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“No, Riley. Espérate a…”: los memes que originó “Inside Out 2”
01:38 - Fuente: CNN

(CNN) – Después de una serie de películas inundadas de romance en medio del programa espacial como “Figuras ocultas” y “First Man”, “Fly Me to the Moon” utiliza inteligentemente la misión Apolo 11 como telón de fondo de un romance a la antigua usanza. Sin mucho peso en la parte cómica de la ecuación, la película funciona en gran medida como vehículo para Scarlett Johansson y Channing Tatum, incluso sin lograr por completo el aterrizaje.

Johansson interpreta a una especialista en marketing corporativo, lo que resulta irónico si se tiene en cuenta que su campaña de marketing no es todo lo clara que podría o debería ser en cuanto a lo que se espera de ella.

Scarlett Johansson y Channing Tatum en el romance de carrera espacial "Fly Me to the Moon". (Foto: Dan McFadden/Sony Pictures).

Aunque la historia incluye una subtrama sobre el montaje de una versión falsa de la llegada a la Luna —orquestada como plan de apoyo por un oscuro agente del Gobierno (Woody Harrelson, de nuevo como uno de los hombres del presidente, repitiendo su papel en “Fontaneros de la Casa Blanca”) vinculado al Gobierno de Nixon— el corazón de la película reside en la química entre los protagonistas. Como es habitual, se sienten atraídos el uno por el otro, lo que hace necesario levantar barreras para mantenerlos separados.

En ese sentido, no se trata tanto de teorías conspirativas y realidad —aunque definitivamente hay algo de eso en ella— como de la tensión entre el director de lanzamientos de la NASA, Cole Davis (Tatum), y la Kelly Jones de Johansson, quien es reclutada para “vender la Luna” a un público escéptico, aprovechando su habilidad para tergiversar la verdad con el fin de cerrar tratos.

Scarlett Johansson interpreta a una experta en marketing reclutada por la NASA en "Fly Me to the Moon". Dan McFadden/Sony Pictures.

Casi exactamente 55 años después de que Neil Armstrong diera aquel “gran salto” a la superficie lunar, el director Greg Berlanti y la guionista Rose Gilroy introducen un toque de cinismo muy adecuado para el momento actual, y lo yuxtaponen al espíritu de superación del programa Apolo.

La combinación resulta muy atractiva para el público, aunque las multitudes puedan durar poco, ya que las perspectivas de la película en los cines (antes de la fecha de lanzamiento en Apple TV+) equivalen a servir de contrapeso a las taquilleras secuelas de “Twisters” y “Deadpool” que pronto estarán en los cines.

Berlanti, un prolífico productor de televisión, se ha inclinado hacia el romance con sus incursiones en el cine, como en “Love, Simon” y “Life as We Know It”. “Fly Me to the Moon” da un paso más allá en sus ambiciones y poderío estelar, y no hace daño que sus protagonistas tengan un aspecto bastante celestial, mientras se bañan en los trajes y la música de la época.

Después de una serie de papeles eclécticos, Johansson encara una película que podría haber sido protagonizada por alguien como Faye Dunaway durante la época en la que está ambientada (piensa en “Network”), mientras que aunque Tatum hace un mejor papel que sus más recientes comedias románticas —la tercera “Magic Mike” y “La ciudad perdida”—, es cierto que la vara no está tan alta.

Ante todo, “Fly Me to the Moon” posee virtudes atractivas conscientemente tomadas del pasado y adornadas con elementos modernos. Queda por ver si eso “venderá la luna” al público cinéfilo, pero, tomando prestada la canción con la que comparte título, la propuesta no es mucho más complicada que una invitación a jugar entre las estrellas.

“Fly Me to the Moon” se estrena el 12 de julio en los cines estadounidenses. Está clasificada PG-13. (Revelación: la esposa de Lowry trabaja para una división de Apple).