(CNN) – Rusia se estaba preparando para entregar misiles y otros equipos militares a los rebeldes hutíes en Yemen a finales del mes pasado, pero se retractó en el último minuto en medio de una ráfaga de esfuerzos tras bambalinas por parte de Estados Unidos y Arabia Saudita para detenerlo, dijeron a CNN múltiples fuentes familiarizadas con el asunto.
Los saudíes, que estuvieron enzarzados en una brutal guerra con los hutíes durante años antes de que Estados Unidos ayudara a negociar una frágil tregua en 2022, advirtieron a Rusia en contra de armar a uno de sus mayores adversarios al enterarse de los planes, dijeron las fuentes.
Estados Unidos, que ha estado involucrado en varios esfuerzos diplomáticos para detener a los rusos de armar a los rebeldes respaldados por Irán, pidió por separado a los saudíes que ayudaran a convencer a Moscú de no perseguir el esfuerzo, dijeron dos de las fuentes.
No se ha informado previamente de las conversaciones entre Estados Unidos y Arabia Saudita ni de la inminente transferencia de armas. La embajada saudí en EE.UU. declinó hacer comentarios y el Kremlin no devolvió una solicitud de comentarios.
Estados Unidos designó a los hutíes como organización terrorista global en enero, tras meses de ataques hutíes con misiles y aviones no tripulados contra la navegación comercial en el mar Rojo que causaron la muerte de varios marineros y obstaculizaron el comercio mundial. Sin embargo, a pesar de varias rondas de sanciones y ataques militares estadounidenses contra la infraestructura armamentística hutí, los rebeldes han seguido atacando buques comerciales en la crucial vía fluvial.
Un alto funcionario estadounidense se negó a discutir los detalles de los planes de Rusia para armar a los hutíes. Pero el funcionario dijo que EE.UU. considera cualquier intento de un tercero para reforzar los suministros de armas de los hutíes “como antitético a los objetivos que perseguimos” cuando se trata de lograr un acuerdo de paz duradero en Yemen entre los hutíes y los saudíes, y ayudar a estabilizar la región. Además, que los hutíes participen en ese tipo de transacciones de armas “nos demostraría la falta de compromiso” de los mismos con las conversaciones de paz, dijo el funcionario.
En la actualidad, los hutíes “parecen estar alejándose cada vez más de un compromiso con una paz negociada en Yemen”, dijo el funcionario.
Buques rusos en el mar Rojo
La comunidad de inteligencia estadounidense sigue sin tener claro si el retroceso de Arabia Saudita fue la clave para que Rusia abandonara su plan de armar a los hutíes, o si fue sólo uno de los diversos factores que llevaron al presidente de Rusia, Vladimir Putin, a cambiar de opinión, dijeron las fuentes.
Los rusos han considerado que armar y asesorar a los hutíes es una forma de tomar represalias contra el Gobierno de Biden por su decisión de permitir que Ucrania ataque dentro de territorio ruso utilizando armas proporcionadas por Estados Unidos, según las fuentes.
Y aunque se retiró la inminente transferencia de armas, Rusia desplegó personal militar en Yemen para ayudar a asesorar a los hutíes durante un período de tres días a finales de julio, dijeron las fuentes.
Funcionarios estadounidenses observaron cómo grandes barcos rusos hicieron una parada inusual en el sur del mar Rojo, donde el personal ruso desembarcó, fue recogido por los hutíes en un barco y trasladado a Yemen, dijeron las fuentes.
Los rusos llevaban consigo bolsas, pero nada que pareciera lo suficientemente grande como para transportar armas o componentes de armas, dijeron las fuentes. No está claro si los barcos rusos transportaban el material que Rusia había estado preparando para transferir a los hutíes antes de que el Kremlin abandonara el plan.
Antes y durante la visita de los rusos a Yemen, los hutíes tomaron la inusual medida de emitir un aviso a navegantes, que alerta a los barcos de posibles peligros en el mar. Un funcionario estadounidense afirmó que los servicios de inteligencia habían indicado que los hutíes tenían la intención de realizar ejercicios con fuego real mientras recibían a los rusos, pero parece que esos planes también se han desechado.
Los hutíes comenzaron sus ataques casi diarios contra buques que transitaban por el mar Rojo en noviembre de 2023, lo que llevó a Estados Unidos y Reino Unido a realizar varias rondas de ataques aéreos dentro de Yemen para tratar de eliminar su infraestructura armamentística.
Los ataques no parecen haber afectado significativamente a los arsenales de los hutíes, y el grupo rebelde incluso dio muestras de estar dispuesto a vender algunas armas al grupo combatiente somalí al-Shabaab en junio, según informó anteriormente CNN. Pero su suministro no es infinito, sobre todo porque Estados Unidos ha sancionado en los últimos meses a varias entidades, principalmente de China y Omán, que se cree que suministran componentes armamentísticos al grupo.
Los hutíes también necesitan especialmente nuevos sistemas de radar, que las fuerzas del Comando Central estadounidense han atacado regularmente para intentar neutralizar los ataques con misiles de los hutíes.
También ha habido indicios de que el principal patrocinador de los hutíes, Irán, ha mostrado cierta preocupación por la estrategia de ataque del grupo, mientras que Rusia ha criticado los ataques de Estados Unidos y Reino Unido contra los hutíes.