(CNN) – El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, realizó su primera visita a Kyiv desde que comenzó la guerra a gran escala e instó al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, a considerar un “alto el fuego” con el objetivo de “acelerar las conversaciones de paz” con Moscú.
Junto a Zelensky, el aliado del presidente de Rusia Vladimir Putin y crítico del apoyo europeo a Ucrania, dijo: “Le pedí al presidente que pensara si podríamos revertir el orden para acelerar las conversaciones de paz, logrando primero un alto el fuego”.
Orban continuó: “Un alto el fuego vinculado a una fecha límite daría la oportunidad de acelerar las conversaciones de paz. Exploré esta posibilidad con el presidente y estoy agradecido por sus respuestas honestas y su (predisposición a la) negociación”.
Desde que el ejército ruso cruzó la frontera en 2022, el líder húngaro ha promocionado la idea de poner fin a la guerra con un alto el fuego en lugar de apoyo militar a Ucrania.
Sin embargo, Zelensky y muchos de los aliados más cercanos de Ucrania han descartado cualquier conversación que requiera que Kyiv sacrifique territorio que ha sido tomado por la fuerza, y agregaron que no se puede confiar en que Putin cumpla con ningún acuerdo.
Orban también manifestó su deseo de mejorar las relaciones entre Budapest y Kyiv, que se han visto tensadas por la estrecha relación del líder húngaro con Putin.
“Nos gustaría mejorar la relación entre los dos países”, dijo Orban. “Nos gustaría llegar a un acuerdo bilateral amplio con Ucrania, similar a los que ya hicimos con nuestros vecinos (en el pasado). Estaríamos felices de participar en la modernización de la economía ucraniana, nos gustaría tener un marco ordenado para ello”.
El autoritario líder húngaro ha intentado periódicamente bloquear las iniciativas de la Unión Europea que buscaban dar más apoyo militar y financiero a Kyiv durante el conflicto.
La estrecha relación del primer ministro húngaro con Putin ha sido objeto de escrutinio con frecuencia. Su vínculo se sustenta tanto en la cooperación económica como en algunos valores compartidos.
Ambos líderes también han promulgado políticas anti-LGBTQ y han tomado medidas drásticas contra la libertad de expresión en sus países. Hungría ha apoyado a Rusia en las Naciones Unidas y rechazó las sanciones de la Unión Europea tras la agresión de Putin en Ucrania ya en 2014, después de que Rusia se anexara ilegalmente Crimea.
La reunión de este martes se produce cuando Orban y Hungría toman el control de la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, que cambia cada seis meses. Durante cada período de seis meses, el país que controla la presidencia no asume el control de la agenda general de la UE, pero sí tiene una plataforma a través de la cual pueden insistir en sus propias prioridades.
En el sitio web del Consejo de la UE, se compara la presidencia “con alguien que organiza una cena, asegurándose de que todos sus invitados se reúnan en armonía”, y agrega que para “garantizar la efectividad, la presidencia actúa como un ‘intermediario honesto’, superándo su propio interés nacional”.
Orban tomó el control de la presidencia el lunes con un llamado a “Hacer que Europa vuelva a ser grande”, una referencia al eslogan político de Donald Trump que alarma a muchos de sus homólogos europeos que se preparan para el posible regreso del expresidente estadounidense a la Casa Blanca, preocupados sobre qué significará eso para la UE.
Para julio están previstas otras reuniones diplomáticas europeas clave. La OTAN celebrará los 75 años de la alianza en la ciudad de Washington, entre el 9 y el 11 de julio. Se espera que la agenda de ese evento esté dominada por planes a largo plazo de apoyo a Ucrania y conversaciones sobre su eventual adhesión a la alianza.
La Comunidad Política Europea (CPE), un foro en el que 47 países europeos, dentro y fuera de la UE, discutirán los desafíos estratégicos del continente, también se reunirá el 18 de julio en el Reino Unido. Ucrania y Hungría son ambos miembros del CPE.
Se espera que Ucrania domine esa agenda y que Zelensky pueda asistir personalmente a la reunión. Es posible que Orban haya tenido esto en mente al programar este viaje a Kyiv, asegurándose de que su primera reunión con el presidente de Ucrania desde el comienzo de la guerra no fuera en un entorno diplomático tan público y de alto riesgo.
Esta historia ha sido actualizada con información adicional.
Amy Cassidy y Niamh Kennedy de CNN contribuyeron con el reportaje.