(CNN Español) – El 18 de abril de 2022 la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) informó la desvinculación de Reinaldo Rueda al cargo de director técnico de la Selección Colombia masculina de mayores. Ocurrió después de que Colombia cayera eliminada en semifinales de la Copa América de 2021 por penales ante Argentina y luego de que no lograra clasificar al mundial de Qatar.
En junio de ese año la FCF anunció que el cargo durante los próximos cuatro años lo asumiría Néstor Gabriel Lorenzo, con el objetivo puesto en la Copa Mundial de la FIFA de 2026 y todo lo que se atraviese en el medio.
Lorenzo dejaría entonces la dirección técnica del Club Melgar de Perú para vincularse del todo con el fútbol colombiano. No obstante, para Lorenzo Colombia no era ninguna desconocida ya que fue el asistente técnico de José Néstor Pékerman durante los dos ciclos que llevaron al país a disputar los mundiales de Brasil 2014 y Rusia 2018.
De hecho, gran parte de su trayectoria la hizo junto con Pékerman. Este es el historial de Néstor Lorenzo en el banquillo:
- Selección de Argentina: fue segundo entrenador del equipo que Pékerman dirigió durante el Mundial de Alemania 2006 (el primero que jugó Lionel Messi).
- Deportivo Toluca: asistente técnico en el equipo mexicano entre 2007 y 2008.
- Tigres de la UANL: asistente técnico en 2009
- Selección Colombia: asistente técnico de la selección masculina de mayores entre 2012 y 2019
- FBC Melgar: entrenador en el equipo peruano entre 2021 y 2022.
La relación de Lorenzo con el fútbol, sin embargo, data de mucho antes. Tuvo una larga trayectoria como jugador en varios clubes y disputó con la albiceleste el Mundial de 1990, equipo que salió subcampeón bajo la dirección de Carlos Bilardo.
Así fue la trayectoria de Lorenzo como jugador, según Transfermarkt:
- Argentinos Juniors (Argentina, temporada 89/90)
- S.C. Bari (Italia, temporada 90/91)
- Swindon Town (temporada 92/93)
- San Lorenzo (Argentina, temporada 94/95)
- Ferro (Argentina, temporada 96/97)
- Boca Juniors (1997)
- Banfield (1998)
Vistiendo la camiseta de la Selección de Argentina Néstor Lorenzo enfrentó a la Selección Colombia solo una vez, en un partido amistoso jugado en el estadio El Campín de Bogotá el 9 de marzo de 1989: Colombia ganó 1-0 con gol de Arnoldo Iguarán a los 15 minutos. Era la Colombia de René Higuita, Andrés Escobar, Luis Carlos Perea, Wilson Pérez, Leonel Álvarez, Bernardo Redín, el “Pibe” Valderrama.
Era la Colombia de Francisco Maturana, técnico al que muchos años después Néstor Lorenzo dedicaría un breve elogio después de que su Colombia eliminara a Uruguay en la semifinal de la Copa América de 2024.
Un ligero paréntesis: Néstor Lorenzo no ha perdido ningún partido desde que asumió el cargo de entrenador de Colombia. Antes de disputar la final de final de la Copa América 2024, el equipo llegó a una racha de 28 partidos sin perder (25 bajo el mando de Lorenzo). Se trata de un récord que la selección —ahora con Lorenzo al frente— consigue, superando el invicto de Maturana, que en los noventa llegó a 27 partidos sin perder.
Entonces, no es descabellado decir que a Lorenzo le ha ido bien con el conjunto cafetero. Tras seis partidos disputados, Colombia es tercera en la tabla de las eliminatorias y disputará contra Argentina la final de la Copa América el 14 de julio.
Tras la semifinal en la que Colombia eliminó al seleccionado uruguayo que dirige Marcelo Bielsa, el asunto del invicto volvió a tocar la puerta del entrenador durante la conferencia de prensa.
Preguntado sobre la estadística en la que superó a Maturana (técnico que ganó con Colombia la Copa América de 2001), Lorenzo hizo énfasis en que no es algo para simplemente dejar atrás. “No, ‘Pacho’ [Maturana] con ‘Bolillo’ [Hernán Darío Gómez] con todo su grupo y su grupo de jugadores dejaron un legado muy importante que es la base de todo lo que fue viniendo después, del fútbol colombiano. Así que no es dejar atrás ni superar, esto es sumar; sumar para que el fútbol colombiano crezca y esté lo más alto posible”, dijo Lorenzo.
En el ensayo Ventajas estéticas de la derrota, el mexicano Juan Villoro captó una instantánea de aquel equipo de Maturana que sumó tantos partidos sin perder:
“La selección colombiana de 1990 y 1994 jugó como si tuviera permiso para perder (…) los colombianos corrían con un sentido total de apropiación del juego. Eran dueños del marcador, aunque les resultara adverso. Nadie les ganaba nunca porque ellos mismos administraban sus caídas. Contra la meritocracia y las vulgares costumbres de los vencedores, la gran Colombia que duró cuatro años mostró que el resultado es una opinión subjetiva. Maestros del extravío, pusieron en escena las virtudes que sólo son posibles sin rebajarse a tener éxito”.
Néstor Lorenzo, nacido en Buenos Aires hace 58 años, apela a una ruptura de eso. Afirmó el día de su presentación como nuevo técnico de Colombia que “el recambio generacional fracasa cuando no hay resultados”.
De alzarse con la Copa América en Miami el próximo domingo, es posible que la ruptura no sea total: Colombia, como antes, cuenta con un virtuoso que brilla más que los demás, Colombia, como antes, agrega juego al juego. Pero en esta ocasión se trata posiblemente de la victoria más significativa en la historia del fútbol colombiano.
Derrotar a la Argentina defensora del título de Copa América, a la Argentina campeona del mundo, derrotar a la Argentina de Messi ofrece una posibilidad de quiebre. Hay un antes y un después de eso. Néstor Lorenzo anhela un recambio generacional: el de una selección que juega para ganar –y lo hace–.