(CNN) – Las agencias de la Organización de las Naciones Unidas informaron que una nueva ronda de órdenes de evacuación por parte del ejército de Israel en Gaza provocó las mayores olas de desplazamientos desde octubre, lo que dificulta aún más que antes la entrega de raciones de emergencia.
“Muchos puntos de distribución han tenido que cerrar. Solo unas pocas panaderías siguen operativas. Necesitamos urgentemente mayores entregas de alimentos y una mayor capacidad para entregar comidas calientes”, dijo este jueves el Programa Mundial de Alimentos (PMA) en una publicación en X.
Una serie de órdenes de evacuación emitidas por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) a finales de junio y principios de este mes aumentaron el número de personas desplazadas en Gaza de 1,7 millones a 1,9 millones, de acuerdo con una evaluación de la ONU.
El PMA asegura que proporcionó asistencia alimentaria a más de 600.000 personas en Gaza este mes, y a más de 500.000 personas les dio paquetes de alimentos y harina de trigo. El PMA dijo que, al 14 de julio, 11 de las 18 panaderías que sustenta seguían operativas en Gaza, y brindaban apoyo a miles de familias cada día: siete están en Deir al Balah, dos en la Ciudad de Gaza y dos en el norte de Gaza.
Pero informó haber tenido que reducir aún más las raciones en el centro y sur de Gaza para garantizar una cobertura más amplia para las personas que han sido recientemente desplazadas.
“El PMA aún necesita entregar más combustible a las panaderías y otros servicios, para poder brindar apoyo de emergencia a las familias desplazadas”, dijo. “Los productos básicos están disponibles en los mercados del sur y centro de Gaza, pero son inaccesibles para muchas personas; la escasez de bienes comerciales significa que los alimentos se venden a precios astronómicos”.
En lo que va de julio, el PMA afirma que envió más de 1.000 camiones que transportan al menos 7.600 toneladas métricas de alimentos y artículos no alimentarios a Gaza a través de tres cruces.
Este miércoles, la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) informó que el ejército de Israel había impedido que todas las misiones de ayuda se dirigieran al norte de Wadi Gaza hacia el centro de Gaza. Decía: “Esto significa que los trabajadores humanitarios no pudieron llegar a ninguno de los cientos de miles de personas necesitadas. También les hizo imposible recoger suministros desde el punto de entrada norte de Erez Occidental”.
La agencia israelí encargada de coordinar el movimiento de convoyes de ayuda en Gaza, COGAT, le dijo a CNN este jueves que no tenía conocimiento de ninguna interrupción del movimiento de convoyes desde el sur de Gaza hacia zonas del norte a través de Wadi Gaza, como han informado agencias de la ONU.
La OCHA dijo que algunos civiles que habían intentado cruzar desde el centro de Gaza hacia Deir al Balah, más al sur, alegaron que las tropas israelíes les habían disparado.
“Algunos de los recién llegados les dijeron a los trabajadores humanitarios que las tropas israelíes habían disparado contra las personas que intentaban cruzar, lo que obligó a algunos de ellos a pegar la vuelta”, dijo OCHA.
El sector de la salud sigue sometido a una gran tensión. Según la Organización Mundial de la Salud, 15 de los 36 hospitales de Gaza funcionan parcialmente y sólo 1.500 de las 3.500 camas en Gaza están disponibles, 600 de ellas ubicadas en hospitales de campaña.
Tanto la Cruz Roja Internacional como el Ministerio de Salud de Gaza subrayaron este jueves los desafíos que enfrenta la prestación de atención médica.
“El sistema de ambulancias y emergencias ya no puede responder a todas las llamadas y misiones para transportar a los heridos y lesionados”, dijo el Ministerio de Salud debido a la falta de ambulancias, el arresto de paramédicos por parte de las FDI y la falta de gasolina.
El Ministerio de Salud dijo que la atención primaria de salud se vio afectada por la escasez de alrededor del 60% de los medicamentos básicos, así como por los daños a muchos centros de salud, especialmente en Khan Younis, en el sur.
Dijo que las enfermedades infecciosas seguían propagándose y habían afectado a unos 1,7 millones de personas, y había escasez de unidades de sangre.
Uno de los hospitales de campaña bajo presión es administrado por el Comité Internacional de la Cruz Roja en Rafah (CICR), que está al límite de su capacidad después de “repetidas bajas a gran escala”. Uno de ellos fue el ataque del sábado en Al-Mawasi, en el que 26 personas heridas, entre ellos niños con heridas de metralla, fueron ingresadas para recibir tratamiento”, dijo el CICR este jueves.
Según William Schomburg, funcionario del CICR, “las necesidades actuales de la población civil superan ampliamente la limitada disponibilidad de suministros y la capacidad de atención en general”.
“El número de pacientes que tuvieron que ser reanimados después de la gran afluencia de heridos del sábado es inconcebible”, afirmó el doctor Pankaj Jhaldiyal, del CICR.