El entonces presidente de Argentina Alberto Fernández llega a un seminario sobre inclusión y diversidad organizado por la CELAC en el CCK el 18 de agosto de 2022 en Buenos Aires, Argentina.

(CNN Español) – La causa por violencia de género que impulsó la ex primera dama de Argentina, Fabiola Yáñez, contra su entonces pareja el expresidente Alberto Fernández, sigue avanzando.

En las últimas horas, CNN accedió al expediente en el que el fiscal Ramiro González rechaza el pedido de la defensa del expresidente que buscaba remitir la causa a la justicia federal de San Isidro. Fernández pedía cambiar la jurisdicción alegando que los presuntos hechos denunciados habían ocurrido en la Quinta de Olivos. Sin embargo, el fiscal rechazó el pedido y solicitó que la causa permanezca en los tribunales federales de Comodoro Py.

El argumento de González, según el documento obtenido por CNN, es que la violencia que alega haber sufrido Yáñez habría iniciado en el 2016 en el departamento donde convivía la pareja, ubicado en el barrio porteño de Puerto Madero, y que la violencia denunciada “no puede asignarse, de momento, a un enclave geográfico único”. Con esta resolución, el expediente continuará en manos del juez federal Julián Ercolini.

Otra de las aristas dentro de esta causa es el presunto conocimiento de la situación por parte de la entonces ministra de las Mujeres, Ayelén Mazzina. Yáñez había expresado que ella sabía de los episodios de violencia y que “no hizo nada”, declaración que puso a la exfuncionaria en la mira de los investigadores.

La abogada de Fabiola Yáñez presentó ante la justicia los mensajes que su representada dice que intercambió con Mazzina según confirma a CNN una fuente con acceso a la causa. De estos mensajes se desprende que la exministra se comunicó el 4 de agosto con la ex primera dama, luego de que se dieran a conocer públicamente los presuntos hechos de violencia de género. En los chats, Mazzina rechaza las acusaciones de Yáñez. El fiscal Ramiro González ordenó la apertura de un legajo aparte para clarificar los hechos.

Mazzina ya se expresó en forma pública sobre las acusaciones. Primero dio su versión en la red social X y aseguró que “nunca” estuvo al tanto de la situación de violencia que denuncia la ex primera dama. Después, declaró ante la justicia a través de un escrito “con el fin de desmentir categóricamente las afirmaciones que han circulado en relación a mi supuesto conocimiento sobre la situación de violencia de género que habría sufrido la ex primera dama, Fabiola Yáñez, por parte del expresidente de la Nación, Alberto Fernández”, afirmó la exfuncionaria.

El expresidente de Argentina Alberto Fernández con su entonces pareja Fabiola Yañez el 27 de octubre de 2019 en Buenos Aires, Argentina.

La tercera novedad en la causa es que la defensa de Alberto Fernández reclamó la devolución del teléfono que le fue secuestrado por la justicia como parte de la investigación.

El dispositivo había sido secuestrado para verificar si el expresidente había violado las medidas de restricción respecto a Yáñez, según confirma a CNN una fuente con acceso al expediente. La defensa de Fernández sostiene que el expresidente no incumplió la orden judicial que le impedía contactarse con ella, y que no correspondía ni el allanamiento a su domicilio ni el secuestro de sus dispositivos electrónicos.

Ahora, el fiscal Carlos Rívolo, a cargo de la investigación en la causa de los Seguros, que investiga el presunto direccionamiento de contratos estatales a través de un productor vinculado a Alberto Fernández, también pidió inspeccionar la información del celular. La palabra final sobre el destino de los dispositivos la tendrá el juez Ercolini.

CNN contactó a la defensa de Alberto Fernández para obtener comentarios, pero todavía no obtuvo respuesta.

Fernández había afirmado en una entrevista exclusiva que concedió al diario español El País que hubo discusiones “vehementes” con Yáñez, pero negó los hechos de violencia. “No he golpeado a Fabiola. Nunca he golpeado a una mujer”, dijo. Antes, había dicho en su cuenta de X que “la verdad de los hechos es otra”.

Nacho Girón, de CNN, colaboró con este reporte.