Venezuelan President and presidential candidate Nicolas Maduro speaks during a campaign rally in Caracas on July 16, 2024. Venezuela will hold presidential elections on July 28. (Photo by Federico PARRA / AFP) (Photo by FEDERICO PARRA/AFP via Getty Images)
“Baño de sangre” y “guerra civil”, las advertencias de Maduro si pierde la elección
02:32 - Fuente: CNN

(CNN Español) – Venezuela elegirá a un nuevo presidente el 28 de julio entre diez candidatos, aunque, según las encuestas, hay dos aspirantes claramente despegados del resto: el presidente Nicolás Maduro y el abanderado de la oposición mayoritaria, Edmundo González Urrutia.

Maduro va por su tercer mandato y también por tercera ocasión la oposición buscará derrotarlo, después de los intentos fallidos de 2013 y 2018.

En 2013, varios candidatos se presentaron para las elecciones: Eusebio Méndez, María Bolívar, Reina Sequera y Julio Mora. Pero quien estuvo muy cerca de lograr la presidencia de Venezuela fue el entonces gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles.

Nicolás Maduro contra Henrique Capriles

Capriles había sido electo en 2008 como gobernador del estado Miranda, uno de los más poblados del país, y reelegido en 2012. Previamente, en 2000 había sido alcalde de Baruta, uno de los cinco municipios de Caracas, y fue reelegido en 2004.

En 1998, a los 26 años, se convirtió en diputado al Congreso de la República para el período 1999-2004. Luego, en 1999, fue escogido como presidente de la Cámara de Diputados. Fue el político más joven en ocupar el cargo.

El abogado y político de 51 años, nacido en Caracas, había sido contrincante de Hugo Chávez en las elecciones presidenciales de 2012 y perdió por poco más de diez puntos.

Cuando el jefe de Estado falleció meses después y se convocó a un nuevo proceso electoral, Capriles, como candidato de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se enfrentó al entonces vicepresidente del país y sucesor político de Chávez.

La elección estaba polarizada y ninguno de los otros cuatro candidatos llegó a los 20.000 votos. Méndez obtuvo el 0,13%, Bolívar el 0,08%, Sequera el 0,02% y Mora apenas el 0,01%.

Con una participación electoral cercana al 80% —la segunda más alta de los últimos 30 años—, Capriles sumó el 49,12% de los votos, mientras que Maduro se consagró ganador de las elecciones con el 50,61%. La diferencia entre ambos fue de 223.599 votos.

Las tensiones por los ajustados números aumentaron. Tanto Capriles como sus partidarios, poniendo en duda los resultados, reclamaron un conteo manual de votos la madrugada en la que se anunciaron los resultados. Capriles dijo ante sus seguidores que no reconocería el resultado “hasta tanto no se cuente cada voto”.

El CNE, por su parte, sostuvo que los resultados eran “irreversibles”. Cinco días después, el 19 de abril, Maduro juró ante la Asamblea Nacional para ejercer su mandato hasta 2019.

El reclamo de Capriles se ventiló en instancias internacionales. En mayo de 2022, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos concluyo que en Venezuela se “vulneró el derecho” del candidato presidencial de participar “en condiciones de igualdad” durante las presidenciales de aquel año, y recomendó al Estado venezolano “reparar integralmente las violaciones a los derechos humanos” de Capriles.

En abril de 2017, la Contraloría General inhabilitó a Capriles por 15 años para ejercer cargos públicos. La resolución argumentaba presuntas “irregularidades administrativas ocurridas durante los ejercicios fiscales 2011, 2012 y primer trimestre del 2013”, durante su gestión como gobernador del estado Miranda.

En múltiples oportunidades, Capriles ha rechazado las acusaciones en su contra y ha calificado de ilegal e inconstitucional la decisión de la Contraloría.

Nicolás Maduro contra Henri Falcón

En enero de 2018, Maduro anunció que aspiraba a la reelección presidencial.

“La clase obrera me obligó a asumir esta responsabilidad que la hago con amor. Juro ante ustedes ser candidato presidencial y llevarlos a la victoria de las elecciones presidenciales de este año. Acepto la candidatura presidencial y juro que no les voy a fallar, seré el presidente de los obreros”, dijo.

En proceso electoral participaron, además de Maduro, Javier Bertucci, Reinaldo Quijada y Henri Falcón. De ellos, Falcón fue quien más se acercó -aunque quedó lejos por un amplio margen- a las posibilidades de ejercer la presidencia de Venezuela.

La Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la principal coalición opositora, decidió no participar en el proceso por considerar que el Gobierno venezolano no ofrecía garantías de transparencia e imparcialidad y hubo acusaciones de líderes en la región de que el proceso electoral en Venezuela carecía de legitimidad.

En enero de 2018, la plataforma había quedado fuera del proceso de legitimación de partidos impulsada por el Consejo Nacional Electoral. Una decisión del Tribunal Supremo de Justicia determinó que la MUD, que es una alianza de partidos políticos, contravenía la prohibición de la doble militancia.

Falcón, exgobernador del estado de Lara y de los miembros fundadores del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), el Movimiento V República (MVR) y el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), fue el principal opositor de Maduro en las elecciones de 2018.

Falcón fue alguna vez simpatizante de Chávez. En 2010, rompió con el partido en el poder y luego fue crítico del Gobierno. Por ese entonces consideraba que la salida de la crisis financiera de Venezuela era la dolarización del país, entre otras medias.

En los comicios de 2018, la participación electoral fue del 46%, y con el 67,82% de los votos Maduro doblegó a Falcón, quien llegó al 20,93%. Por su parte, Bertucci obtuvo el 10,82% y Quijada el 0,39%.

En su discurso de victoria, Maduro bromeó sobre su opositor y lo llamó “Henri Falzón”. “Nunca antes se había sacado 47% de ventaja al segundo candidato. ¡Nocaut, quedó groggy!”, dijo desde el Palacio de Miraflores.

Ese domingo, Falcón dijo que no reconocería los resultados y habló de violaciones a la ley electoral de Venezuela. “En tales circunstancias, tenemos preguntas serias de nuestra parte, y además del cuestionamiento que podamos tener sobre el proceso, sin dudas carece de legitimidad y, en este sentido, no reconocemos este proceso electoral”, dijo.

La oposición y muchos países de la comunidad internacional desconocieron el triunfo.

El 10 de enero de 2019, el presidente venezolano comenzó otros seis años en el poder, mandato que concluirá el 10 de enero de 2025.

Maduro va por un tercer mandato presidencial

En un contexto de deterioro de las condiciones de vida en Venezuela, con más de 7 millones de ciudadanos que dejaron el país, según cifras de la ONU, Maduro quiere seguir en el poder y advirtió qué pasaría si no logra un nuevo triunfo electoral.

“El destino de Venezuela, en el siglo XXI, depende de nuestra victoria el 28 de julio. Si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida, producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito. La más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo”, dijo.

En los primeros 10 días de campaña electoral, se practicaron 71 “detenciones arbitrarias”, según un informe publicado el lunes por Laboratorio de Paz, una organización no gubernamental defensora de los derechos humanos.

Entre el 4 y el 14 de julio, según el reporte, 48 de las personas han sido detenidas luego de haber prestado algún tipo de servicio al comando de campaña Con Venezuela del candidato González Urrutia, quien ha sido respaldado en sus recorridos por la líder opositora María Corina Machado.

Con información de Gonzalo Zegarra, Osmary Hernández, Mariano Castillo, Marilia Brocchetto.