(CNN) – Rusia acusa a las tropas ucranianas de cruzar la frontera hacia su región de Kursk, lo que, de confirmarse, supone la primera incursión de este tipo desde Ucrania y pone bajo presión a Moscú en una zona en gran medida no afectada por la guerra que ya lleva más de dos años.
El Ministerio de Defensa de Rusia, el Comité de Investigación ruso y el Defensor del Pueblo para los niños en Rusia afirmaron que las fuerzas ucranianas habían lanzado un “ataque masivo” el martes, intentando romper las defensas rusas en las fronteras de la región de Kursk, situada justo al norte de la región ucraniana de Sumy.
El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó la supuesta incursión como una “provocación a gran escala”, diciendo que Kyiv había llevado a cabo “un tiroteo indiscriminado con diversos tipos de armas, incluyendo misiles, contra edificios civiles, edificios residenciales y ambulancias”.
Las autoridades ucranianas no hicieron comentarios al respecto y CNN no puede verificar las afirmaciones de forma independiente.
Autoridades rusas y blogueros militares dijeron que las fuerzas ucranianas atacaron por tierra y aire para entrar en Rusia cerca de la localidad de Sudzha, a unos 10 kilómetros de la frontera.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que unos 300 tropas, apoyadas por tanques y vehículos blindados, atacaron posiciones rusas cerca de los pueblos de Nikolayevo-Daryino y Oleshnya.
Inicialmente, el ministerio dijo que el ataque fue repelido, pero esa declaración fue posteriormente corregida para decir que “al enemigo se le están infligiendo daños por fuego”.
Aleksey Smirnov, jefe de la región de Kursk, declaró el miércoles que varios miles de personas habían abandonado la zona en las últimas 24 horas.
No está claro por qué las fuerzas ucranianas lanzarían un ataque de la magnitud descrita por las autoridades rusas.
Las tropas ucranianas se han visto sometidas a una presión cada vez mayor a lo largo de los más de 965 km de la línea del frente mientras Moscú prosigue su lenta y agotadora ofensiva, por lo que podría tratarse de un intento de desviar los recursos rusos a otra parte. Dada la racha de acontecimientos más negativos desde la línea del frente, la noticia de una incursión con éxito ayudaría a Kyiv a elevar la moral de sus tropas y de la población civil.
De confirmarse, el ataque supondría un importante avance en el conflicto, aunque su impacto inmediato sea limitado.
Aunque ha habido informes de grupos de sabotaje proucranianos que han cruzado a Rusia, ninguno ha causado daños significativos. El ejército ucraniano ha atacado regularmente objetivos dentro de Rusia con drones y misiles, pero Kyiv no ha lanzado ninguna incursión terrestre oficial a través de la frontera en los dos años y medio transcurridos desde el inicio de la guerra a gran escala.
El Instituto para el Estudio de la Guerra, un grupo de seguimiento de conflictos con sede en Estados Unidos, dijo que había geolocalizado imágenes publicadas el 6 de agosto que muestran vehículos blindados dañados y abandonados a unos 7 kilómetros al norte de la frontera, pero dijo que no podía confirmar si eran rusos, ucranianos o de ambos países.
Mientras tanto, las fuerzas rusas se han ido acercando a la ciudad de Pokrovsk, de importancia estratégica en el este de Ucrania, amenazando una línea de suministro ucraniana vital. Al mismo tiempo, las fuerzas rusas afirman haber tomado el pueblo de Niu York y se acercan a Toretsk.
Por su parte, el portavoz de Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la Unión Europea, Peter Stano, le dijo a la emisora pública ucraniana Suspilne News que la UE no ve ningún problema con la incursión de Ucrania en la región de Kursk en territorio ruso.
Stano afirmó este miércoles que, según el derecho internacional, Ucrania “tiene el derecho legal de defenderse, incluso de golpear al agresor en su territorio”.
“La Unión Europea sigue apoyando plenamente el legítimo derecho de Ucrania a la defensa contra la agresión rusa y sus esfuerzos por restaurar la soberanía y la integridad territorial”, afirmó.