Hong Kong (CNN) – Dos hombres se besan en un puente parisino. La cámara salta después a un trío abrazándose apasionadamente en una habitación, antes de que se cerrara la puerta.
Estas son algunas de las imágenes que Francia, organizadora de los Juegos Olímpicos de París 2024, presentó al mundo durante la ceremonia de inauguración la semana pasada.
En China, las escenas se han convertido en un raro punto de celebración para la comunidad LGBTQ+. Fueron retransmitidas en directo a través de cientos de millones de pantallas de televisión por la radiotelevisión estatal del país, sin el obstáculo de la censura habitual que bloquea cualquier contenido que muestre relaciones entre personas del mismo sexo.
China ha tomado medidas enérgicas contra el movimiento LGBTQ+ bajo la presidencia de Xi Jinping, que ha adoptado una visión del país más autoritaria, socialmente conservadora y patriarcal. Los grupos de apoyo se han visto obligados a disolverse, los activistas han sido acosados por la Policía, se han cancelado desfiles del orgullo y se han prohibido películas y programas de televisión de temática homosexual.
La represión ha sido aún más llamativa cuando escenas de homosexuales y drag queens de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París aparecieron en la cadena estatal china CCTV. En la red social Weibo, el hashtag “#Paris opening ceremony is really cool” ha generado más de 600 millones de visitas en los últimos cuatro días.
Ken Huang, de 26 años, gay y residente en Beijing, dijo que la escena le pareció “un sueño irreal”.
“Primero me eché a reír a carcajadas. Me dije: ‘¡Bueno, a cada santo le llega su día! Luego hice rápidamente una foto y se la envié a mis amigos que estaban viendo la retransmisión en directo, y rápidamente la colgué en las redes sociales”, explicó.
Muchos otros se maravillaron de lo que veían. “Los que no se han quedado hasta tarde para ver la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos se lo han perdido. Se han perdido la oportunidad única de ver un beso gay y un trío en CCTV”, escribió un usuario de Weibo de Shanghai durante la retransmisión en directo de la ceremonia a primera hora del sábado.
En muchas partes del mundo, la celebración de la diversidad y la inclusión en la ceremonia ha suscitado polémica y reacciones en contra. Las autoridades olímpicas se disculparon el domingo después de que una escena protagonizada por drag queens y una modelo trans que evocaba La Última Cena de Leonardo da Vinci enfureciera a los grupos cristianos, aunque el director de la ceremonia de apertura afirmó que el famoso mural no había servido de inspiración para la escena.
En China, donde las minorías sexuales siguen sufriendo una discriminación generalizada y el Partido Comunista en el poder las considera una posible amenaza política y moral, también provocó una respuesta divisiva.
En cuestión de horas, los comentarios sobre la ceremonia estallaron en la popular red social china Weibo, con algunos elogiando el progresismo francés.
“En una sociedad verdaderamente diversa e inclusiva, todo el mundo tiene derecho a explorar y disfrutar libremente del sexo sin verse limitado por los tabúes y prejuicios de la sociedad. Este es el verdadero significado de esta escena”, escribió un popular usuario que cuenta con más de 380.000 seguidores.
Pero muchos otros critican lo que consideran una glorificación de las minorías sexuales.
“Los elementos LGBTQ+ son el fracaso de todos los fracasos. Los Juegos Olímpicos son un lugar para el deporte de competición y para la exhibición de deportividad. Y, sin embargo, estos demonios y fantasmas se mostraron … alentados por todo tipo de halagos”, escribió la persona, que tiene 986.000 seguidores.
La ceremonia de apertura de París fue realmente genial
La ceremonia se mantuvo como tendencia en Weibo durante más de 15 horas a partir del sábado. Los expertos señalan que el entusiasmo puede deberse a lo que los espectadores chinos consideran una novedad.
“Las representaciones de diversos géneros y sexualidades han sido relativamente limitadas debido a las regulaciones en China continental”, dijo Suen Yiu-tung, profesor asociado de estudios de género en la Universidad China de Hong Kong.
“El público puede encontrar extrañas estas presentaciones directas de elementos LGBTQ+ en la televisión, aunque relativamente comunes en otras partes del mundo”, añadió.
Suen dijo que algunos en China anhelan el mismo nivel de progresismo.
“Poder ver escenas que incomodan a innumerables personas conservadoras en una emisión en directo de la CCTV, ver el feminismo que se niega a ser silenciado, es suficiente para dar un momento de libertad al alma”, escribió un usuario de Weibo.
“En este mundo lleno de presiones, todavía hay franceses que gritan por el amor y la libertad. Este es el caótico y bello arte de Francia”.
Represión de los movimientos sociales
Si bien las organizaciones no gubernamentales y los activistas han logrado impulsar cambios graduales en la percepción pública de las minorías sexuales a través de campañas de salud, el espacio para la sociedad civil se ha reducido drásticamente en la última década, y los grupos LGBTQ+ se enfrentan a mayores medidas represivas, según críticos y académicos.
En 2020, el Orgullo de Shanghai, la celebración más antigua de China, tuvo que cancelarse abruptamente debido a la creciente presión de las autoridades locales.
Al año siguiente, la aplicación de mensajería más popular del país, WeChat, cerró decenas de cuentas LGBTQ+ gestionadas por estudiantes universitarios, en uno de los actos de censura más generalizados y coordinados contra las minorías sexuales que se habían visto en el país en décadas.
La censura estatal también ha apuntado a otros ámbitos, como la prohibición de los escotes femeninos en televisión. El máximo regulador de los medios de comunicación de China emitió nuevas directrices en 2016 para prohibir los programas de televisión que promueven “estilos de vida occidentales”.
Suen explicó que la reacción se debe en parte a la campaña de Beijing para retratar las expresiones de diversos géneros y sexualidades como “extranjeras”.
“Estas ideas occidentales no son avanzadas, sino más bien retrógradas”, escribió un usuario de Weibo el domingo, quejándose de que Francia haya “forzado” ideas como la diversidad a los espectadores.
Otros usuarios se mostraron simplemente atónitos por la forma en que la ceremonia logró eludir la rigurosa censura china, poniendo a la cadena estatal en una posición incómoda.
Los internautas crearon el hashtag #Los narradores de CCTV han enmudecido# después de que los comentaristas que ofrecían análisis en directo durante la retransmisión en directo cesaran abruptamente cuando se emitieron las escenas LGBTQ+.
“Puede que haya sido la retransmisión en directo de CCTV que más ha traspasado los límites”, señaló un usuario en Weibo.