(CNN) – El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo que la decisión de Estados Unidos y Alemania de desplegar misiles estadounidenses de largo alcance en Alemania a partir de 2026 “recuerda los acontecimientos de la Guerra Fría” y podría causar que Rusia ubique misiles similares en respuesta.
“Si Estados Unidos implementa tales planes, nos consideraremos libres de la moratoria unilateral sobre el despliegue de armas de ataque de mediano y corto alcance, incluido el aumento de las capacidades de las fuerzas costeras de nuestra Armada”, dijo Putin cuando habló en el Día Anual de la Armada de Rusia en San Petersburgo.
Putin dijo que la decisión de Estados Unidos y Alemania de iniciar “despliegues episódicos” de las capacidades de misiles de largo alcance de su Fuerza de Tarea Multidominio en Alemania a partir de 2026 pondría la infraestructura rusa al alcance de los misiles que se desplegarán.
“Esta situación recuerda los acontecimientos de la Guerra Fría relacionados con el despliegue de misiles Pershing de mediano alcance en Europa”, afirmó.
Los misiles Pershing II, diseñados para transportar ojivas nucleares, fueron desplegados por el Ejército de Estados Unidos en bases estadounidenses en Alemania Occidental desde 1983, ante la alarma de los entonces dirigentes soviéticos.
Fueron retirados tras la introducción del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés) en 1988.
Putin agregó que el desarrollo de armas de ataque rusas de mediano y corto alcance estaba “en las etapas finales” y que Rusia tomaría “medidas recíprocas para desplegarlas”.
En julio, Estados Unidos y Alemania emitieron una declaración conjunta sobre el despliegue de sistemas de armas en Alemania, donde afirmaban que “cuando estén completamente desarrolladas, estas unidades de fuego convencionales de largo alcance incluirán SM-6, Tomahawk y armas hipersónicas en desarrollo, que tienen un alcance significativamente mayor que los actuales fuegos terrestres en Europa”.
Rusia amenazó en varias ocasiones con poner fin a su autodeclarada moratoria sobre el uso de misiles balísticos terrestres de “corto alcance” y de “alcance intermedio”, misiles de crucero y lanzamisiles que podrían usarse para transportar cargas nucleares o convencionales.
Al anunciar la moratoria después de que Estados Unidos se retirara del INF en 2019, el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, dijo que “Rusia se abstendrá de desplegar estos sistemas cuando los adquiramos, a menos que el equipo estadounidense se despliegue en ciertas regiones”.
El tratado, que Estados Unidos y Europa acusaban a Moscú de violar frecuentemente, prohibía esos misiles y era considerado una pieza central de la seguridad europea desde la Guerra Fría.
Rusia pronto siguió los pasos de Estados Unidos y se retiró del tratado, lo que generó temores de una nueva carrera armamentista.
–– DJ Judd de CNN contribuyó a este informe.