiales.
“La quise matar, básicamente, por la situación del país. El arma estaba cargada, tiré el gatillo y el tiro no salió. Tenía 5 balas el arma”, dijo Sabag Montiel en una entrevista que le brindó al periodista Ariel Zak del canal de noticias C5N en junio de 2023, hablando desde la cárcel donde cumple prisión preventiva.
Días después, Fernández de Kirchner aseguró que en ese momento no tomó conciencia del intento de asesinato. En los videos del hecho se ve a la entonces vicepresidenta agachándose y a sus guardias de seguridad conteniéndola, en medio de una multitud que apunta inmediatamente contra el atacante.
Conforme avanzó la investigación, fue detenida también Brenda Uliarte, de 23 años, novia de Fernando Sabag Montiel, quien se declaró inocente. En la misma entrevista que brindó desde la cárcel, el primer acusado se refirió a la detención de su compañera: “Yo lo hice por motus propio. Están inventando una historia. Yo actué solo. Con respecto al atentado, tengo las pruebas de que Brenda Uliarte no tuvo nada que ver”.
El fallido atentado se produjo tras varios días de manifestaciones en apoyo a la exvicepresidenta, después de que el fiscal Diego Luciani pidiera 12 años de prisión en su contra y su inhabilitación para ejercer cargos públicos. A Cristina Kirchner se la acusaba de haber encabezado una asociación ilícita para defraudar al Estado cuando era presidenta, a partir de una supuesta redirección de contratos millonarios de obras viales en la provincia argentina de Santa Cruz, conocida judicial y mediáticamente como “Causa Vialidad”.
Por esta causa, a Fernández de Kirchner la declararon culpable de administración fraudulenta y perjuicio a la administración pública el 6 de diciembre de 2022, con una condena a seis años de prisión. Sin embargo, como la sentencia aún no está firme, la exvicepresidenta sigue en libertad.
Tras la detención de Sabag Montiel, la agencia estatal de noticias Télam informó con base en fuentes oficiales que, en un primer momento, el teléfono móvil que usaba el acusado fue reiniciado cuando los peritos intentaban extraer pruebas del mismo. Esto entorpeció los primeros pasos en la investigación a cargo de María Eugenia Capuchetti, ya que se tardó más de un mes en poder obtener la información del celular. CNN aún no ha podido confirmar de manera independiente lo sucedido con el teléfono móvil de Sabag Montiel.
El 12 de junio de 2023 la causa fue elevada a juicio oral con tres acusados: Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte señalados de ser “coautores de tentativa de homicidio doblemente calificado por alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de armas de fuego”, tal como reza la acusación formal, y Nicolás Carrizo, un tercer detenido, señalado como partícipe secundario.
Por su parte, la exvicepresidenta exigió que se investigue la supuesta autoría intelectual que motorizó este fallido atentado. Un abogado de Fernández de Kirchner, José Manuel Ubeira, dijo a Radio Continental: “Claramente tenemos un juicio contra la persona que tuvo la responsabilidad que se vio en televisión, o sea, el atacante, y las personas que lo rodeaban; pero todavía tenemos en una nebulosa qué es lo que lo motivó y quién lo financió”.
Tal como declaró en una entrevista con el medio argentino El Destape el otro abogado de Cristina Fernández de Kirchner, Marcos Aldazábal, “la exvicepresidenta tiene que declarar como testigo”. Por otro lado, el letrado también destacó que será un juicio que durará “entre medio año y un año, aproximadamente”.